lunes, 28 de abril de 2014

Los Mansos heredarán la tierra

No ofreció resistencia, dócilmente fue llevado a la cruz; manso como cordero fue llevado al matadero. (Isaías: 53-7).
Muy a menudo, la gente asocia la palabra manso con débil. Quizá, una de las causas principales por la cual ocurre esto radica en que, algunos diccionarios dan una definición secundaria de la palabra manso como "muy sumiso". Por lo que muchos se preguntan: ¿Qué intentaría decir El Señor cuando dijo:
"Bienaventurados los mansos, porque ellos heredarán la tierra"? (Mateo 5:5). 
 ¿No parece estar muy claro, sí? A simple vista no, pero seguro que Jesús jamás diría: "Bienaventurados los sumisos, porque ellos heredarán la tierra".

Pero si queremos saber exactamente, lo que Dios quiso decir en Mateo 5:5, primero debemos descubrir el significado que él da a la palabra "manso", y ésto sólo lo podemos aprender leyendo otros textos bíblicos y no un diccionario común. La biblia nos enseña siempre con la misma biblia.

Ser manso según las escrituras, denota humildad. Es una actitud diligente hacia Dios, mediante la cual los creyentes aceptan ser tratados como Él desea, sin ofrecerle resistencia ni contienda. En su breve paso por la tierra, Jesús nos dejó un claro ejemplo sobre esto, Él siempre se deleitaba haciendo la voluntad de su Padre. 

Sacrificio - Reflexiones

Cada año en Alaska, hay una carrera de trineos con perros de 1,000 millas, en la que el ganador sale con un premio de mucho dinero y prestigio. Lo que pocos saben es que esta carrera es conmemorativa de una carrera original para salvar vidas.
En Enero de 1926, en el pueblo de Nome, Alaska, Richard Stanley, un niño de seis años, mostró señales de difteria, una enfermedad que suele ser tan rápida, que en pocas horas acaba con el enfermo. Un día después murió el niño y, ante el peligro de una erupción de esta enfermedad en todos los del pueblo, el Dr. Curtis Welcha empezó inmunizando a todos los niños y adultos con un suero antidiftérico experimental. Pero en poco tiempo se acabó su provisión, y el suero más cercano se encontraba en la ciudad de Nenana, Alaska, a una distancia de Nome de 1,000 millas de desierto congelado.
Asombrosamente, un grupo de hombres se ofreció voluntariamente, a hacer el viaje con sus trineos de perros. Operando en relevos, un trineo empezó desde Nome, mientras otro, cargando con el suero, empezó desde Nenana. A pesar de la congelación parcial de sus dedos y orejas, a pesar de su fatiga y agotamiento, estos hombres continuaron viaje esforzadamente durante 144 horas, con grandes vientos, hasta hacer llegar el suero antidiftérico a Nome.
Como resultado de este gran sacrificio, sólo murió una persona más. El sacrificio de estos inestimables hombres, había proporcionado el regalo de la vida a un pueblo entero.

Punto de Vista

Dios nos hizo únicos y diferentes unos de otros, por lo que no podemos esperar que los demás vean las cosas como nosotros, que tengan el mismo punto de vista.
Pero hay una cosa que sí debe ser un denominador común en todos, y es ver las cosas siempre de forma positiva; no fijando la vista en lo malo, sino en lo bueno que Dios nos trae a cada momento.
La historia que viene a continuación, puede mostrarnos esta diferencia: 
Dos vendedores de zapatos fueron mandados a un país extranjero para promocionar e intentar ofrecer el producto que vendían.
El primero manda un e-mail a la compañía diciendo: “cancelen el pedido, estoy a punto de regresar, y aquí la gente no usa zapatos”.
El segundo manda el siguiente correo electrónico a la empresa: “doblen el pedido, no hay ninguna competencia.”
Cuando nuestra visión está puesta en Dios, podemos hallar el propósito que Él tiene con esa situación, podemos ver que Dios tiene algo más allá de lo que nuestros ojos pueden ver, pero está en nosotros el aprovechar cada oportunidad que se presente, envuelta en un problema o una prueba.

Quiero


Lo único que quiero es sentir esa paz que una vez me regalaste, al yo entrar al hogar
Lo único que quiero es caminar cogida de tu mano como un bebé sin temor
Lo único que quiero es que mi corazón palpite al hablar de tu gran amor
Lo único que quiero es que mis ojitos brillen por tanto gozo que Tú me das.
Lo único que quiero es arrodillarme en mi cuarto a solas y decirte aquí estoy papá
Lo único que quiero, es tener un corazón lleno de amor para dar
y que me encante saber que ese amor proviene de la fuente misma del amor:
Mi Dios
Eres mi Dios, eres mi creador, eres hacedor de mi vida y juez de las injusticias
¡Cuántas veces te he dicho al oído, que lo único que quiero es no perder nuestra linda relación!
Mi amor fluye y a veces se paraliza, pero sé que nunca dejarás de ser mi Padre y yo nunca dejaré de ser tu hija.
Porque ninguna montaña ni el más cruel invierno enfriarán la quietud que me generas, cuando sé que hay amor, del cual puedo llegar a  embriagarme, y dicha de donde saciarme.
En el mundo hay muchas cosas entre importantes, imperantes y preocupantes, pero Tú, Señor, Tú estás sobre todas ellas.
Me entristezco cuando no oro, cuando no clamo, cuando no digo que te necesito, pero quiero que sepas que, dentro de mí tu amor me consume, me cala hasta los huesos.
Loca sería yo si te niego, si pretendo ignorarte y seguir mi camino.
Simplemente imposible, porque ya he saboreado el chocolate más rico y divino,
y mi paladar no se acostumbraría a otro.
Lo único que quiero es que, a través de estas líneas, quizás sin rima, sepas que no sólo te amo sino que también te necesito, que no sólo deseo milagros en mi vida sino también piedras para llevar en mi espalda, y así aprender a llevar mi cruz.
No quiero que parezca repetida la expresión de decirte te amo, como tampoco un te extraño
Pero sí te extraño, te extraño, te necesito más que nunca en mi vida; en mis tareas así como en mis alabanzas, te necesito y tú sabes cuánto.

Sé que ya no soy una niña pero en tus brazos quiero serlo, quiero decirte tanto..., quiero contarte cada detalle. Aunque sé que Tú de antemano, ya lo sabes todo, sé que necesitas que te lo diga, que cuente, narre, que lo publique, y hoy es un buen día para hacerlo y contarte tanto secretito que he tenido contigo.