Casi siempre nos estamos quejando de que estamos mal, que estamos sumidos en la pobreza, rompiéndonos la cabeza al pensar en cómo salir de las deudas, o en cómo podríamos ser sanados, en cómo pudiéramos ser felices...
Cuando pasó el tsunami en Japón, todo fue reducido a ruinas, la gente no tenía a donde ir, pero… había algo que les ayudaría, y era que Japón es un país muy próspero; tenían la esperanza de que el estado no los iba a dejar abandonados. Como la mayoría no son cristianos, tenían la fe depositada en un ser superior que era su gobierno, en los países amigos, etc., que los iban a rescatar.
Punto 1. Así que te encuentras en la calle, sin tener a donde ir,... ¿cómo nos viene la desgracia? y ¿por qué?
1 Pedro 5:10 “Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca”.
Alguna de estas razones pueden aplicarse:
a) Para probarnos
b) Por nuestras malas decisiones
c) Para que Dios pueda ser glorificado
d) Para que nos arrepintamos y busquemos a Dios
e) Para ser más dóciles con el Señor
f) Para ser mejores personas
g) Para que podamos comprender al que sufre
h) Para que salgamos fortalecidos de las pruebas
Vamos a estudiar las primeras tres:
a) El caso de Job (para probarnos)
Job 1:13-19 Y un día aconteció que sus hijos e hijas comían y bebían vino en casa de su hermano el primogénito, y vino un mensajero a Job, y le dijo: Estaban arando los bueyes, y las asnas paciendo cerca de ellos, y nos asaltaron los sabeos y se los llevaron, y mataron a los criados a filo de espada; solamente escapé yo para darte la noticia. Aún estaba éste hablando, cuando vino otro que dijo: Fuego de Dios cayó del cielo, que quemó las ovejas y a los pastores, y los consumió; solamente escapé yo para darte la noticia. Todavía estaba éste hablando, y vino otro que dijo: Los caldeos hicieron tres escuadrones, y arremetieron contra los camellos y se los llevaron, y mataron a los criados a filo de espada; y solamente escapé yo para darte la noticia. Entre tanto que éste hablaba, vino otro que dijo: Tus hijos y tus hijas estaban comiendo y bebiendo vino en casa de su hermano el primogénito; y un gran viento vino del lado del desierto y azotó las cuatro esquinas de la casa, la cual cayó sobre los jóvenes, y murieron; y solamente escapé yo para darte la noticia.
b) Por nuestras malas decisiones
Lucas 15:15-17 “Y fue y se arrimó a uno de los ciudadanos de aquella tierra, el cual le envió a su hacienda para que apacentase cerdos. Y deseaba llenar su vientre de las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie le daba. Y volviendo en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre!
c) Para glorificar a Dios
Juan 11:3-4 Enviaron, pues, las hermanas para decir a Jesús: Señor, he aquí el que amas está enfermo. Oyéndolo Jesús, dijo: Esta enfermedad no es para muerte, sino para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella.
Punto 2. ¿Es esta la voluntad de Dios?, ¿que suframos?
No, Dios quiere que seamos felices, Él no quiere que suframos, mas quiere que tengamos madurez.
Hebreos 5:12 “Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido”.
El problema está en nuestra toma de decisiones, en nuestros errores, o en el caso de Job y Lázaro, que son dos situaciones diferentes.
a) En el caso de Job, Dios quería demostrar que Job era un verdadero hijo, que podía soportar la prueba y que no renunciaría a Dios.
b) En el caso de Lázaro, está muy claro que simplemente sucedió para que Dios fuera glorificado.
c) Pero en el caso del Hijo Pródigo es diferente, Dios se lo permitió para que cambiara.