• Después de algún tiempo, uno aprende que las verdaderas amistades continúan creciendo a pesar de las distancias, y que lo importante no es lo que tienes en la vida sino a quién tienes en la vida. William Shakespeare
• Dios no actúa porque tenemos problemas, sino porque tenemos fe.
• Lázaro estando muerto, escuchó la voz de Jesucristo, pero a veces los vivos parecemos sordos. No hay más sordo que quien no quiere oír.
• El gran enemigo del lenguaje, es la mentira. Cuando existe una brecha entre el objetivo real y el declarado, nos inclinamos instintivamente hacia las largas palabras y los modismos rebuscados; como un calamar que se oculta tras su tinta. George Orwell
• La única diferencia entre un sueño y un objetivo es una fecha. Edmundo Hoffens
• Estoy convencido de que Dios hizo un mundo distinto para cada hombre y que ese mundo está dentro de nosotros mismos, donde deberíamos intentar vivir. Oscar Wilde
• No es suficiente con estar ocupados: las hormigas también lo están. La cuestión es, ¿en qué estamos ocupados? Henry David Thoreau
• Es preferible estar en una pequeña isla de certeza, que en un mar de confusión.
• La imaginación y la experiencia van de la mano, solas no andan. José Ingenieros
• Cuando discutas con un tonto, asegúrate de que él no esté haciendo lo mismo. Anónimo
• El triunfador es siempre parte de la respuesta; el perdedor es siempre parte del problema.
El triunfador dice: Podemos hacerlo; el perdedor dice: Ése no es mi problema.
El triunfador siempre tiene un plan; el perdedor siempre tiene una excusa.
• La mala noticia, es que el tiempo vuela. La buena, es que usted es el piloto. Michael Althsuler
• La sonrisa es una curva que lo endereza todo. Phyllis Diller
• La muerte no es cuando se extingue la luz del cristiano, es cuando se apaga la lámpara porque ha llegado el amanecer.
• Rara vez se presentan grandes oportunidades para ayudar a otros, pero las pequeñas nos rodean todos los días. Sally Koch
• Dios no elige personas capacitadas, Él capacita a los elegidos.
• Las palabras bondadosas pueden ser breves y sencillas, pero sus efectos son verdaderamente infinitos. Madre Teresa.