martes, 4 de agosto de 2020

Para Dios no Hay Nada Imposible

“Porque nada imposible hay para Dios” Lucas 1:37.
La sorpresa de la joven María era muy grande, no solo por la aparición de un ángel cerca de ella, sino por la naturaleza del mensaje que le traía. Ella sería el canal a través del cual nacería un niño, y su nombre sería Jesús. Su asombro fue roto por las palabras del ángel que le añadía: Porque nada imposible hay para Dios.
Para Dios no hay NADA imposible. (con imágenes) | Dios, Frases ...Hoy, necesito dejar que las mismas palabras centelleantes alumbren en mi alma, porque los mensajes que recibo no soy muy alentadores y creo que es necesario reflexionar, que Dios no ha cambiado y todavía no hay nada imposible para Dios.
Mi vida religiosa de cada día debe ser una prueba de que Dios trabaja sobre imposibles. Mi vida religiosa debe ser a cada momento una demostración de las posibilidades de Dios, obrando en medio de una serie de imposibilidades que demuestran así el poder y la maravilla de Dios. El Dios que adoramos es el único Dios y no hay otro, Él es el poderoso y a Él debemos conocer y entender.
Hoy tengo la oportunidad de conocerlo más, entenderlo más y adorarlo más. Hoy no es el día para conocer un poquito de Dios, hoy tengo la gran oportunidad de conocer la plenitud del Dios omnipotente, quien mora en mí y quien ha prometido estar conmigo todos los días hasta el fin del mundo.
Cada día las imposibilidades me amenazan porque en este mundo se exaltan con frecuencia las imposibilidades. Aunque estas imposibilidades que son exaltadas, son al mismo tiempo el terreno fértil donde puedo ver germinar las posibilidades de Dios en toda su magnitud y su fuerza, no para vanagloria del hombre sino para la exaltación de Dios en toda su majestad y grandeza. Hoy tengo la oportunidad de acercarme a Dios y permitir que su poder y su gloria operen con fuerza.
Señor, gracias por ser el único y poderoso Señor. Gracias por darme la oportunidad de ser tu hijo, y como hijo contemplar la belleza de tu gracia y de tu poder. Cuando llegué a tus pies por primera vez, jamás imaginé la forma como vería tu poder en acción frente a las imposibilidades de la vida, y ahora veo tu gloria y tu fuerza en los cielos, en la tierra y también en mi vida. Hoy nuevamente, quiero reflexionar en que para ti no hay nada imposible. Ante tu gloria las sombras de lo imposible se desvanecen y se deshacen. Amén.

Un Dios que cumple su Palabra

Una cosa segura en la vida es el cumplimiento de las promesas y palabras que Dios nos da, pues cuando Él ha tenido a bien hablarnos o darnos alguna promesa, es imposible que algo o alguien la cambie. Nada puede interponerse ante una palabra suya, nada la influye, nada la estorba; si Él lo dice es un hecho.
A veces al pasar por momentos de confusión, comenzamos a dudar sobre lo que Dios ha prometido; al ver lo complicado que es lo que estamos viviendo, comenzamos a desesperarnos y angustiarnos, como si por momentos pareciera que olvidáramos las grandes cosas que Dios puede hacer. Nos sucede como a Pedro, cuando a pesar de saber y haber visto los milagros de Jesús, tuvo miedo y comenzó a hundirse en las aguas… ”Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame! Al momento Jesús, extendiendo la mano, asió de él, y le dijo: ¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?” Mateo 14:30,31. Pedro sabía y conocía el poder de Dios, nadie se lo había contado, él mismo lo había visto en los lugares donde Jesús había hecho milagros, pero cuando lo único que tenía que hacer era caminar confiado hacia Jesús, el agua, el viento y las circunstancias lo hicieron dudar y terminaron por hundirlo.
También en ocasiones, a nosotros nos pasa algo similar; es normal que, a pesar de saber y conocer que el poder de Dios no tiene límites, veamos las circunstancias y dudemos si saldremos de ellas. Nuestra vida comienza a tambalearse, sentimos que nos hundimos y suplicamos por la ayuda de Dios. En esos momentos olvidamos que tenemos un Dios que nunca ha faltado a su palabra y que sigue siendo el mismo de aquellos tiempos.

La carne vs. El Espíritu

Romanos 8:13 porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis.
Desde el principio de la creación vemos que el bien y el mal se oponen entre sí, por el simple hecho de ser muy diferentes. Actualmente quizá no sea visible algo o alguien que represente, a la vista de todos, tanto el bien como el mal. Pero si analizamos esto dentro del ámbito espiritual, nos daremos cuenta de que hay dos puntos claves que caracterizan perfectamente a estos dos polos totalmente opuestos. El bien es representado por el ESPÍRITU y el mal es representado por la CARNE.

I. La batalla interna (Gálatas 5:17)

Carne vs espírituPorque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y estos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisierais.
La carne y el espíritu se oponen entre sí para que no hagamos lo que queramos, porque tanto el uno como el otro quieren que uno haga lo que ellos quieren; es obvio que sus deseos se oponen entre sí.
Uno como cristiano debiera siempre dejarse guiar por el Espíritu de Dios que está en nosotros, pues el ocuparse de Él es vida y paz. Por el contrario la carne lleva a la muerte; los que son de la carne piensan en las cosas de la carne y los que son del espíritu piensan en las cosas del espíritu.

II. No vivimos según la carne (Romanos 8:8-9)

...y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios. 9 Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él.
Nosotros los cristianos no vivimos según la carne (si es que el espíritu de Dios mora en nosotros). Tenemos que orar y velar ya que el espíritu está dispuesto a un área sobrenatural.

sábado, 1 de agosto de 2020

La soberbia y sus efectos

Porque mejor es la sabiduría que las perlas, y no hay cosa deseable que se le pueda comparar. Yo, la Sabiduría, habito con la cordura y tengo la ciencia de los consejos. El temor de Jehová es aborrecer el mal: yo aborrezco la soberbia, la arrogancia, el mal camino y la boca perversa. Conmigo están el consejo y el buen juicio. Yo soy la inteligencia, y mío es el poder. Proverbios 8:11-14 
Hay que remarcar que en todo el capítulo 8 de proverbios se nos habla sobre la importancia de la sabiduría y sus bendiciones, pero hay solo un versículo que nos menciona lo que Dios aborrece (verso 13), y nos dice que el Señor aborrece la soberbia y la arrogancia, el mal camino y la boca perversa. 
No seas soberbio ni arrogante. La arrogancia causa efectos ...De estas cuatro cosas hay una de ellas que tiene muchos efectos negativos, tanto para nuestra vida como para nuestra familia: LA SOBERBIA. 

Por medio del capítulo 8 de proverbios nos damos cuenta que la sabiduría, la ciencia de dar consejos, la cordura y el buen juicio, se verán siempre afectados por la soberbia y la arrogancia que hay en nuestra vida. 
Según la psicología ¿qué es ser una persona soberbia? Son personas que aparentan ser superiores o más valiosos que los demás, y que sus actitudes o sus comentarios van dirigidos a hacer que las personas que los rodean o conviven con ellos se sientan mal. Se dice también que la soberbia es un rasgo de la personalidad típica de alguien narcisista, egocéntrico y orgulloso. Se ha llegado a determinar también, que el origen de una personalidad soberbia puede residir en una gran inseguridad y baja autoestima. Es decir, que en realidad el soberbio es una persona muy necesitada del amor, de la sanidad y la restauración de Dios, pero que desgraciadamente no quiere reconocerlo. 

Veamos ahora algunas de las características de una persona soberbia: 
● No son capaces de admitir sus errores: Piensan que siempre toman las mejores decisiones y que nunca se equivocan. 
● Creen que siempre tienen razón: Creen que ellos siempre están en lo correcto y que son los demás los equivocados. 
● Les cuesta mucho pedir perdón, pues pedir perdón significa reconocer que se han equivocado. 
● Quieren ser siempre halagados: Ya que muchas veces su autoestima es baja, y necesitan sentirse aprobados y halagados por lo que han hecho. 
● Pueden tener actitudes y palabras hirientes: Son personas que no toleran las críticas ajenas, y por su reacción pueden hacer mucho daño con sus palabras, con el objetivo de hacer sentirse inferior a la persona que le da un consejo o le hace una crítica. 
● Son personas que solamente hablan de sus logros: Hablan constantemente de lo bien que lo hacen todo y solamente de sus éxitos. 

Estas características nos tienen que servir no solamente para reconocer a los soberbios con los que nos relacionamos, sino también y principalmente para evaluarnos cada uno de nosotros, pues muchas veces vemos la soberbia en los demás y no reconocemos la nuestra, y por eso tenemos muchos problemas con nuestra familia, con nuestros vecinos, compañeros de trabajo y hermanos de nuestra iglesia. 

Bienvenida, incredulidad de Tomás

En alguna ocasión me dije: “Creo, por eso a veces dudo”, toda vez que una fe sincera, auténtica, no es ciega ni pasiva ni sumisa ni dogmática. Por el contrario, es dinámica, activa, motivadora, infunde esperanza, es motor de vida. Y a veces, por muy buenos creyentes que seamos, el incrédulo interior que está dentro de nosotros, asoma en el escenario de la vida. No hay persona sincera que niegue esta verdad. Todos en algún momento de la vida, afrontamos un mar de preguntas. En cuanto generamos nuevas luces, estas generan más sombras; hasta a veces son más las dudas que las certezas.
La debilidad de la fe de Tomás, fuente de gracia para la IglesiaLa culpa, el desánimo, la frustración y la desesperanza, amigos inseparables de la incredulidad acuden pronto al llamado. ¡Cuidado! Una ovejita solitaria lejos del rebaño, es blanco fácil de las patrañas del Gran Mentiroso (Juan 8:44).
Tomás tuvo el gran privilegio de conocer personalmente a Jesús, y aún así, afrontar un mar de dudas. Cuando Jesús le invita a coger sus manos, a tocar su costado, sentir las cicatrices de su cuerpo, pudo entonces identificarse con el dolor de Dios, con el inconmesurable amor de Dios, reconocer la herida del Todopoderoso.
“-¡Señor mío, y Dios mío!” fue el estallido de fe que se reveló en ese instante, cual relámpago que transforma una negra noche en día, en el alma de Tomás (Juan 20:28).
Aunque Tomás se llevó una amorosa pero enérgica reprimenda de parte del Señor (Juan 20:29), hoy, a poco más de dos mil años de aquella escena, no podemos por menos que prorrumpir en alabanzas a nuestro Dios, exclamando como Tomás “¡Señor mío y Dios mío!”, y dar las gracias desde lo más profundo del corazón por la incredulidad, por el escepticismo de nuestro amado hermano Tomás, a quien, un poco más de tiempo y habremos de conocer personalmente.
Hoy ya no siento culpa por mis dudas, la actitud de Tomás me infunde aliento para enfrentarlas, me da valor para ir al altar del Altísimo y clamar delante de Su Presencia como los apóstoles… porque esa es exactamente la clase de fe que quiero, la que proviene del Altísimo; mas no la mía, que es fluctuante, permanentemente invadida, amenazada por sentimientos y emociones variables y engañosas del corazón del hombre natural.

Dijeron los apóstoles al Señor: Auméntanos la fe.

(Lucas 17:5 RV60)

El verdadero sacrificio

Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios. Salmo 51:17
Los sacrificios para los Israelitas implicaban una ofrenda de las mejores ovejas, becerros, etc., de ellos hacia Dios, que entregaban al templo en Holocausto para la purificación de sus pecados, para vivir en gracia y santidad delante de Dios.
David, muy recordado en nuestro caminar cristiano, considerado en la palabra como el hombre conforme al corazón de Dios y destacado por esto en el nuevo testamento en Hechos 13:22, nos enseña mediante el Salmo 51:16-17, perlas preciosas para nuestra vida cristiana con el verdadero sacrificio que debemos presentar a Dios, las cuales encontramos a continuación:

El verdadero sacrificio implica ser sensible a la voz del Espíritu Santo

Sacrificio vivo | Ley de VidaEl Salmo 51 es conocido por nosotros como el texto con el que, arrepentido, pidió purificación el entonces necio de David, después de ser contrastado por el Profeta Natán por el pecado que cometió con Betsabé. El contexto es el siguiente, para llegar a la idea clave de este punto.
Natán, en 2 Samuel 12: 1-25, es enviado por Dios para reprender las acciones de David frente al adulterio y asesinato que contra Urías el heteo cometió David, quien tuvo en poco la palabra de Dios de guardar sus mandamientos.
Imaginen ustedes a Natán actuando en aquel tiempo bajo la obra de Dios todopoderoso, sacudiendo la conciencia del rey con una historia que indignó a David, y que al mismo tiempo Dios le dio la sabiduría al profeta de confrontarlo; y sí, las acciones ya presentadas por este Rey famoso por sus hazañas y cánticos, en este caso ofendieron a Dios dando vida a este Salmo, cita base de esta enseñanza, para mostrar que Dios quiere que estemos atentos al Natán de nuestros días, quien es el Espíritu Santo.
El Espíritu Santo es quien nos redarguye frente al pecado, y nos convence de que no estamos actuando bien y que estamos negando a Jesús con los actos. Juan 16:8.
Por esto debemos tener en cuenta que para ofrecer un sacrificio verdadero a Dios, debemos tener nuestros oídos atentos al Espíritu Santo, y dejar que Él nos confronte frente a las acciones que nos alejan del propósito de Dios.

miércoles, 29 de julio de 2020

La Obediencia como prueba de nuestra FE

“Porque vuestra obediencia ha venido a ser notoria a todos, así que me gozo de vosotros; pero quiero que seas sabios para el bien, e ingenuos para el mal”.
Romanos 16:19
El cristianismo es algo muy simple y sencillo, y a la vez complejo. A veces difícil de entender, pero realmente fundamental y trascendental; es una puerta estrecha que nos lleva por caminos desconocidos, que nos enseña acerca de la vida y cómo debemos conducirnos en ella, y también nos habla de una realidad espiritual que podemos experimentar paulatinamente, para ir madurando y creciendo en gracia, amor, sabiduría y paz. 
La obediencia a Dios es la llave para la libertad - IMAGENES ...Inicialmente somos como bebés espirituales (venimos a tener un segundo nacimiento en el Espíritu). Aceptamos a Cristo como nuestro Señor y Salvador, y aunque aparentemente nuestra vida continúe igual, con todas sus contradicciones y frustraciones, ya nunca más volverá a ser de la misma forma; esa semilla de vida que fue sembrada en nosotros, comienza a crecer y a fortalecerse hasta llegar a ser primero un arbusto, luego un arbolito, y después un frondoso árbol cuyos frutos comienzan a brotar y es imposible ocultarlos.
Y la base de este crecimiento, madurez y frutos, es una sola: La Obediencia. Hablar de obediencia es más fácil que practicarla; se trata de escoger entre mis propios sentimientos y deseos, lo que quiero y puedo y lo que no, confrontándome a mí mismo. Al final pasa que aunque yo quisiera, ya no puedo seguir mis propios pasos, ni siquiera hacer mi entera voluntad conforme a mí me plazca, ni apoyarme en mi propia sabiduría o lógica. La vida que ha crecido en mí (en Espíritu) no me lo permite, pues amonesta mi conciencia, me roba la paz y me siento intranquilo, pues ya no soy ni sordo ni ciego para no oír, entender, ver y discernir la voz de Dios.

¿Dónde está Dios?

Esta es una pregunta que las personas se hacen principalmente en los tiempos de dolor, de angustia y de aflicción, pues desgraciadamente esas mismas personas en tiempos de abundancia, de paz, de alegría, no se preocupan en buscar a Dios. Pero es una pregunta que en estos tiempos de pandemia, vale la pena responder por medio de la palabra de Dios. 

Ante todo tenemos que reconocer que lo que a muchos les lleva a hacerse esa pregunta es el silencio de Dios, pues aunque oramos y clamamos, pareciera que las cosas no cambian nada, y nos angustia no tener una respuesta inmediata de Dios. Pero tenemos que saber que Dios no está en silencio, Él ya habló, y en su palabra nos ha dado preciosas promesas para los tiempos de aflicción. No es que Dios esté en silencio, es que no creemos lo que dijo. (2 Corintios 1:20) Ahora respondamos la pregunta ¿dónde está Dios?

Y donde está Dios no falta nada. (con imágenes) | Frases bonitas ...
 I) Él está en su trono, Él tiene el control, tiene la última palabra en este mundo (Salmo 103:19). A pesar de los tiempos de incertidumbre que estamos viviendo, a pesar de que ni los gobernantes saben exactamente qué hacer para superar esta crisis de la pandemia, debemos confiar en que Dios está en control, que Dios sabe lo que está haciendo, y Él sigue teniendo la última palabra. 

II) Dios se manifiesta en todos los que nos ayudan (Salmo 118:7). Muchos se preguntan ¿dónde está DIos?, y no se dan cuenta que Dios está en todos los que nos ayudan; en las personas que nos han apoyado en este tiempo de necesidad y escasez, en las personas que nos han visitado para orar por nosotros en los tiempos de enfermedad, en los médicos que nos han atendido, en los hermanos de nuestra iglesia que nos han visitado para llevarnos palabras de ánimo y de consuelo... No es que Dios no esté con nosotros, es que no lo hemos reconocido.

III) Podemos ver al Señor en todos los que tienen necesidad (Mateo 25:35-40). Podemos ver a Jesús en los que no tienen qué comer, en los enfermos, en los abandonados, en los desamparados... Lamentablemente, muchas personas al ver el dolor de las familias que no tienen qué comer, que están desnudos y abandonados, se preguntan ¿dónde está DIos? Y no se dan cuenta que podemos ver a Jesús en nuestro prójimo; todo lo que hacemos por el necesitado lo hacemos para el Señor y TODO tendrá su recompensa. 

IV) Dios está esperándonos con los brazos abiertos (Juan 6:37) Dios siempre está esperando por nosotros para salvarnos, para consolarnos, para sanarnos, para restaurarnos. Es decir, que no se trata de preguntar ¿dónde está Dios? Tenemos que buscarlo y acercarnos a Él porque Él siempre nos recibirá con misericordia.

No somos puros, pero Él nos purifica

Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.” (1 Juan 1:9)

No nos alejemos de Dios por nuestra impureza.

Si somos conscientes en nuestra nada, de nuestro pecado, nos sentiremos impuros. Y esto puede ser motivo para que nos alejemos de Dios, al sentirnos indignos de estar en su presencia. Sin embargo, debe ser lo contrario. Cuanto más impuros nos sintamos, más rápido tenemos que buscarlo y confesar nuestra culpa.
17 Versículos de la Biblia sobre la Purificación - DailyVerses.netÉl tiene el poder y la misericordia para limpiarnos de nuestro pecado. Solo Él puede hacer que nuestro espíritu manchado quede limpio ante sus ojos. Y no por mérito nuestro, sino por la intercesión de su Hijo que vino a rescatarnos de la muerte del pecado. Por eso tenemos que tener confianza, porque tenemos un mediador, que es Cristo. (1ª Timoteo 2:5)
Sabemos que Jesús cuando vino a la tierra, vino a rescatar a los pecadores. Muchas veces se lo vio sentado a la mesa con ellos, y por eso fue muy criticado. Pero Él siempre respondía que los sanos no son los que necesitan de un médico, sino los enfermos. Tenemos que reconocer nuestra enfermedad, para que el Señor pueda actuar en nosotros y limpiarnos de nuestras faltas.
La falta de confianza en la misericordia de Dios puede ser tan grave como el olvido de su ley. Porque implica que nos hemos quedado con la imagen de un Dios vengativo, castigador, que quiere nuestra condenación si no somos perfectos. Pero Dios conoce nuestras limitaciones, sabe mejor que nosotros nuestras debilidades. Debemos confiar en que nos abrirá sus brazos y nos recibirá nuevamente en su casa.