sábado, 18 de octubre de 2014

La Esposa del Líder

¿Qué o quién es la esposa de un líder? ¿Es la esclava? ¿Es la que tiene que estar en todas las actividades de su esposo? ¿Tiene que servir siempre a la gente? ¿Debe siempre estar bien vestida y saber hablar? ¿Como madre, tiene que abstenerse de ciertos placeres para estar con los hijos? ¿Y como mujer, tiene que complacer los caprichos del esposo, incluyendo las exigencias sexuales que él le haga?
La esposa del líder es: Simplemente una mujer. Dios nos hizo simplemente, mujeres. Nos dio el sexo femenino con la capacidad de ser el tipo de mujeres que Él quiso que fuéramos en vida. Nos creó para grandes cosas y para alabanza de Su gloria.
La esposa de un líder necesita: Ante todo, saber su valor como persona.
Como mujer. Descubrir quién es, para qué está en esta tierra, cuál es su potencial y lanzarse a la aventura de ser la mujer que Dios destinó que fuera.
Como esposa. Y dijo Dios: No es bueno (nada bueno) que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él. La esposa necesita entender cuál es su posición, dada por Dios, qué rol tiene. Necesita ser una mujer que apoya a su esposo, pero que también se le opone cuando él se sale de los principios de Dios, y que le respeta en su posición de hombre, de cabeza del hogar.
Como madre. Herencia del Señor son los hijos, cosa de estima el fruto del vientre. Necesita y debe amar a sus hijos incondicionalmente, no hacer comparaciones con otros hijos, respetar sus puntos de vista, expresarles amor cada día, ponerlos ante el altar de Dios, recordar que no podemos cambiar a ninguno, soltarlos y dejar que Dios haga Su obra en cada uno de ellos.
Como sierva de Dios. Entender que Dios está más interesado en lo que estamos llegando a Ser, que en lo que estamos haciendo, y para saber esto se requiere mantener una comunión íntima con Dios, meditar en Su palabra, y escuchar y obedecer Su voz.
¿Y cuáles son sus dones, ministerio, habilidades?
Dios forma a las personas a través de sus bases soberanas, aún antes de nacer. Por ejemplo, Jeremías, que fue llamado desde el vientre de su madre, a ser profeta. Usa a personas, eventos y circunstancias para hacer llamados específicos. ¿Qué cosas te satisfacen y te sientes segura y feliz, al realizarlas? Decide por ti misma, qué es lo que quieres hacer para Dios y no permitas que nada ni nadie te lo impidan.
Eres una mujer especial y estás en esta tierra con un propósito, Dios te creó para grandes cosas. Desarrolla tu potencial y da lo mejor de ti para honra de Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario