domingo, 23 de diciembre de 2012

La verdad es que miento - Mensajes de ánimo

“Libra mi alma, oh Señor, del labio mentiroso,
de la lengua engañosa”.
 (Salmo 120:2)

Años atrás, cuando mis hijos eran todavía pequeños, yo también caí en la costumbre de recomendarles que dijeran: “Si tal persona me busca o pregunta por mí, díganle que no estoy”. Y también me ocurrió, alguna vez, que un hijo mío abrió la puerta de casa para decirle a quien preguntaba por mí : “Buenos días señor, dice mi papá que no está aquí”.
Anécdotas como ésas las recordamos en familia, con una sonrisa en los labios, pero también con la vergüenza de reconocer que en aquel entonces no fuimos muy íntegros que digamos.
Ahora bien… que lance la primera piedra quien alguna vez,  deliberada o inconscientemente,  no mintió,  para salir del apuro, para tapar errores o para conseguir algo.
No olvidemos, por ejemplo, que  la infancia ha sido una época o una senda sembrada de mentiras. Al comienzo eran pequeñitas, como para comernos a escondidas alguna golosina, o para justificar un retraso, o la falta de algún deber en la escuela.  Más tarde, las mentiras fueron  creciendo de tono y de talla, tanto que dejábamos de ser aficionados a la mentira para alcanzar el título de  profesionales del engaño, persiguiendo cada uno sus propios intereses: afecto, amor, fama, dinero, votos, prestigio, poder, etc. En suma, éramos el equivalente  a aquellos charlatanes de feria, hábiles para vender sus  pomadas “curalotodo”.  Nuestra verdad era parte de la mentira.
La  mentira no conoce de tiempo, ni de fronteras, ni de situación social, económica, idioma, ni  siquiera de religión.  Tanto es así que, en este último caso, se encuentran una serie de personajes, quienes se han autoproclamado enviados directos de Dios, hasta dioses mismos; modernos mesías vestidos de túnica o de traje, de sandalias o corbata, transportados a pie o en jet, buscando clientes que crean en ellos y en sus doctrinas, que les sigan, admiren, adoren, y veneren.
Queridos amigos y amigas, alejémonos de la mentira, y enseñemos a nuestros pequeños a no involucrarse en ella; hagámosles entender que por más que se la clasifique como mentira piadosa,  mentira blanca, o simple mentirijilla, el engaño está reñido con la Palabra de Dios.
Pero no se trata solamente de enseñar con un discurso, sino, y sobre todo, con el ejemplo, porque de nada serviría darles a nuestros chicos una magistral conferencia sobre lo dañino de la mentira si, en cualquier momento, y para comenzar, les enviamos a abrir la puerta, o a contestar el teléfono, con  la clásica recomendación: “si alguien me busca, dile que no estoy”.
Jesucristo manifestó: “Mirad que nadie os engañe. Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán.” (Mateo 24: 4,5) .

Esa es su Palabra y, por cierto, la única que no engaña.

William Brayanes

Tierra Nueva Y Súper Descubierta - Ciencia y fe - vídeo


   Tierra Nueva Descubierta
Un equipo internacional de astrónomos ha descubierto una nueva supertierra, potencialmente habitable, a sólo 42 años luz de distancia de nuestro planeta, según un estudio que será publicado en “Astronomy & Astrophysics”.
El exoplaneta, situado en una zona supuestamente habitable, ni demasiado fría ni demasiado caliente, en la que podría haber agua y una atmósfera estable, forma parte de un sistema de seis mundos que gira alrededor de la estrella HD 40307.
Los astrónomos creían que ese sistema estaba formado por sólo tres planetas, demasiado cercanos a su sol para albergar vida, pero descubrieron tres más, entre ellos esta supertierra, gracias a técnicas de análisis más precisas de los datos recogidos por el espectrógrafo HARPS del Observatorio Austral Europeo (ESO) en La Silla, Chile.
Según el estudio, cuyos autores principales son Guillem Anglada-Escudé de la Universidad alemana de Gotinga, y Mikko Tuomi de la Universidad británica de Hertfordshire, el más interesante de los tres nuevos planetas es el que se halla más lejos de su estrella, a una distancia similar a la existente entre la Tierra y el Sol.
Su masa es al menos siete veces la de la Tierra y lo más probable es que gire sobre su propio eje, mientras orbita alrededor de su estrella, por lo que podría tener un ciclo diurno y nocturno al igual que nuestro planeta.
Según Anglada-Escudé, “la estrella HD 40307 es una estrella enana perfectamente tranquila, por lo que no hay ninguna razón por la que este planeta no pueda tener un clima parecido al de la Tierra”.
Fuente Agencia Noticias EFE
¡Qué sorprendente es Dios!. Aún sigue dejando con la boca abierta a los científicos.
Lo interesante es que mientras la ciencia descubre una Nueva Tierra, la Biblia ya habla de una nueva tierra que Dios hará surgir. No sabemos si es que Dios se está adelantando, como siempre, a los hechos y está preparando esa nueva morada. Interesante es que la Biblia habla más de lo que será la vida humana en esa nueva tierra que del mismo cielo.
El profeta Isaías es uno de los que dedica 6 capítulos para hablar de esa nueva tierra. Hablando de Nueva Jerusalén, que estará en esa nueva tierra, el Profeta dice:
“Entonces verán las naciones tu justicia, y todos los reyes tu gloria, y te llamarán con un nombre nuevo, que la boca del SEÑOR determinará. Serás también corona de hermosura en la mano del SEÑOR, y diadema real en la palma de tu Dios.
Nunca más se dirá de ti: Abandonada, ni de tu tierra se dirá jamás: Desolada; sino que se te llamará: Mi deleite está en ella, y a tu tierra: Desposada, porque en ti se deleita el SEÑOR, y tu tierra será desposada.
Porque como el joven se desposa con la doncella, se desposarán tus hijos; y como se regocija el novio por la novia, tu Dios se regocijará por ti.
Sobre tus murallas, oh Jerusalén, he puesto centinelas; en todo el día y en toda la noche jamás callarán. Los que hacéis que el SEÑOR recuerde, no os deis descanso, ni le concedáis descanso hasta que la restablezca, hasta que haga de Jerusalén una alabanza en la tierra.
El SEÑOR ha jurado por su diestra y por su fuerte brazo: Nunca más daré tu grano por alimento a tus enemigos, ni hijos de extranjeros beberán tu mosto, por el que trabajaste; pero los que lo cosechen, lo comerán y alabarán al SEÑOR; y los que lo recolecten, lo beberán en los atrios de mi santuario.
Pasad, pasad por las puertas; abrid camino al pueblo. Construid, construid la calzada; quitad las piedras, alzad estandarte sobre los pueblos. He aquí, el SEÑOR ha proclamado hasta los confines de la tierra: Decid a la hija de Sion: “He aquí, tu salvación viene; he aquí, su galardón está con Él, y delante de Él su recompensa.” Isaías 62:2-11.

El Nuevo testamento también lo menciona con seguridad firme:
“Pero, según su promesa, nosotros esperamos nuevos cielos y nueva tierra, en los cuales mora la justicia”. 2 Pedro 3:13
“Y vi un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existe”. Apocalipsis 21:1
Randy Alcorn., en su libro "Promesas de Vida para La eternidad", dice: “Sobre la nueva tierra, Dios y la humanidad vivirán juntos por siempre en el mismo hogar. El matrimonio del Dios del Cielo con el pueblo de la tierra implicará el matrimonio del cielo y la tierra.
No serán dos universos como hasta ahora, un Universo hogar de Dios y los ángeles y el otro hogar de la humanidad. En la nueva Tierra y nuevo Cielo nada separará el cielo de la tierra. Una vez que Dios y la nueva humanidad estén juntos no habrá diferencia entre cielo y tierra.
Efesios 1:10 dice: “Con miras a una buena administración en el cumplimiento de los tiempos, es decir, de reunir todas las cosas en Cristo, tanto las que están en los cielos, como las que están en la tierra”.

El Piloto - Reflexiones

Cuentan de un individuo que abordó un avión para viajar a Nueva York. Pero el  personaje principal fue un niño que entró buscando su asiento y se sentó justo al lado suyo. El niño era muy educado. Y pasó el tiempo coloreando en su libro de pintar.
No presentaba rasgos de ansiedad ni de nerviosismo al despegar el avión. El vuelo no fue muy bueno, hubo tormenta y mucha turbulencia. Una sacudida fuerte, y todos se pusieron muy nerviosos, pero el niño mantuvo su calma y serenidad en todo momento.
¿Cómo lo hacía?, ¿por qué su calma? Hasta que una mujer en estado frenético le preguntó:
- Niño: ¿no tienes miedo?
- No señora”, contestó el niño y mirando a su libro de pintar le dijo:
-”Mi padre es el piloto”.
¿Sorprendido?
Hay tiempos en nuestra vida en que los sucesos nos sacuden un poco y nos encontramos en momentos turbulentos. No vemos terreno sólido y nuestros pies no pisan lugar seguro. No tenemos de dónde agarrarnos y no nos sentimos seguros. Pero recordemos que nuestro amadísimo Padre Celestial es nuestro piloto. A pesar de las circunstancias, nuestras vidas están puestas en el Creador del cielo y la tierra. Y la próxima vez que llegue una tormenta a tu vida o si en este momento estás pasando por una, alza tu mirada al cielo, siéntete confiado y di para ti mismo:
¡Mi Padre es el piloto!
Nahúm 1:7
 Bueno es Dios para fortaleza en el día de la angustia; y conoce á los que en él confían.
Hechos 18:9-10 
Entonces él Señor dijo de noche en visión á Pablo: No temas, sino habla, y no calles: Porque yo estoy contigo, y ninguno te podrá hacer mal.
Salmos 9:9 
Y será Dios refugio al pobre, Refugio para el tiempo de angustia.
Salmos 18:2 
Roca mía y castillo mío, y mi libertador; Dios mío, fuerte mío, en él confiaré; Escudo mío, y el cuerno de mi salud, mi refugio.
Salmos 32:7
 Tú eres mi refugio; me guardarás de angustia; Con cánticos de liberación me rodearás.

¡Supe que me amabas! - Reflexiones con Video

Gracias por esperarme, gracias por amarme, con todos mis defectos… ¡Estoy aquí! ¡Te Amo Dios!

Desde el principio cuando te necesité,
Desde el momento cuando la mirada alcé
Desde ese día, cuando sola me encontraba,
Cuando tu mirada en mí se fue a poner.
Supe que me amabas lo entendí,
Y supe que buscabas, mas de mí,
Que mucho tiempo me esperaste y no llegué.
Supe que me amabas, aunque huí,
Lejos de tu casa, yo me fui,
Y con un beso y con amor,
Me regalaste tu perdón, estoy aquí.
Y cuando lejos me encontraba te sentí,
Sabía que entonces me cuidabas y te oí,
Como un susurro fue tu voz en el silencio,
Cada día me atraías hacia ti.
Supe que me amabas lo entendí,
Y supe que buscabas, mas de mí,
Que mucho tiempo me esperaste y no llegué.
Supe que me amabas, aunque huí,
Lejos de tu casa, yo me fui,
Y con un beso y con amor,
Me regalaste tu perdón…
Y estoy aquí mi dulce Señor,
Estoy aquí, amado Salvador,
Estoy aquí… Y estoy aquí.
Supe que me Amabas – Marcela Gandara

Hoy… Esperaré en Su Palabra - Devocional

“Acuérdate de la palabra dada a tu siervo, en la cuál me has hecho esperar” Salmo 119:49
Cualquiera que sea la necesidad que pueda tener hoy en mi vida siempre podré encontrar una promesa en la Palabra de Dios, que fácilmente se puede adaptar a  esa necesidad. Si me siento sin fuerza y cansado, encuentro una promesa como esta:  Él da fuerza al cansado y aliento al de poco ánimo.
Cuando leo una promesa como esa siento el respaldo no solamente de la promesa, sino de aquel que dio la promesa. Si me siento solo y abandonado, Él me dice: No te dejaré, ni te desampararé, y esa promesa me hace recordar a Aquél que la dijo. Sé que Él no miente. Sé que Él jamás dice algo que luego no cumple; Dios siempre cumple todo lo que promete.
Si hoy tengo hambre de Dios, si deseo buscarle con todo mi corazón y alimentarme de su bondad, encuentro entonces esta promesa: Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados. Con estas promesas no sólo encuentro fuerza y seguridad sino que me hacen decir como el salmista: Acuérdate de la palabra que has dado a tu siervo, en la cual me has hecho esperar.
Puedo llegar con seguridad, confianza y con mucho respeto ante el trono de su gracia y decirle: Señor, Tú lo has dicho, he creído en tu Palabra y en ella he esperado, y al expresarlo mi alma se llena de confianza y seguridad. Hoy puedo esperar en las promesas de Dios y estar seguro de que nunca quedaré defraudado. Su Palabra permanece para siempre y ella me hace estar confiado. 
Si hoy me siento desconsolado porque el pecado me ha llevado por camino de tristeza y mis rebeliones parecen aumentar, su promesa llega a mí para decirme:  Yo deshice como a nube tus rebeliones, como a niebla tus pecados, vuélvete a mí. Jesús ha dicho claramente, el cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasaran. Sus promesas son como una fortaleza en medio de las dificultades y angustias diarias de la vida.
La vida a veces me sorprende, mas en medio de esas sorpresas la Palabra de Dios también me sorprende con una o varias promesas que se ajustan precisamente a la sorpresas de la vida. Con Dios, las sorpresas de la vida no me asustan, sino que las sorpresas de Dios me asombran.
Señor, Gracias por tus preciosas y grandísimas sorpresas. Esas sorpresas son promesas y en esas promesas yo siempre puedo estar confiado.  Una promesa tuya es como un cheque girado a mi nombre por el presidente de un banco. Tú eres el creador del universo y de mi vida.
Tus promesas las puedo hacer efectivas en la realidad de tu presencia. En ellas puedo descansar. Tus palabras llegan siempre en el momento más necesitado de mi vida y en esa promesa encuentro fe. Amén.