sábado, 23 de marzo de 2013

Jesús Anuló el Acta - Devocional - Vídeo

“Dios anuló el documento de deuda que había contra nosotros y que nos obligaba, lo eliminó clavándolo en la cruz” Colosenses  2:14
En una ocasión, soñé que me encontraba en un gran salón, lleno de archivos y de carpetas. Era como una gran biblioteca llena de archivos con título y números. Estos archivos iban desde el suelo hasta el techo.Tenían títulos diferentes.
Abrí uno de esos archivos, comencé a contemplar las tarjetas y los cerré escandalizado, ya que reconocí los nombres que contenían. Me di cuenta de que en el sueño me encontraba en el salón que contenía los catálogos de mi vida. Allí se escribieron todas mis acciones de cada momento. Actos grandes y pequeños, con todo lujo de detalles. Sin embargo, a pesar de la conmoción interna que sentí, volví a los archivos por la curiosidad que me inundaba.
Algunos archivos me trajeron a la memoria recuerdos dulces y de regocijo, y otros, un sentido de vergüenza y lamentación tan intenso, que miré a todos lados para saber si alguien me vigilaba.
Un archivo tenía como título: Los amigos que he traicionado. Otro, Material que he leído. Otro, Consuelo que he dado. Uno más, Las cosas que he gritado a mis hermanos y amigos. Otro, Las cosas que he hecho cuando estoy enfadado. Otro, Cosas que he murmurado y criticado.
Encontré tarjetas que esperé encontrar y otras que ya había olvidado. Fui abrumado por el volumen de la vida. Cada tarjeta confirmó la verdad de entonces en mi vida. Y cada tarjeta estaba escrita con mi propia letra y firmada con mi propia firma. Cerré avergonzado el archivo. Y de lejos miré otro titulo: Pensamientos lascivos que he tenido.

Honor - Reflexiones

El ambiente estaba cargado de mucha tensión. Rosa Elliot llegó a la cuarta ronda del concurso nacional de ortografía en Washington. Se le había pedido a la pequeña de 11 años, de Carolina del Sur, que deletreara la palabra “admisión”. Ella lo hizo con su suave acento sureño, pero los jueces no fueron capaces de determinar si había pronunciado una “o” o una “a” como letra al lado de la última.
Debatieron entre sí durante varios minutos mientras escuchaban las grabaciones. Sin embargo, la letra decisiva tenía un acento demasiado marcado como para descifrarla. Finalmente, el jefe de los jueces le preguntó a la única persona que podía conocer la respuesta.
- ¿Era una letra “a” o una “o”?, le preguntó a Rosa. En ese momento, estando rodeada de jóvenes concursantes que murmuraban entre ellos, Rosa sabía el correcto deletreo de la palabra. Pero, tranquilamente, sin titubear, contestó que había pronunciado mal la palabra y se fue del escenario.
Todo el auditorio se puso de pie y aplaudió, incluyendo unos cincuenta reporteros gráficos. El momento fue emocionante y lleno de orgullo para sus padres. Aún vencida era victoriosa. En efecto, con el pasar de los años, ¡se escribió más acerca de Rosa Elliot que sobre el “desconocido” ganador del concurso!
Ser una persona que ama la verdad, aun cuando ésta vaya en contra de uno, nos reviste de gran honor…
…EL HONOR PROPIO ES MEJOR QUE LAS LISONJAS AJENAS
I Samuel 2:30
…Porque yo honraré a los que me honran…
Salmos 25:21
…Integridad y rectitud me guarden; Porque en ti he esperado.
Salmos 84:11
…Porque sol y escudo es Dios: Gracia y gloria dará el Señor: No quitará el bien a  los que en integridad andan.
Proverbios 20:7
…El justo que camina en su integridad, bienaventurados serán sus hijos después de él…

Deja a un lado tu orgullo y reconoce tu necesidad - Devocional - Vídeo

A veces somos tan orgullosos, que no podemos reconocer que no estamos llevando la vida que deberíamos llevar delante de Dios.
Tal parece que hubiera momentos en los que creemos que todo está yendo bien, cuando la realidad es que nuestra vida se está yendo, poco a poco, en picado en el sentido espiritual.
Cuando nos irritamos más fácilmente, cuando no sentimos el mismo gusto al cantar una alabanza, o cuando leer la Palabra de Dios se convierte en tedioso, es hora de parar y darnos cuenta de que algo anda mal.
El mayor problema de nosotros es estar mal y no reconocerlo. Creemos que porque en un tiempo  atrás fuimos muy espirituales, siempre seremos así; pero la espiritualidad será el resultado de una comunión diaria y real con Dios, y cuando esa comunión deja de ser diaria y real, es cuando la convertimos en una simple rutina que con el transcurrir de los días se irá perdiendo, hasta convertirse en algo que haremos cada cierto tiempo o que simplemente dejaremos de hacer.

Hoy… Seré Fiel En Mi Ministerio - Devocional - Vídeo

“ y el mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo”  Efesios 4: 11,12.


Al pasar el tiempo en el caminar de mi vida cristiana, he llegado a convencerme del hecho de que cada Cristiano debería entender y comprender cuál es su ministerio, y estar envuelto productivamente en el mismo. Ya sea en el ministerio de la oración, como el de la enseñanza de los niños, visitando enfermos, sirviendo como uno que atiende a los que llegan por primera vez a la iglesia, o atendiendo a las viudas.
delicados-ministerio27bEl ministerio debe ser parte de la vida espiritual del creyente.  Esto comprende también la realización del crecimiento espiritual. La Biblia nos habla del carcelero de Filipos, quien al convertirse, inmediatamente comenzó a ministrar a Pablo y Silas. Él lavó las heridas de ellos, y ese día toda su familia se bautizó junto con él. El ministerio de lavar las heridas tiene un profundo efecto en el testificar a los miembros de la familia.
Sin duda, la familia del carcelero dio el paso a su conversión, porque cada uno de ellos vio un cambio real en el líder de la casa y ese cambio se tradujo en una vida de ministerio y de servicio. El ministerio tiene un profundo efecto en aquellos que lo reciben, así como en quien lo ejerce. La Biblia dice que el carcelero de Filipos tomó a Pablo y a Silas, les llevó a su hogar y les dio comida.
delicados-ministerio27FBNo solamente lavó sus heridas, sino que fue mucho más allá que eso. De todo esto, encontramos que el ministerio del carcelero de Filipos tuvo un profundo efecto en su familia. Él se involucró en el ministerio tan pronto fue salvado.  No esperó, su disposición fue inmediata. Hizo las cosas que eran urgentes en ese momento. 
Hay muchos que no quieren ejercer sus ministerios libremente, porque piensan que lo que ellos hacen no es tan importante como lo que hacen otros. Es maravilloso saber que en el ministerio no hay jerarquías, en lo referente a los ministerios que Dios da. Todos los ministerios son igualmente bendecidos y recompensados, si están bajo el liderazgo del Señor Jesús. Lo único que el Señor quiere es disposición.
Él ha constituido ministerios especiales, como pastor, profeta, maestro, evangelista, para que equipen a todos los santos. Para que todos los santos ejerzan el suyo, su ministerio. Hoy quiero ser fiel a ese ministerio que he recibido de Dios.
Gracias Señor, por darme la oportunidad de servirte y servir a tu pueblo. Hoy quiero ser fiel a ese ministerio y saber que todo lo que hago lo hago para ti.  Que hoy pueda entender donde está la necesidad y pueda invertir esos dones para bendición de otros.  Amén.


¿Qué significa aceptar a Jesús como su Salvador personal? - Preguntas y respuestas bíblicas - Vídeo

Respuesta: ¿Alguna vez ha aceptado a Jesucristo como su Salvador personal? Antes de responder, se debe explicar la pregunta. Para entender bien esta pregunta, primero usted debe entender el significado de las palabras “Jesucristo,” “Salvador” y “personal.”

¿Quién es Jesucristo? Mucha gente reconoce a Jesucristo como un buen hombre, un gran maestro, e incluso un profeta de Dios. Estas cosas son realmente ciertas de Jesús, pero realmente no definen, por sí solas, quién es Él. La Biblia nos dice que Jesús es Dios en carne, que Él llegó a ser un ser humano (Juan 1:1,14). Jesús vino a la tierra para enseñar, sanar, corregir, perdonarnos y, aun más, para morir por nosotros. Jesucristo es Dios, el Creador, el Señor Soberano. ¿Ha creído usted en este Jesús?


¿Qué es un Salvador y por qué necesitamos un Salvador? La Biblia nos dice que todos hemos pecado, hemos cometido actos malvados (Romanos 3:10-18). Como resultado de nuestro pecado, somos merecedores de la ira y el juicio de Dios. El único castigo justo por los pecados cometidos contra un Dios infinito y eterno, es un castigo infinito (Romanos 6:23; Apocalipsis 20:11-15). ¡Esa es la razón por la cual necesitamos un Salvador!

Jesucristo, vino a la tierra y murió en nuestro lugar. La muerte de Jesús, como Dios en la carne, fue un pago infinito por nuestros pecados (2ª Corintios 5:17). Jesús murió para pagar la penalidad por nuestros pecados (Romanos 5:8). Jesús pagó el precio para que nosotros no lo tuviésemos que hacer. La resurrección de Jesús de entre los muertos probó que Su muerte, fue suficiente para pagar la penalidad por nuestros pecados. ¡Esa es la razón por la cual Jesús es el único Salvador! (Juan 14:6; Hechos 4:12) ¿Está usted confiando en Jesús como su Salvador?

¿Es Jesús su Salvador “personal”? Mucha gente ve al Cristianismo como el acto de asistir a la iglesia, la celebración de rituales, o el hecho de no cometer ciertos pecados. Pero eso no es el Cristianismo. El verdadero Cristianismo es una relación personal con Jesucristo. Aceptar a Jesús como su Salvador personal es poner su fe y confianza personalmente en Él. Ninguno es salvo por la fe de otros. Nadie es perdonado por hacer ciertas obras. El único camino para ser salvo, es aceptando personalmente a Jesús como su Salvador, confiando en Su muerte como pago por mis pecados, y en Su resurrección como su garantía de la vida eterna (Juan 3:16). ¿Es Jesús personalmente su Salvador?