miércoles, 29 de abril de 2015

Vicky Beeching - Noticias de actualidad

Los creyentes de todo el mundo de habla inglesa, se conmocionaron y entristecieron al saber que Vicky Beeching, líder y compositora de adoración muy querida, corroboró que es gay. 
¿Cómo debemos responder?”, se preguntó el escritor cristiano Michael Brown, autor del libro "¿Puede usted ser gay y cristiano?" Pues respondiendo con amor, verdades y preguntas acerca de la homosexualidad.
1. Cuando alguien canta a Dios, lo adora y lo alaba como ella, no es de esperar sentirse traicionado o decepcionado por ella. Así que es comprensible que algunos creyentes se preguntasen: “¿Cómo pudo hacernos esto?”
Pero el hecho es que ella no se lo hizo, ella no le escribió canciones de adoración para usted. De acuerdo con su historia, su sexualidad es algo con la que luchó muchos años pero que ahora se ha vuelto un evento público, lo que no deja de ser una decisión muy personal y exclusiva ante Dios. Y es ahora cuando nuestro primer objetivo debe ser orar por ella para que alinee su vida con el Señor. Arremeter contra ella ahora de forma no racional, solo provocará que la alejemos más de la cruz. Es necesario que oremos por ella para que el Espíritu Santo la convenza de su error, que es lo más importante.
2. Ella no será el último líder cristiano en declarar que es gay. Hoy estamos viviendo una perfecta tormenta espiritual por la ignorancia bíblica; esta ignorancia, además de los compromisos morales, y los cambios sociales se han combinado para producir un profundo engaño espiritual.
Todo esto es lo que abrió la puerta para que la artista de música cristiana contemporánea, Jennifer Knapp , también “saliera del armario”, y eso también, es lo que abrió la puerta para que Dan Haseltine, vocalista de la banda cristiana Jars of Clay, expresara su aparente apoyo por el matrimonio homosexual; así como para ciertos líderes influyentes, como Rob Bell y Jim Wallis que abogan por una nueva definición del matrimonio.
Esto también ha dado oportunidad para que una editorial evangélica promoviera enérgicamente, un libro dedicado a la promoción del “cristianismo gay.”
Pero en cualquier momento de la historia de la iglesia, las ideas de este tipo no se habrían de tolerar ni siquiera durante una fracción de segundo entre los seguidores comprometidos con Jesús, que se fundamentaban en la Palabra. Aunque hoy en día, ciertos cristianos profesos están cuestionando algunas de las verdades bíblicas más básicas sobre la moralidad. Usted puede esperar muchas más sorpresas próximamente, tanto en los pastores, aceptando o refutando esta idea, como en los artistas musicales, pero es doloroso cómo este mal testimonio trata de dividir y cambiar la palabra de aquellos que buscan presentar la verdad de Dios.
3. La Palabra de Dios no ha cambiado. Si 10.000 pastores declararan ser gays mañana, no cambiaría la verdad de la Biblia ni un ápice. 
A pesar del creciente número de los que profesan ser “cristianos homosexuales”, o sea, aquellos que afirman que pueden seguir a Jesús y practicar la homosexualidad al mismo tiempo, no hay “ningún nuevo texto, descubrimiento arqueológico, sociológico, estudios antropológicos o filológicos que se hayan hecho en los últimos 50 años, que nos conduzcan a dar crédito a algún texto bíblico que nos haga pensar de manera diferente a lo que dice la Biblia".
Y así, una vez más, vemos que el error fundamental del “cristianismo gay” está en que estas personas interpretan la Biblia a través del flujo de su sexualidad en lugar de interpretar su sexualidad a través del flujo de las Escrituras.
De cualquier manera, si las canciones de Vicky Beeching tocaron muchas vidas en el pasado, hay muchas personas que deberían estar orando por ella. Vicky dijo: “Lo que Jesús enseñó fue un mensaje radical de bienvenida de inclusión y amor. Me siento segura de que Dios me ama tal como soy, y tengo un gran sentido de comunicárselo a los jóvenes”.
En realidad, lo que Jesús hizo de una manera muy radical fue "tocar" a los peores pecadores de su tiempo y cambiarlos con Su presencia y sus palabras, en vez de afirmar sus pecados. A esto se le puede llamar “la influencia de la transformación” en lugar de la “influencia de la afirmación”, que eso no es el evangelio.

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