Un profesor universitario retó a sus alumnos con esta pregunta. ¿Creó Dios todo lo que existe? Valientemente, un estudiante respondió: “Sí, lo hizo!”
“¿Dios creó todo? Preguntó de nuevo el profesor.
“Sí, señor”, respondió el estudiante.
El profesor respondió: “Si Dios creó todo, entonces Dios creó el mal pues el mal existe, y de acuerdo con el principio de que nuestras obras definen quiénes somos, entonces Dios es malo”. El estudiante se quedó callado ante tal respuesta. El profesor estaba bastante satisfecho de sí mismo, y se jactó de que le había demostrado a los estudiantes una vez más, que la fe cristiana era un mito.
Otro estudiante levantó la mano y dijo: “¿Puedo hacerle una pregunta profesor?”
“Por supuesto”, respondió el profesor.
El estudiante se puso de pie y preguntó: “Profesor, ¿existe el frío?”
“¿Qué clase de pregunta es esa? Por supuesto que existe. ¿Nunca has tenido frío?” Los estudiantes se rieron ante la pregunta del joven.
El joven respondió: “De hecho, señor, el frío no existe. De acuerdo con las leyes de la física, lo que consideramos frío, en realidad, es la ausencia de calor. Todo cuerpo u objeto es susceptible de estudio cuando tiene o transmite energía, y el calor es lo que hace que un cuerpo o asunto la tenga o la transmita. Cero grados Cº absolutos es la ausencia total de calor, y toda la materia se vuelve inerte e incapaz de reacción a esa temperatura; el frío no existe, hemos creado esta palabra para describir cómo nos sentimos si no tenemos calor”.