lunes, 21 de abril de 2014

El amor es paciente

¿Cómo es tu trato con las personas que amas?


El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. 
(1 Corintios 13:4-6)
¡Cuántas veces descuidamos o no le damos el valor que merecen las personas más importantes que tenemos a nuestro lado! Nos olvidamos de que Dios nos ha bendecido en gran manera, al darnos una familia y amigos, especialmente aquellos que están más cerca de nosotros, pero a menudo les tratamos como a desconocidos. Muchas veces estamos tan ocupados viéndoles las cosas negativas y sus defectos, que somos incapaces de ver lo bueno que ellos han hecho por nosotros.

"Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad". (Filipenses 4:8).


En las relaciones de pareja, por ejemplo, los reproches y los enfados son moneda corriente en estos tiempos. ¿Alguna vez has estado en esa situación en la que la persona que amas, te hiere más fácilmente que cualquier otra? Debes dejar a un lado la posible sensibilidad que tengas y no alterarte, porque 
el amor es paciente. Se trata de serlo cuánto más sea posible.
Cuando amamos a alguien, no es normal que nos enojemos fácilmente con esa persona; por lo general somos muy pacientes, y si por alguna razón no fuese así, es conveniente sentarse a charlar sobre el tema, y el mismo amor que hay entre las partes, hará que sea más fácil llegar a un acuerdo para mejorar la relación." Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,"(Gálatas 5:22). 

Piense en el amor de Dios, que sin duda siempre fue muy paciente con nosotros, aunque a causa de nuestra multitud de pecados nos merecíamos lo peor (Éxodo 34: 6). Él, en vez de enojarse y destruirnos, hizo un sacrificio, envió a su único Hijo a morir por nosotros: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito para que aquel que crea en Él no se pierda sino que tenga vida eterna
" (Juan 3:16). Amor es sacrificio, y cuando amas a alguien, pones sus necesidades antes que las tuyas. Incluso si estás siendo lastimado tienes paciencia con ella, porque el amor es paciente.

Detente a observar como están tus relaciones con los demás y a examinar tu amor por ellos. Pregúntate si tu forma de amarles es Bíblica e incondicional. Y jamás olvides esto: "Dios te ama a pesar de todos los pecados que cometes diariamente" (Romanos 5:8).



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