viernes, 13 de diciembre de 2013

¿Cuál es el don de hablar en lenguas? - Pregunta bíblica

El primer acontecimiento de hablar en lenguas se produjo en el Día de Pentecostés; lo encontramos en el libro de los Hechos 2:1 al 4. Los apóstoles salieron y compartieron el Evangelio con las multitudes hablándoles en su propia lengua, “¡Les oímos hablar en nuestras lenguas las maravillas de Dios!” (Hechos 2:11). La palabra griega traducida “lenguas”, literalmente significa “idiomas”. Por lo tanto, el don de lenguas es hablar en un idioma que no se conoce, a fin de ministrar a alguien que habla ese idioma. En 1ª Corintios capítulos 12 al 14, donde Pablo habla de dones milagrosos, comenta, “Ahora pues, hermanos, si yo voy a vosotros hablando en lenguas, ¿qué os aprovechará, si no os hablase con revelación, o con ciencia, o con profecía, o con doctrina?” (1ª Corintios 14:6). De acuerdo con el Apóstol Pablo, y de acuerdo con las lenguas descritas en Hechos, hablar en lenguas es valioso para aquel que escucha el mensaje de Dios en su propio idioma, pero es inútil para todos los demás, a menos que sea interpretado o traducido.
Una persona con el don de interpretar lenguas (1ª Corintios 12:30), podría entender lo que uno que habla en lenguas está diciendo, aunque inicialmente no conozca ese idioma que está siendo hablado. El intérprete de las lenguas comunicaría entonces el mensaje del que habla en lenguas a todos los demás, de manera que todos pudieran entenderlo. “Por lo cual, el que habla en lengua extraña, pida en oración poder interpretarla” (1ª Corintios 14:13). La conclusión de Pablo en cuanto a lenguas no interpretadas es poderosa, “Pero en la iglesia prefiero hablar cinco palabras con mi entendimiento, para enseñar también a otros, que diez mil palabras en lengua desconocida” (1ª Corintios 14:19).

¿Se supone que un creyente es capaz de sentir la presencia del Espíritu Santo? - Pregunta bíblica

Mientras que ciertos ministerios del Espíritu Santo pueden inducirnos a percibir una “sensación” como la convicción de haber pecado, y/o Su consuelo por haberlo hecho y Su poder (sobre Él), la Escritura no nos enseña a basar nuestra relación con el Espíritu Santo exclusivamente en lo que sintamos. Cada creyente nacido de nuevo tiene al Espíritu Santo morando en él. Jesús nos dijo que cuando el Consolador viniera, Él estaría con nosotros y en nosotros. “Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre: el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.” (Juan 14:16-17). En otras palabras, Jesús está enviando a Uno como Él Mismo para estar con nosotros y en nosotros.

Sabemos que el Espíritu Santo está con nosotros porque la Palabra de Dios nos lo dice. Cada creyente nacido de nuevo es habitado por el Espíritu Santo, pero no cada creyente es “controlado” por el Espíritu Santo, y hay una marcada diferencia. Cuando andamos según nuestra carne, no estamos bajo el control del Espíritu Santo, aunque sigamos experimentando Su morada. El apóstol Pablo nos habla sobre esta verdad, y usa una ilustración que nos ayuda a entenderlo. “No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu.” (Efesios 5:18). Mucha gente lee este verso y lo interpreta creyendo que el apóstol Pablo está hablando contra el vino. Sin embargo, el contexto de este pasaje es sobre el caminar y el luchar del creyente que está lleno del Espíritu. Por lo tanto, hay algo más aquí que sólo una advertencia acerca de tomar mucho vino.

El amor de verdad espera - Devocional

¡Aprendan de Jacob! (Genesis 29:20). Así sirvió Jacob por Raquel siete años; y le parecieron como pocos días, porque la amaba. Memoríza este versículo, escribe un cartel y cuélgalo en tu habitación. ¡7 años esperando! Y para colmo, después le estafaron y tuvo que trabajar 7 años más. Pero… ¡le parecieron como pocos días!.
“¿Sí…? ¿Por qué?” ¡Porque LA AMABA!
En este punto Jacob sí lo tenía muy, muy claro (y no estamos hablando de alguien super espiritual, estamos hablando de Jacob).
Él no quería a Raquel para quitarse las ganas del momento, él realmente la amaba. No fue la pasión de un sábado por la noche con la cabeza alcoholizada, fue la pasión que surge del amor verdadero, aquel que espera su tiempo para disfrutar y vivir plenamente.
Devocional - EL AMOR DE VERDAD ESPERAMétetelo en la cabeza y que nadie te lave el cerebro: ¡El verdadero amor ESPERA! Todo lo demás es mentira.
  • Tengamos sexo. Te amo. (¡Mentira!)
  • Me excitas tanto que ya no puedo esperar más. (¡Mentira!)
  • Todos lo hacen. (¡Mentira!)
  • Yo no quiero ser el único tonto que no pruebe. (¡Mentira!)
  • Les voy a demostrar que no soy una monja. (¡Mentira!)
  • Tu cuerpo lo desea tanto como el mío. (¡Mentira!)
  • Si no lo haces conmigo me busco otra. (¡Mentira!)
  • Si no haces el amor conmigo vas a perder tu mejor oportunidad. (¡Mentira!)
Bla, bla, bla, bla… ¡MENTIRAS! ¡Puras mentiras! El amor de verdad ESPERA.

La cara de la culpabilidad - Crecimiento personal-espiritual

Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado.
Por esto orará a ti todo santo en el tiempo en que puedas ser hallado; Ciertamente en la inundación de muchas aguas no llegarán éstas a él.
Salmos 32:5-6
Era un niño de 8 años que instintivamente contestó el teléfono de su casa y susurró “Hola”. La voz del otro lado dijo, “Sí bueno, ¿Se encuentra tu mamá en casa?” El niño contestó: “Sí, pero está ocupada,” “¿Está tu papá en casa?” “Sí pero también está ocupado…” “Bueno, ¿Hay algún otro adulto en tu casa con el que pueda hablar?” “Sí, hay un policía y un bombero” “¿Podría hablar con uno de los dos?” “No, ellos también están ocupados” “¿Bueno, y qué están haciendo todos que están tan ocupados?” Hubo una pausa muy larga y después el niño contestó, “Me están buscando”.
Cuando somos culpables instintivamente corremos a escondernos; esta acción está en nuestros genes. Esconderse fue exactamente lo que hicieron Adán y Eva cuando Dios salió a buscarles, después de que ellos comieran del fruto prohibido. Sin embargo, esconderse no es la mejor opción para tratar nuestra culpabilidad, ya que ella no se soluciona cuando la escondemos, cuando la negamos, o la cubrimos.
La próxima vez que se sienta culpable dele gracias a Dios porque aún puede sentir. Es decir, cuando el sentimiento de culpabilidad deja de existir en el alma del ser humano, significa que se ha llegado a ser insensible, y las personas insensibles llegan a ser cada vez más capaces de reaccionar con actitudes y actividades destructivas hacia los demás.

¿Cuál es el asunto principal? - Reflexiones

¿Cuál es el punto?
Esa pregunta me vino a la mente mientras observaba al perro de mi nieto buscar y traerme una pelota una y otra vez.
¿Cuál es el punto?
Eso es lo que el autor de Eclesiastés se preguntó mientras pensaba en el monótono ciclo de la naturaleza y de la vida: las mismas cosas sucediendo año tras año, generación tras generación.
¿Cuál es el punto?
refle-punto02Eso es lo que un hombre de negocios jubilado preguntaba, cuando dijo que prefería morir que vivir más tiempo. Había visto y hecho todo lo que había querido. Había llegado a un momento en que la vida le daba más dolor que placer.
¿Cuál es el punto?
He aquí el punto. Unos cuantos años antes de que muriera un amigo mío dijo:
"La vida es una experiencia maravillosa. Es magnífico ver que Dios mantiene la naturaleza funcionando tal como la diseñó.
Es maravilloso saber que estamos aquí para amar a Dios por encima de todas las cosas y amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos.
Es realmente consolador creer que todos nuestros pecados están perdonados por lo que Cristo hizo en la cruz. Y es emocionante pensar en la eternidad que Dios tiene para nosotros. Ciertamente es fantástico estar vivo."
La vida puede ser deprimente cuando se deja a Dios fuera, pero ¡qué emocionante es cuando Él está en el centro de la misma!