sábado, 23 de febrero de 2019

La Aldea

Esta historia aconteció en una aldea de Escocia, una de las cuatro naciones que conforman el Reino Unido. Trata de las aflicciones de una madre cristiana por su hija que, siendo muy jovencita, tomó el mal camino, determinando salir de su hogar para llevar una vida licenciosa.
Como era habitual, llovía intensamente, y la madre pensaba en su hija imaginando que debía estar pasando frío. Muchas noches las pasó en vela esperando su regreso; podría ir a buscarla pero no sabía en qué ciudad estaba. Todos los días hacía mención de su hija en sus oraciones, rogando al Señor que pusiera los medios para que volviera a su hogar.
aldea
Cierta noche, el agua caía torrencialmente desde el cielo, mientras que su corazón triste de mamá no hacía más que pensar en ella. De improviso, sintió fuertes golpes en su puerta, y al abrir, se encontró con una muchacha apenas cubierta con unos trapos muy delgados y empapados a más no poder. 
“Pobre muchacha”, pensó. —Mamá, ¿me perdonas?, dijo la joven. La madre, apenada y regocijada a la vez, abrazándola la introdujo al interior de su casa. —No hay necesidad de que te perdone, jamás te he juzgado, pero te voy a pedir que oremos para que el Señor Jesús entre a tu corazón, dijo. —Pero mamá, si por eso he venido… necesito tu perdón por haberme portado tan mal, ya tengo el perdón de Dios, mi corazón ahora le pertenece a Jesús, respondió la hija. —¿Qué me dices, hija?, preguntó. —Sí mamá, hace dos semanas acepté a Cristo como mi Salvador personal. Él vino a mí cuando más lo necesitaba, caminé días para contártelo, dijo la hija.
Y vio Dios lo que hicieron, que se convirtieron de su mal camino; y se arrepintió del mal que había dicho que les haría, y no lo hizo. Jonás 3:10
Las consecuencias del pecado son catastróficas, y para muchos serán eternas si no hay arrepentimiento. La joven de la historia, abrumada por el pecado, determinó vivir su propia vida, apartándose de la única persona que podía aconsejarla bien, y lo pagó caro. La Biblia dice que la paga del pecado es la muerte, y la sentencia es definitiva, sin apelación.
Una de las cosas que mueve el corazón de Dios, es el arrepentimiento. Sucedió con Nínive, la ciudad que oyó el mensaje de Jonás y se libró de perecer. Del mismo modo, la hija desobediente se arrepintió para convertirse en una nueva criatura, deteniendo de ese modo la justicia de Dios en razón del pecado. Abrió su corazón a Cristo Jesús, encontrando en Él, libertad y sanidad. Amigo, si usted determina aceptar a Jesús como su único y suficiente Salvador Personal, tendrá como resultado el perdón y la oportunidad de ser feliz y tener paz.

¿Por qué debemos estudiar el Antiguo Testamento?

Resultado de imagen de ¿Por qué debemos estudiar el Antiguo Testamento?La Biblia es una progresiva revelación. Si te saltas la primera mitad de cualquier buen libro y después tratas de terminarlo, tendrás dificultades para entender los personajes, la trama y el final. De la misma manera, el Nuevo Testamento es totalmente comprendido solo cuando es visto como basado en los eventos, personajes, leyes, sistema sacrificial, pactos y promesas del Antiguo Testamento (AT). Si solo tuviéramos el Nuevo Testamento (NT), no sabríamos por qué los judíos están buscando al Mesías (un Rey Salvador). Sin el AT, no comprenderíamos por qué este Mesías vendría (ver Isaías 53); no seríamos capaces de identificar a Jesús de Nazaret como el Mesías, a través de las muchas profecías detalladas que fueron dadas concernientes a Él (por ej., su lugar de nacimiento (Miqueas 5:2); el modo en que moriría (Salmos 22, especialmente vv. 1, 7-8, 14-18; Salmos 69:21, etc.), Su resurrección (Salmos 16:10), y muchos más detalles sobre Su ministerio (Isaías 52:139:2, etc.).

Sin el AT, no entenderíamos las costumbres judías mencionadas en pasajes del NT. No entenderíamos las perversiones que hicieron los fariseos a la ley de Dios, al añadirle sus tradiciones. No entenderíamos por qué Jesús estaba tan enfadado mientras purificaba el patio del templo. Y no entenderíamos que podemos usar la misma sabiduría que usó Jesucristo en Sus muchas respuestas a Sus adversarios (tanto humanos como demoníacos).
 

Sin el Antiguo Testamento nos perderíamos numerosas profecías detalladas que solo pudieron cumplirse porque la Biblia es la Palabra de Dios, no de los hombres. Estas profecías nos dan detalles específicos sobre el levantamiento y caída de naciones, cómo caerían, si se levantarían nuevamente, qué poderes serían los siguientes en emerger, quiénes serían los actores principales (Ciro, Alejandro el Grande, etc.), y qué sucedería a sus reinos cuando estos personajes murieran. Estas detalladas profecías son tan exactas que los escépticos atacan diciendo que tuvieron que haber sido escritas después de los hechos. 

El AT también contiene numerosas lecciones para nosotros a través de las vidas de sus muchos personajes. Al observar sus vidas somos animados a confiar en Dios sin importar lo que suceda (Daniel 3), y a no comprometernos en las cosas pequeñas (Daniel 1), para que seamos fieles más tarde ante las cosas grandes (Daniel 6). Podemos aprender que es mejor confesar el pecado pronta y sinceramente, en lugar de pasar la culpa a otros (1 Samuel 15). Podemos aprender a no jugar con el pecado, porque nos encontrará desprevenidos y su mordida es mortal. (Ver Jueces 13-16). 

Podemos aprender que necesitamos confiar (y obedecer) a Dios si esperamos experimentar la vida en Su tierra prometida en esta vida y Su paraíso en la próxima (Números 13). Aprendemos que si consideramos el pecado, solo nos estamos exponiendo a cometerlo (Génesis 3Josué 6-7). Aprendemos que el pecado tiene consecuencias, no solo para nosotros mismos, sino para nuestros seres amados y a la inversa, que nuestro buen comportamiento tiene recompensas no solo para nosotros sino también para aquellos que están a nuestro alrededor (Génesis 3Éxodo 20:5-6).

Prioridades

Un profesor se puso ante los alumnos de su cátedra de filosofía y colocó frente a él unos objetos. Cuando la clase comenzó, sin pronunciar palabra alguna, levantó un frasco grande y empezó a llenarlo con pelotas de golf.
Luego les preguntó a los estudiantes si el frasco estaba lleno. Todos estaban de acuerdo en que si.
Entonces el profesor agarró una caja con pequeñas canicas y las echó en el frasco. Las canicas rodaron a los espacios vacíos entre las pelotas de golf. De nuevo les preguntó a los alumnos si el frasco estaba lleno. Todos dijeron que sí.
Resultado de imagen de PrioridadesEl profesor entonces, sacó una cajita con arena y la vació en el frasco. Por supuesto, la arena llenó los espacios vacíos que quedaban.
Les preguntó a los estudiantes si el frasco estaba lleno. Todos respondieron con un “sí” unánime.
Después el profesor sacó una cafetera llena de café, recién preparado, de debajo de la mesa, y también vertió el café en el frasco, llenando los espacios vacíos que quedaban entre la arena. Los estudiantes se rieron.
Ahora, dijo el profesor mientras la risa disminuía, quiero que sepan que ese frasco representa su vida.
Las pelotas de golf son estas cosas importantes: Dios, sus familiares, sus hijos, su salud, sus amigos, las cosas que los apasionan; las cosas que quedan, si todo lo demás se les va, y sus vidas siguen estando completas. Las canicas son otras cosas que importan, como sus trabajos, sus casas, sus coches… La arena es todo lo demás, las cosas pequeñas”.
Si meten la arena primero en el frasco -continuó-, no quedará espacio para las canicas ni las pelotas de golf. Pasa igual en la vida. Si gastan todo su tiempo y su energía en las cosas pequeñas, nunca les sobrará para ocuparse de las cosas que son verdaderamente importantes. Pongan toda su atención en las cosas que son indispensables para su felicidad. Jueguen con sus hijos. Dejen espacio para las citas médicas. Saquen a su pareja a cenar.
Jueguen más. Siempre habrá tiempo para limpiar la casa y arreglar el depósito… Encárgate primero de las pelotas de golf, las cosas que verdaderamente importan.
Define tus prioridades. Todo el resto es arena”. Una de las estudiantes levantó su mano y preguntó qué representaba el café.
El profesor sonrió:
“Me alegra que lo hayas preguntado. Es simplemente para demostrar que no importa cuán llena parezca estar tu vida, pues siempre hay tiempo para tomarse unos cafecitos con un amigo”.
Lucas 10:41-42
“Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas. Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada.”
Eclesiastés 3:1
Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
Mateo 6:33
Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia.