Una de las cosas más importantes que podamos hacer es demostrar sinceramente agradecimiento a nuestros amigos, decírselo.
Mi buen amigo:
Cuánto me gustaría ser
la ayuda que tú has sido para mí.
De los muchos por los que oro, tú eres
uno por el cual le pido a Dios
ricas bendiciones, de las más selectas que posee
y te conceda su benevolente cuidado…
Cuando yo recuerdo, de cuando en cuando,
cómo has inspirado mi corazón,
me encuentro inclinado orando...
que Dios bendiga a mi amigo hoy.
Con mucha frecuencia, ante su trono de Gracia,
me viene el recuerdo de tu rostro.
Y entonces, instintivamente, oro
para que Dios te guíe todo el camino…
Espero algún día estar parado contigo
delante del trono, a la diestra de Dios.
Y decirte, al final del camino:
Alabado sea el Señor, porque tú has sido mi amigo
A Dios Doy Gracias por ti.
Las dos palabras más valiosas: Muchas Gracias.
La palabra más importante: Nosotros
La menos importante: Yo
La palabra más importante: Nosotros
La menos importante: Yo
Filipenses 2:3
Nada hagáis por vanidad… sino que con actitud humilde, cada uno de vosotros considere al otro como más importante que a sí mismo.
Nada hagáis por vanidad… sino que con actitud humilde, cada uno de vosotros considere al otro como más importante que a sí mismo.