miércoles, 27 de mayo de 2020

¿Qué pasó en la Cruz del Calvario?

Hoy se predica poco de la cruz de Cristo y sobre la historia de la crucifixión; pero realmente el centro de la fe cristiana es la muerte y la resurrección de Cristo.
Muchos cristianos, de manera equivocada de pensar, creen que sus pecados, faltas y culpas están aún a flor de piel y Satanás a menudo se los echa en cara. Pero el sacrificio de Cristo Jesús en la cruz es suficiente para limpiarnos totalmente de toda maldad. (Hechos 16:31).

Si el Espíritu Santo comienza a revelarnos el verdadero mensaje de la Cruz del Calvario, estaremos vislumbrando el gran misterio de la redención de Dios al hombre. El cristianismo no será más un cúmulo de cosas por hacer sino la maravillosa noticia celestial de lo que Cristo ha hecho por nosotros.
El mensaje de la cruz de Cristo es un mensaje agradable y debe traer paz al corazón. Son las buenas nuevas de salvación, y es la noticia más hermosa que el hombre jamás haya recibido.
Cristo es suficienteUna vez que se cree en ella, Dios, paulatinamente y a Su tiempo, comienza a hacer una obra profunda y transformadora en el creyente. Esto no sucede a la velocidad que el pastor quiere, sino al paso del Pastor de los pastores.
Este mensaje debe ser predicado: La cruz y nada más que la cruz, porque es así la forma de salvación de Dios al pecador. Es la obra De Dios la que cuenta y no la nuestra. 
El Hijo de Dios así lo ha declarado: ¡consumado, es!

Jesús nos ha limpiado con Su preciosa sangre de todos nuestros pecados, pasados, presentes y futuros. No más corderos, no más fuegos y no más obras: ¡Consumado está!
Dios te ha perdonadoDios lo ha hecho todo. ¿Qué más habremos de añadir al perfecto sacrificio de Dios? El cordero de Dios ha muerto por tus pecados y por los míos. Ha limpiado nuestros corazones de toda nuestra culpabilidad, y ha cargado sobre sus hombros el pecado de todos nosotros. (Véase Isaías 53).

Al que no conoció pecado (Dios), por nosotros lo hizo pecado (a Jesús), para que nosotros (los pecadores) fuésemos hechos justicia de Dios en Él. (en Jesús).  
 
2 de Corintios 5:21

Deja que el Río corra

El Mar Muerto, localizado entre Israel y Jordania, es famoso por ser el punto más bajo de la superficie terrestre. Es también una viva atracción turística por sus saludables balnearios, a los que se dirigen muchos para tomar baños de agua salada y comprar cosméticos elaborados con el lodo de ese mar.
¿Sabes por qué le denominan Mar Muerto? Diferente a la mayoría de los grandes lagos, este no tiene salida. El río Jordán fluye hacia el Mar Muerto pero no hay circulación a la inversa. Y sin compartir lo que recibe, muere.
Relax en el mar MuertoLo mismo se aplica a los seres humanos. Cuando recibimos dones de talento, educación, capital financiero, u otros recursos, podríamos pensar que al compartirlos con otros, quedaría menos para nuestro disfrute personal. Sin embargo, cuando no ofreces de ti mismo a otros, una parte de tu ser muere.
Como el Dr. David Livingstone comentara en una ocasión:
"Las personas hablan del sacrificio que he hecho pasando en África gran parte de mi vida. ¿Puede esto ser llamado sacrificio, si tan solo es admitir una gran deuda con nuestro Dios que nunca podremos pagar?"
¿Es un sacrificio algo que te recompensa con salud, con la conciencia de estar obrando bien, con paz mental, al lado de la radiante esperanza de un glorioso destino? 
Enfáticamente, no es un sacrificio. Antes bien es un privilegio… No merece la pena hablar de esto si recordamos el gran sacrificio que Él hizo, dejando el trono de Su Padre en lo alto, para darse a Sí mismo por nosotros.
Permitamos que el río del amor de Dios fluya de nosotros hacia todos los que nos rodean.
Y no os olvidéis de hacer el bien y de la ayuda mutua, porque de tales sacrificios se agrada Dios. Hebreos 13:16

La Cruz

Para el pueblo que recibió la ley de parte de Dios, la Cruz sería el castigo merecido de un profeta de Belén. El cual perdió la razón y se dio a conocer a ellos como el Cristo de Dios, Aquél del cual se había dicho que los libertaría de todo yugo. Pero ellos no lo reconocieron.
Para el imperio que gobernaba en esa época, la Cruz fue lo que merecía un tumultoso que junto con un grupo de pescadores, publicanos y prostitutas, aseguraba que existía un reino mucho mayor que el que sus ojos veían.
CATÓLICO DEFIENDE TU FE: La cruz de Cristo, sabiduría de DiosPara los custodios del templo, la Cruz fue la consecuencia de que un carpintero perdió la razón y se proclamó a sí mismo el ungido de Dios. Para otros religiosos de la época, la Cruz fue el justo pago para Aquél que sanaba y hacía libres a endemoniados en día de reposo.
Para todo aquel que aún está bajo el dominio del enemigo, la Cruz es una locura sin sentido. O algo que se cuelga en el cuello, o en sus coches como amuleto de buena suerte.
Pero…… hay otros para los cuales la Cruz ha sido todo.
La Cruz significó el paraíso para el ladrón que murió junto a Jesús. Fue el anhelado descanso para una vida malgastada, fue la recompensa más grande que nadie podía pagar; solo su compañero de crucifixión. 
Para aquél soldado que traspasó el cuerpo de Jesús, la Cruz fue la señal de que Aquél hombre en verdad era el Hijo de Dios. 
Para aquél que clama desesperanzado en un cuarto a punto de quitarse la vida, la Cruz se convierte en su única salvación. 
Para aquel cuyo dolor traspasó su alma, la Cruz fue el único bálsamo que pudo restaurarlo. 
Para aquel que había perdido toda cordura, la Cruz pagó el preció para sanarlo. 
Para aquel que era atormentado sin descanso, la Cruz fue lo único con el Poder suficiente para liberarlo. 
Para aquel que era un juguete del enemigo, la Cruz le dio potestad para que hoy el enemigo esté bajo sus pies.
Para todo aquel que estaba muerto, la Cruz fue lo único que le devolvió la vida de manera eterna.

¿Y para ti, qué es la Cruz?

Juan 3:16 “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.”