martes, 1 de septiembre de 2015

El Toldo

En el residencial donde vivo casi todos los apartamentos tienen los toldos puestos. La función principal de los mismos es evitar que entre la luz del sol de manera directa, así como proteger el apartamento de los tiempos de lluvia. O sea, el toldo tiene una función protectora para el apartamento.
La Palabra de Dios dice en 1ra. Pedro 5:6-10 “Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que Él os exalte cuando fuere tiempo; echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros. Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo. Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca”.  También dice en Santiago 4:10 Humillaos en la presencia del Señor y Él os exaltará”.
RECUERDA, ASÍ COMO EL TOLDO TIENE UNA FUNCIÓN PROTECTORA DONDE ES COLOCADO, ASÍ MISMO LA MANO DE DIOS NOS CUBRE Y PROTEGE SI YA TENEMOS A CRISTO JESÚS EN NUESTRA VIDA. DIOS PROLONGA SU MISERICORDIA SOBRE NOSOTROS, Y SUS MISERICORDIAS SON NUEVAS CADA MAÑANA. ES IMPORTANTE E IMPRESCINDIBLE QUE ÉL ESTÉ CONTIGO CUBRIENDO CADA UNO DE TUS DÍAS. Y LA FORMA DE QUE ÉL EMPIECE A ESTAR CONTIGO ES QUE LO RECONOZCAS COMO REY, SEÑOR Y SALVADOR PERSONAL. ¿TIENES YA A CRISTO JESÚS EN TU VIDA?

Los cielos cuentan la gloria de Dios

Él lleva un arpa al mar... cuando veas a quién le va a tocar, te sorprenderás.

El sonido de la música del arpa es sublime , pero no tenía ni idea de por qué querría llevarla al mar. Yo no podía apartar la mirada cuando lo usó para realizar una "llamada". ¿Espectacular, verdad ?
Usted probablemente esté familiarizado con el misterioso “canto de las ballenas.” Es el lenguaje inquietante que usan muchas especies de ballenas para comunicarse.
Cuando la empresa de telecomunicaciones australiana Optus comenzó a investigar formas del concepto de comunicación, tuvieron la idea de una canción de ballenas como una forma de la interacción que ayuda a los seres humanos a entender mejor a estos majestuosos animales.
Decidieron crear una pieza de música orquestal con instrumentos, para recrear la llamada de una ballena jorobada. Una vez que la música fue escrita, llevaron la orquesta al mar, cerca de la isla de Tonga. No se podían imaginar cómo reaccionarían las ballenas a su creación.
Esta pieza musical fue diseñada muy específicamente para emular las canciones de amor de las ballenas jorobadas. En los últimos cinco años, los científicos han aprendido más y más sobre el increíble poder de estas complejas canciones de improvisación, conocimientos que crecen y cambian a medida que avanzan en su estudio.
La melodía es un homenaje verdaderamente inquietante a algunas de las criaturas más misteriosas de las profundidades, y un precioso homenaje a sus habilidades de comunicación de otro mundo.
Salmos 19:1
Los cielos cuentan la gloria de Dios, Y el firmamento anuncia la obra de sus manos.
Job 12:7-10 
7 Pero interroga a los animales, 
y ellos te darán una lección; 
pregunta a las aves del cielo, 
y ellas te lo contarán; 
8 habla con la tierra, y ella te enseñará; 
con los peces del mar, y te lo harán saber. 
9 ¿Quién de todos ellos no sabe 
que la mano del SEÑOR ha hecho todo esto? 
10 En sus manos está la vida de todo ser vivo, 
y el hálito que anima a todo ser humano.

Su deleite es bendecirte

“Exaltado sea el Señor, quien se deleita en el bienestar de su siervo.”
Salmo 35:27 (Nueva Versión Internacional)
Nuestro Dios no solamente bendice, se deleita más en hacerlo. Y aún más con Sus hijos. La misericordia y el amor de Dios son infinitos. Él es la fuente de todo, y se agrada en bendecir desde el más grande hasta el más pequeño. A aquellos que lo conocen y a aquellos que no, incluso a los animales. Dios hace que el sol salga tanto para justos como para injustos. Él bendice con el regalo de la vida a aquellos que habrán de reconocerlo cómo único Dios, al igual que aquellos que se negarán a hacerlo. Nuestro Dios tiene cuidado de la vegetación, incluyendo en Su ley la protección de ella (Deuteronomio 20:19). Nuestro Dios bendice incluso a los animales, importándole a Él su bienestar y valorando lo que ellos hacen por el hombre (Deuteronomio 25:4). La naturaleza de Dios es bendecir, y más aún, se deleita en bendecir a los suyos. Si Dios se deleita en bendecirnos, no debemos dudar respecto a las bendiciones que anhelamos. No obstante, busquemos estar alineados con las bendiciones que quiere Dios para nuestras vidas.
Si aún no tienes esa bendición que anhelas, quizá Dios tenga algo mejor para ti. O tal vez no ha terminado de preparar tu corazón para recibirlo. Pero da por seguro que Dios no solamente quiere, sino que se deleita en bendecirte. Así que, sea lo que sea que Dios tenga como bendición para ti, será lo mejor. Dado que Él bendice incluso a aquellos que no lo conocen, mayormente bendecirá a uno de Sus hijos.
Nunca dudes de que Dios quiera bendecirte. Tampoco tengas sueños pequeños, porque la naturaleza de Dios es bendecir. Solo dispón tu corazón para que Él lo prepare para cada una de las bendiciones que tiene para ti, y las bendiciones llegarán. Después de todo, Su deleite es bendecirte.

Y sé cómo tu Padre, deléitate en bendecir a otros.

¿Estás Siendo Probado Por Dios?

“ESCUDRÍÑAME, SEÑOR…; EXAMINA MIS ÍNTIMOS PENSAMIENTOS Y MI CORAZÓN…” (Salmo 26:2)

¿Estás pasando por una prueba? Las pruebas demuestran lo que hayas aprendido. Hasta que no seas probado no sabrás realmente lo que sabes y lo que no. Las pruebas son oportunidades para demostrar nuestra madurez y nuestro potencial. Así que, recuerda que:

(a) pasarás por pruebas en cada etapa de tu crecimiento;
(b) tu objetivo en cada caso debería ser el de pasar la prueba, pues de otra manera tendrás que intentarlo una y otra vez hasta que lo consigas;
(c) una prueba viene siempre antes de una promoción; en realidad, te prepara para ella y demuestra que estás listo para dominarla. Si haces trampas o tratas de copiar las respuestas de alguien, puede parecer, solo temporalmente, que has progresado. Pero después, el tiempo y las circunstancias revelarán lo que eres: alguien que no puede manejar lo que manipulaba para conseguirlo;
(d) la promoción personal nunca puede sustituir a la promoción divina. Por lo tanto, no te precipites delante del Señor; espera y permítele que abra la “puerta”;
(e) un producto no puede ser utilizado con seguridad y rentabilidad hasta que no haya sido probado a fondo, ni tú tampoco.


Dios no es un padre duro de corazón que disfruta viendo la lucha de sus hijos a través de las pruebas de la vida. Si te visitara en persona, probablemente te diría: “No me gusta que tengas que pasar por esto, pero es la única manera de probar si estás listo para lo que se te avecina en el futuro. Antes de que pueda usarte considerablemente, debo probarte a fondo”. 
Generalmente, las pruebas del Señor tienen que ver con tu carácter. Y como es el caso de cualquier buen actor en una obra de teatro, eso no tiene nada que ver con el guión; tu trabajo debe ser que “representes tu propio carácter”. Independientemente de lo que hagan los demás, sigue el “guión” que Dios tiene para tu vida.
Examinemos algunas de las pruebas que Dios suele usar en nuestro desarrollo:

(1) La prueba de las cosas pequeñas.
Esta prueba viene cuando se nos pide que hagamos algo inferior a nuestra capacidad o potencial. Demostrará lo fieles que somos con los compromisos, y también revelará si realmente estamos listos para responsabilidades mayores. Jesús dijo: “El que es fiel en lo muy poco, también en lo más es fiel…” (Lucas 16:10).

(2) La prueba de los motivos.
Esta prueba viene a nosotros cuando hacemos todas las cosas correctamente, pero no exclusivamente por los motivos correctos. Es bueno orar; no obstante, Jesús advirtió: “Cuando ores, no seas como los hipócritas, porque ellos aman… ser vistos por los hombres” (Mateo 6:5). A veces, no conocemos ni nuestros propios corazones, y por eso necesitamos el “espejo” de la Palabra del Señor: “La palabra de Dios… discierne los pensamientos y las intenciones del corazón” (Hebreos 4:12). Cuando estés delante de Cristo para ser evaluado y recompensado, la pregunta no será qué hiciste, sino ¿por qué lo hiciste?