“MI PRESENCIA TE ACOMPAÑARÁ Y TE DARÉ DESCANSO” (Éxodo 33:14)
Hay ciertas personas por las que sacamos fuerzas de flaqueza solo por estar con ellas. Su presencia y enfoque de la vida hacen que nos sintamos mejor. De la misma manera, cuando necesitamos ánimo y fuerza, debemos pasar tiempo con Dios. Apartar un tiempo para estar en su Presencia es como estar en una habitación llena de un perfume deleitoso. Si nos quedamos allí durante bastante tiempo, nos llevamos la “fragancia” cuando salimos. Está en nuestra ropa, en el cabello, y hasta en la misma piel.
Moisés era un hombre de oración. Pasó muchísimo tiempo en comunión con el Señor y hablando con Él. Sabía que sin la Presencia de Dios, él no valía ni un “céntimo”. ¿Te imaginas ser responsable del cuidado diario de dos millones de personas, de sacarlos de un país e introducirles en otro a pie? ¡Es una tarea abrumadora! Y por si fuera poco, muchos pasaban el tiempo quejándose de su “suerte” en la vida y buscando defectos en Moisés. Era la situación idónea para perder la serenidad. A pesar de eso, el Señor le dijo a Moisés: “mi Presencia te acompañará y te daré descanso” (Éxodo 33:14b).
Es decir: La Presencia de Dios puede darte paz en cada situación, incluso en un lugar de trabajo difícil o en un hogar constantemente convulsionado. Dios puede darte descanso en medio de la adversidad y paz en medio del conflicto, tanto si te encuentras en un ambiente laboral hostil o en un hogar donde reina la discordia. La presencia de Dios te ayudará a demostrar amor cuando seas agraviado, y paciencia en momentos de tensión. Te ayudará a que seas un agente de cambios positivos sin tener que decir muchas palabras, y acabarás sintiéndote satisfecho por la forma en que enfrentaste las situaciones. Por lo tanto, pasa tiempo en la presencia de Dios en este día.
Si no pasas tiempo en la presencia de Dios, en el fondo siempre vivirás con un sentimiento de inseguridad. Hay ciertas personas que nos inspiran seguridad; su presencia y la forma de afrontar la vida nos hacen sentir mejor. De la misma manera, cuando necesitas fortaleza y ánimo, tienes que pasar tiempo con el Señor.
Si no pasas tiempo en la presencia de Dios, en el fondo siempre vivirás con un sentimiento de inseguridad. Hay ciertas personas que nos inspiran seguridad; su presencia y la forma de afrontar la vida nos hacen sentir mejor. De la misma manera, cuando necesitas fortaleza y ánimo, tienes que pasar tiempo con el Señor.