viernes, 27 de abril de 2018

Vino para darnos Vida

“Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido.”
Isaías 53:4
Lo predicamos, lo recordamos, lo escribimos…¿Pero verdaderamente somos conscientes de lo que Él hizo?
vino para darnos vidaImagino a Dios y a su Hijo sentados en su trono, mirando cómo la perversidad y maldad de la humanidad arrasaban. Viendo cómo todas las formas del mal se enseñoreaban de las almas: padres sacrificando a fuego a sus hijos para dioses ajenos, hombres fornicando con sus madres, hombres abusando sexualmente de otros hombres, niños que perdían el brillo de sus ojos a muy temprana edad, su pueblo consultando a las tinieblas por dirección, actos abominables de canibalismo en la humanidad y muchas perversiones más...
... Viendo cómo el ciego andaba a tientas en las tinieblas, cómo el cojo se arrastraba por la vida, cómo el leproso era carcomido por su dolor en el alma al ser la vergüenza del mundo, cómo el enfermo de cáncer sufre dolor al aferrarse a esta vida, cómo el maníaco-depresivo pelea por salvarse de su infierno, y cómo un niño con enfermedad terminal no comprende por qué no puede vivir más.
Los imagino entristecidos porque el hombre convirtió lo que estaba destinado para el matrimonio en fornicación y lujuria, convirtiendo el señorío que le fue otorgado en una búsqueda insaciable de dominio y poder, convirtiendo un recipiente de gloria en telaraña de perversidades…..perdiendo el soplo divino; empeñándolo por placer, por puro hedonismo.
Fue entonces cuando Él lo decidió. ¡Quiero salvarlos, Padre! Dijo Jesús. La hora temida del Padre llegó, solo había una manera de salvarlos, y con dolor indescriptible en su corazón Dios envió a su más preciado tesoro a la batalla, diciéndole ¡devuélveles la vida!
“Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos)”
Efesios 2: 4-5
Te invito, hermano, a ser más consciente del sacrificio que Él hizo no solo por ti, sino por salvar a todo el que creyese en su nombre. A que realmente valores ese precioso regalo que has recibido en la salvación….y no sean solo palabras en una oración de fe, sino tu estilo de vida.
Ya no hay nada que temer y millones de razones por vivir. Él lo hizo todo en la cruz por ti, por mí y por todo el que crea en su nombre.

 Comparte con aquel que aún está sufriendo, que Jesús Hijo de Dios, ha dejado su trono en el cielo para salvarlo.

Morir es ganancia

Hoy en día todos los hombres buscan seguridad y estabilidad sobre todas las cosas. Seguridad económica, seguridad en la familia, seguridad para la vejez...
Hay compañías que ofrecen toda clase de seguros, seguros sociales, seguros para el automóvil, seguro contra incendios y muchos más. Pero el único que puede brindar la seguridad completa de día y de noche, tanto a su familia como a pertenencias, se llama Jesucristo. Salmos 127:1 “Si el Señor no edifica la casa, en vano se esfuerzan los albañiles. Si el Señor no cuida la ciudad, en vano hacen guardia los vigilantes“.
Un día en el cementerio, me puse a mirar cada tumba que había allí con sus fechas y las inscripciones, y me preguntaba qué fue de aquella persona, si conoció al Señor antes de morir o no. Después vi otra tumba, pero tenía en la inscripción este versículo “porque para mí el morir es ganancia”, y me hice esta pregunta. ¿Por qué la muerte es ganancia para los hijos de Dios?
¿Es que hay algún pago por morir? o ¿acaso Dios premia la muerte? La biblia nos enseña que hay vida después de la muerte para los que han creído en Jesús y condenación para los que lo han rechazado. Juan 3:36 “El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él“. 
Resultado de imagen de Morir es gananciaPara los que han creído y aceptado a Jesús como salvador, la muerte viene a hacer ganancia. ¿Por qué?
a) Porque estarán siempre con Cristo 1 Juan 3:2 “Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es“.
La meta de todo cristiano es ver a Jesús cara a cara. Y la meta de todo aquel que no es cristiano debería ser ver también a Jesús cara a cara. 1 Corintios 13:12 “Ahora vemos por espejo, oscuramente; mas entonces veremos cara a cara. Ahora conozco en parte; pero entonces conoceré como fui conocido“.
No tenemos todas las respuestas ahora, pero las tendremos un día cuando veamos a Cristo cara a cara. Nuestra meta final, y sabiendo cuál va a ser nuestro premio, debe motivarnos a purificarnos más. 
Porque estaremos libres de todo sufrimiento Apocalipsis 7:17 “porque el Cordero que está en medio del trono los pastoreará, y los guiará a fuentes de aguas de vida; y Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos”.
En su hogar eterno no habrá hambre, ni sed, ni dolor. Dios secará toda lágrima.
Pero para los que no han creído, la muerte no será ganancia sino castigo eterno. Mateo 25:46 “E irán estos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna“.
El castigo eterno tendrá lugar en el infierno. Dios recogerá los suyos y separará los justos de los injustos. Mateo 24:31 “Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro“.
Esto no debería ser el final para el hombre, ya que está Cristo quien nos puede salvar. Porque todas las luchas y tentaciones habrán pasado Efesios 6:12 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes“.

Dos malvados condenados a muerte, a cada lado de la cruz de Cristo

Usted y yo tomamos una opción u otra frente a la muerte de Cristo.

dos pecadores al lado de Cristo
Hay personas que tienen una relación de agravio y rechazo a Dios. Eso sí, quieren un Dios que les resuelva todos sus problemas y que los baje de la cruz del sufrimiento de inmediato. Y muy a menudo cuestionan preguntas como estas: ¿Por qué hay tantas catástrofes?, ¿por qué hay accidentes?, ¿dónde está Dios?, ¿por qué el terrorismo?, ¿por qué las guerras y el dolor?, ¿por qué Dios lo permite?, ¿por qué hay tantos que mueren de cáncer o de otras enfermedades?, ¿por qué hay ricos y pobres?, ¿por qué el hambre y la pobreza?, ¿por qué no resuelves esto o aquello? ¿Por qué? y ¿por qué? 

Dios no quiere que lo usemos siempre para resolver todos nuestros problemas, porque Él no siempre ha de querer librarnos de las aflicciones y del dolor que nos presenta este mundo caído y en caos. 

Lo que Dios quiere es resolver la pecaminosidad de nuestro corazón y no necesariamente, todas nuestras comodidades terrenales. No tendríamos un deseo sincero de estar en el cielo con Dios, si en realidad tuviéramos un paraíso en esta tierra. A veces nos hace falta estar un poco sumergidos en las lágrimas, en el dolor y en los sufrimientos para sentir la necesidad de un Redentor. 

El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él. Juan 3:36