viernes, 23 de noviembre de 2018

¿Por qué es importante estudiar la Biblia dentro de su contexto? ¿Cuál es el problema de tomar versículos fuera del mismo?

Resultado de imagen de ¿Por qué es importante estudiar la Biblia dentro de su contexto? ¿Cuál es el problema de tomar versículos fuera del mismo?Es importante estudiar los pasajes e historias bíblicas dentro de su contexto. Tomar versículos fuera de contexto lleva a toda clase de error y malas interpretaciones. La comprensión del contexto tiene cuatro principios. Comienza con el sentido literal (lo que dice), sigue con el marco histórico (eventos de la historia, para quién está dirigido y cómo fue comprendido en ese tiempo), continúa con la gramática (significado de las palabras o frases que se encuentran dentro de la historia) y acaba con la síntesis (la comparación con otras partes de la Escritura). El contexto es crucial para la exégesis bíblica. Después de considerar la naturaleza literal, histórica y gramatical de un pasaje, debemos enfocar nuestra atención en la estructura del libro, luego el capítulo, y después, el párrafo. Todo esto está comprendido en el “contexto”. Para ilustrar esto, es como mirar un mapa del mundo en Google y gradualmente ir enfocando hasta localizar una casa.

Tomar frases y versículos fuera de contexto casi siempre lleva a malos entendidos. Por ejemplo, si tomamos la frase “Dios es amor” (1 Juan 4:7-16) fuera de contexto, podemos pensar que nuestro Dios ama todo y a todos todo el tiempo, con un tipo de amor emocional y romántico. Pero en su contexto gramatical y literal, “amor” se refiere en este caso al amor ágape, la esencia del cual es sacrificarse por el bienestar de otro, y no un sentimiento romántico y sentimental. El contexto histórico también es crucial, porque Juan se estaba dirigiendo a los creyentes de la Iglesia del primer siglo y los instruía no en el amor de Dios en sí, sino sobre cómo distinguir a los verdaderos creyentes de los falsos maestros. El verdadero amor (aquel que se sacrifica por el bienestar de otros) es el sello del verdadero creyente (verso 7). Aquellos que no son capaces de amar no pertenecen a Dios (verso 8). Dios nos amó antes que nosotros a Él (versos 9-10), y es por lo que debemos amarnos unos a los otros y así demostrar que somos suyos (versos
 11-12).

Además, considerando la frase “Dios es amor” en el contexto total de la Escritura (síntesis), evitará que lleguemos a la popular conclusión de que Dios es solamente amor, o que Su amor es más grande que todos Sus demás atributos. Sabemos, por muchos otros pasajes, que Dios es también santo, justo, fiel, confiable, bondadoso, misericordioso, bueno, compasivo, omnipotente, omnipresente, omnisciente y muchas otras cosas. También sabemos por otros pasajes, que Dios no solamente ama, sino que también aborrece. (Salmo 11:5).

La Biblia es la Palabra de Dios, literalmente “inspirada por Dios” (2 Timoteo 3:16), y se nos manda leerla, estudiarla y comprenderla a través de buenos y apropiados métodos de estudio bíblico, siempre con la iluminación del Espíritu Santo para guiarnos 
(1 Corintios 2:14). Nuestro estudio se beneficiará notablemente si nos mantenemos diligentes en la cuestión del contexto. No es difícil señalar pasajes que aparentemente se contradicen con otras porciones de la Escritura, pero si observamos cuidadosamente sus contextos y utilizamos la totalidad de la Escritura como referencia, podremos comprender el significado de un pasaje, y las aparentes contradicciones serán explicadas. “La autoridad del contexto” implica que el contexto a menudo determina el verdadero significado de una frase. Ignorar el contexto es colocarnos en una tremenda desventaja.


Suyo desde el Principio hasta la Eternidad

“Mas yo esperaré siempre, y te alabaré más y más. Mi boca publicará tu justicia y tus hechos de salvación todo el día, aunque no sé su número. Vendré a los hechos poderosos de Jehová el Señor; haré memoria de tu justicia, de la tuya sola. Oh Dios, me enseñaste desde mi juventud, y hasta ahora he manifestado tus maravillas. Aun en la vejez y las canas, oh Dios, no me desampares, hasta que anuncie tu poder a la posteridad, y tu potencia a todos los que han de venir, y tu justicia, oh Dios, hasta lo excelso. Tú has hecho grandes cosas; oh Dios ¿quién como tú?”
(Salmos 71: 14-19)
Resultado de imagen de Suyo desde el Principio hasta la EternidadEl Salmo 71 tiene la particularidad de ser la oración de un anciano. Su autor expresa la confianza y la necesidad que tiene del refugio y la protección de Dios. En él se exalta el poder y la magnificencia de Dios, además de que el autor testifica cómo el Señor lo ha guiado y ha estado con él desde su juventud.
Personalmente me identifico con la súplica de este salmista. Mi petición a Dios es cada día poder ser mejor persona para él, mejor cristiano, ser humano, persona, amigo, hermano e hijo con mis padres. Sinceramente, y desde lo más profundo de mi corazón, deseo ser un adorador sin reservas y un hombre que en cada acto de su vida refleje el amor y la sabiduría que solo provienen de Dios. Deseo que Dios pueda sonreír por mí y sentirse orgulloso de saber que todo lo que trato de ser y hacer es para su gloria y honra.
En este salmo, el versículo 6 dice: “En ti he sido sustentado desde el vientre; de las entrañas de mi madre tú fuiste el que me sacó; para ti será siempre mi alabanza”. Y precisamente estas palabras las tomo como si fueran mías y se las digo a Dios, porque sé que mi vida le ha pertenecido desde el principio. Siempre le he pedido que el día que no vaya a cumplir con Su voluntad en mi vida, que ese día será mejor que me recoja y me lleve a su santa presencia. Porque mi vida carece de sentido si Dios no la dirige. Porque Él es todo para mí, porque aún sin yo tener capacidad, allá en el vientre de mi madre, sus ojos me miraron y mi alma le conoció.

¿Cómo puedo saber si algo es pecado? - ¿Son todos los pecados iguales ante Dios?

Hay dos puntos incluidos en esta primera pregunta. 
(1) Hay cosas que la Biblia menciona y declara específicamente como pecado. Ejemplos de estas listas se encuentran en: Proverbios 6:16-19Gálatas 5:19-211 Corintios 6:9-10. No hay duda de que las Escrituras presentan estas actividades como pecaminosas, cosas que Dios no aprueba. Homicidio, adulterio, mentira, robo, etc. –indudablemente la Biblia presenta tales cosas como pecados. 
Resultado de imagen de ¿Cómo puedo saber si algo es un pecado?(2) El punto más difícil está en determinar lo que es pecado en áreas en las que la Biblia no lo señala específicamente. Cuando la Biblia no cubre un tema determinado, tenemos algunos principios generales en Su Palabra para guiarnos.

(a) Cuando no existe una referencia específica en las Escrituras es bueno preguntarse no si cierta cosa está mal, sino más bien si se puede valorar como buena. La Biblia dice, por ejemplo,
Andad sabiamente para con los de afuera, aprovechando bien el tiempo.” (Colosenses 4:5). Nuestros pocos días aquí en la tierra son tan cortos y preciosos en relación con la eternidad, que nunca debemos desperdiciar el tiempo en cosas egoístas y sin valor, sino usarlo solo en lo que “sea bueno para la necesaria edificación” (Efesios 4:29).

(b) Una buena prueba es determinar si podemos honestamente y con buena conciencia, pedirle a Dios que bendiga y utilice esa actividad en particular para Sus propios buenos propósitos. “Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios” (1 Corintios 10:31). Si existe duda en que complazca o no a Dios, entonces lo mejor es dejarlo. “....todo lo que no proviene de fe, es pecado.” (Romanos 14:23).


(c) Debemos recordar que nuestros cuerpos, así como nuestras almas, han sido redimidos y le pertenecen a Dios. “¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu los cuales son de Dios.” (1 Corintios 6:19-20). Esta gran verdad debe ser un verdadero soporte para todo lo que hagamos o donde vayamos con nuestros cuerpos.

(d) Debemos evaluar nuestras acciones no solo en relación a su efecto a Dios, sino también en relación a su efecto en nuestra familia, nuestros amigos y otra gente en general. Aunque alguna cosa en particular no nos lastime personalmente, si tiene influencias o efectos dañinos para alguien más, está mal. “Bueno es no comer carne, ni beber vino, ni nada en que tu hermano tropiece, o se ofenda, o se debilite.” “Así que, los que somos fuertes debemos soportar las flaquezas de los débiles, y no agradarnos a nosotros mismos.” (Romanos 14:2115:1).

(e) Finalmente recuerda, que Jesucristo es nuestro Señor y Salvador, y no debemos permitir que ninguna otra cosa tenga prioridad por encima de nuestra conformidad a Su voluntad. Tampoco debemos permitir que ningún hábito o recreación ejerzan un excesivo control sobre nuestras vidas – Cristo solo tiene la autoridad. “Todas las cosas me son lícitas, mas no todas convienen; todas las cosas me son lícitas, mas yo no me dejaré dominar por ninguna.” (1 Corintios 6:12) “Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de Él” (Colosenses 3:17).