lunes, 18 de enero de 2016

¿Problemas?

En todas las esferas sociales, ya sea en la clase alta, media o baja, sea en el gran palacio o en una humilde choza, el problema es un huésped no deseado, pero aún así, no falta, y a decir verdad nunca falta a su “cita” con la humanidad; lo ha hecho desde el mismo momento de la creación, incluso antes, pues fue al mismo Dios a quien se le presentó el primer problema. ¿Cómo?, ¿que a Dios se le presentó un problema?
Sí, así es, pues uno de los seres creados, el de mayor confianza, se reveló contra Él y quiso ocupar su lugar, Isaías 14:13-14, pero Dios se enfrentó al problema y con su autoridad pudo solucionarlo, echando fuera a aquél primer rebelde Luz Bel, quitándole el deseo de ser igual o mejor que Él, demostrando que Dios es la solución a todo problema.
Así mismo, en este mundo en el taller de trabajo, en el colegio, en el deporte, etc., siempre habrá alguien que quiere ser mejor y más que los demás, y querrá ocupar el lugar del líder, o del capataz del trabajo, y ese es el problema. El problema de espíritu causa la muerte espiritual, y con ella se enfrenta el ser humano; este por lo general, sale derrotado por el mismo, y pierde su liderazgo pues no sabe cómo hacerle frente; si lo hace con violencia, hasta el puesto de trabajo pierde, o lo expulsan del colegio, o lo suspenden del equipo,... él no sabe que solo Dios es la solución a todo problema.
Esto también acontece en la iglesia del Señor Jesús, pues algunos de los creyentes que alcanzan cierto grado de conocimiento de las escrituras, ya se creen eruditos en ellas, y piensan en su corazón “yo sé más que el pastor que tenemos y puedo ser mejor que él”; y al igual que Luz Bel, hace “acuerdos” con otros “hermanitos" disconformes, para con la excusa del problema, matar espiritualmente y sacar al pastor de la iglesia. Pero el ministro, o ángel de Dios de la iglesia, revestido del poder de Dios y persona decidida, puede hacerle frente a ese problema y vencerlo pues está revestido con el poder de Dios, que es quien puede solucionar ese problema, Isaías 14:11 y 15– Ezequiel 28:16 al 19. 
Un ejemplo de esto es el rey Saúl y el joven David. Su historia la tenemos en 1a Samuel 17, y en ella, al rey Saúl se le presentó un problema de muerte, en la persona de un gigante filisteo llamado Goliat de casi tres metros de estatura, y Saúl, siendo un hombre alto de estatura, 1a Samuel 9:2, tuvo miedo, porque no estaba seguro de sí mismo ni puso su confianza en Dios para que le diera la solución al problema. En esa circunstancia, al gigante Goliat se le presenta un gran problema en la persona de un jovencito llamado David, que al estar revestido con el poder de Dios, demostró que la solución a ese problema no estaba en las armas, sino en la decisión de avanzar con la convicción de saber que si hay cualquier problema, su solución no está en el hombre sino en Dios, aunque sea problema de muerte.
¿Cuál es tu problema?
¿Te dejaron abandonado, tus padres, tu esposa(o)? Salmos 27:10 tiene la solución.
¿Estás enfermo, tienes cáncer, sida, o estás paralitico? Isaías 53:5, soluciona ese problema.
¿Éstas sin trabajo y no tienes para el sustento de tu familia? Filipenses 4:19 te da solución a ese problema.
¿Los médicos te han desahuciado y estas a punto de morir? Juan 11:25 es la solución.
Como puedes ver, Dios es la solución a todos los problemas.
Acepta hoy mismo a Jesús como Señor y Salvador de tu alma y tendrás el arma más efectiva contra los problemas diarios. Amén.

No hay comentarios:

Publicar un comentario