Perdona
No comiences el año entrante con un corazón lleno de heridas, que no has sanado por no perdonar el daño que alguien provocó en tu vida. Antes de que llegue la hora del fin de año, perdona a los que tanto daño te han hecho este año y deja atrás lo que te hicieron, y olvida el dolor y la amargura que te causaron. Que perdones no quiere decir que todo volverá a ser igual con esa persona, pero sí libera tu corazón de ataduras y te permite continuar creciendo. Que tu próximo año lo comiences sin rencor ni amargura para nadie.
No comiences el año entrante con un corazón lleno de heridas, que no has sanado por no perdonar el daño que alguien provocó en tu vida. Antes de que llegue la hora del fin de año, perdona a los que tanto daño te han hecho este año y deja atrás lo que te hicieron, y olvida el dolor y la amargura que te causaron. Que perdones no quiere decir que todo volverá a ser igual con esa persona, pero sí libera tu corazón de ataduras y te permite continuar creciendo. Que tu próximo año lo comiences sin rencor ni amargura para nadie.
Es muy probable que este año no haya sido el mejor de toda tu vida. Piensa que todos tienen un parecido sentir respecto a su año. Cuando nos sentamos a reflexionar sobre las experiencias vividas, nos damos cuenta que este año fue muy difícil, doloroso o simplemente no trajo todo lo que esperábamos. Sin embargo, estás vivo, y recuerda que DIOS TE AMA y te ha tomado en cuenta para su propósito. Si aún estás aquí en la Tierra es porque Dios tiene planes contigo, planes que desea cumplir. No despidas este año sin agradecerle a Dios por las bendiciones que recibiste, por tu vida y la de los que aún están a tu lado, por las enseñanzas, los momentos buenos y los malos, también.
Escoge a Dios
En este año que pasó ya no se puede hacer nada más, solo queda despedirlo y guardar en nuestra memoria los recuerdos de las experiencias vividas. Pero un año nuevo comienza y esto presenta nuevas oportunidades, decisiones que tomar, proyectos que desarrollar y la famosa lista de resoluciones. Antes que nada, decide permitirle a Dios guiar tus pasos en este nuevo año, que Él sea tu guía, refúgiate en Él en medio de las tormentas, escucha su voz en el momento de tomar una decisión y escógelo a Él como prioridad en tu vida.
En este año que pasó ya no se puede hacer nada más, solo queda despedirlo y guardar en nuestra memoria los recuerdos de las experiencias vividas. Pero un año nuevo comienza y esto presenta nuevas oportunidades, decisiones que tomar, proyectos que desarrollar y la famosa lista de resoluciones. Antes que nada, decide permitirle a Dios guiar tus pasos en este nuevo año, que Él sea tu guía, refúgiate en Él en medio de las tormentas, escucha su voz en el momento de tomar una decisión y escógelo a Él como prioridad en tu vida.