Las parejas enamoradas contraen matrimonio para tener a su lado a la persona a quien aman y con quien quieren pasar el resto de sus vidas. Con el transcurrir del tiempo van enfrentándose a pequeños desacuerdos entre ellos, que cuando no son solucionados de una manera sabia, se van acumulando hasta convertirse en un gran problema que puede afectar al amor entre los cónyuges.
Entre los principales problemas que afrontan las parejas están la falta de comunicación, falsas expectativas, adicciones, malos hábitos, falta de preparación para enfrentarse a conflictos, las finanzas, etc. Estos inconvenientes llegan a estorbar al amor, porque ocupan un lugar de privilegio en sus corazones y hacen que dirijan sus miradas a sí mismos, dejando de lado el compromiso que se hicieron en el altar: amarse en las buenas y en las malas, en la salud o en la enfermedad, en la pobreza o en la riqueza.
Posiblemente, el problema principal radique en un concepto erróneo del AMOR, pues muchos piensan que se trata sólo de pasión, de un sentimiento, del hormigueo característico de cuando se ve al ser amado, y que si ya no sienten eso todo se acabó. También se cree erróneamente que el amor se mantiene por sí solo, que ya no es necesario alimentarlo con detalles, con respeto y con las pequeñas cosas que le alimentan. Todo eso lleva a tomar malas decisiones como la infidelidad, el adulterio, etc.
Pero Dios sí sabe qué es realmente el amor. Él decidió amarnos desde el principio y no lo ha dejado de hacer; por malas cosas que hagamos o que le descuidemos, nos espera con los brazos abiertos. Un ladrón, un homicida,... o el pecador más grande, tienen todos la misma oportunidad de ser amados por Él; y su amor es Eterno, como dice Jeremías 31:3 “…Yo te he amado, pueblo mío, con un amor eterno. Con amor inagotable te acerqué a mí.”
Su amor no depende sólo de las emociones o sentimientos, depende de su decisión, y por eso a diario podemos acercarnos a Él y recibir de su gracia, de su misericordia. Proverbios 10:12 dice: “El odio despierta rencillas; pero el amor cubrirá todas las faltas.”
Si alguien te ha dicho “Ya no te amo”, ten por seguro que Dios no hará lo mismo, y eso es lo que tiene más valor, porque podemos sobrevivir sin el amor de una persona, pero sin el amor de Dios nada tiene sentido.
“Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto.” Colosenses 3:14
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