viernes, 20 de diciembre de 2013

¿Cuál es el plan de Salvación? - Pregunta bíblica

¿Está hambriento? No físicamente hambriento, es decir, ¿carece de algo?, ¿tiene usted un deseo de algo más en la vida? ¿Hay algo profundo en su interior que parece no estar satisfecho nunca? Si es así, ¡Jesús es el camino! Jesús dijo, “Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás” (Juan 6:35).

¿Está usted confundido? ¿Nunca puede encontrar una senda o propósito en la vida? ¿Parece como si alguien hubiera apagado las luces y usted no puede encontrar el interruptor? Si es así, ¡Jesús es el camino! Jesús proclamó, “Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida” (Juan 8:12).

¿Alguna vez ha sentido cómo que se le ha cerrado la puerta de la vida? ¿Ha intentado abrir muchas puertas, solamente para encontrar que detrás de ellas todo está vacío y sin sentido? ¿Está buscando una entrada a una vida plena? Si es así, ¡Jesús es el camino! Jesús declaró, “Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos” (Juan 10:9).


¿Le defrauda habitualmente otra gente? ¿Sus relaciones han sido superficiales y vacías? ¿Le parece como si todos estuviera
n tratando de sacar provecho de usted? Si es así, ¡Jesús es el camino! Jesús dijo, “Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas… yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen” (Juan 10:11,14).


¿Se ha preguntado qué sucede después de la vida? ¿Está cansado de vivir su vida por y para las cosas que solamente corrompen y corroen? ¿Alguna vez duda de que la vida tenga algún significado? ¿Quiere usted vivir después de que muera? Si es así, ¡Jesús es el camino! Jesús declaró, “Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente” (Juan 11:25-26).

¿Quién es el camino’ ¿Quién es la verdad? ¿Quién es la vida? Jesús contestó, “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí” (Juan 14:6). 


El hambre que usted siente es un hambre espiritual, y solamente puede ser saciado por Jesús. Jesús es el único que puede disipar la oscuridad. Jesús es la puerta a una vida satisfactoria,
 es el amigo y el pastor que usted ha buscado. Jesús es la vida en este mundo y en el próximo. ¡Jesús es el camino de la salvación!

La razón por la que se siente hambriento, la razón por la que parece estar perdido en la oscuridad, la razón por la que no puede encontrar significado a la vida, es que usted está separado de Dios. La Biblia nos dice que todos hemos pecado, y por tanto estamos separados de Dios (Eclesiastés 7:20; Romanos 3:23). El vacío que siente en su corazón es por la ausencia de Dios en su vida. Fuimos creados para tener una relación con Dios, pero
 a causa de nuestro pecado estamos separados de esa relación. Aún peor, nuestro pecado puede causar que estemos separados de Dios por toda la eternidad, en esta vida y en la que viene (Romanos 6:23; Juan 3:36).


¿Cómo puede ser resuelto este problema? ¡Jesús es el camino! Jesús, por nosotros, fue hecho pecado (2 Corintios 5:21). Murió en nuestro lugar (Romanos 5:8), tomando el castigo que merecíamos. Tres días después, Jesús resucitó, demostrando Su victoria sobre el pecado y la muerte (Romanos 6:4-5). ¿Por qué lo hizo? Dios mismo contestó esa pregunta, “Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos” (Juan 15:13). Jesús murió a fin de que nosotros pudiéramos vivir. Si ponemos nuestra fe en Jesús, confiando en Su muerte como el pago por nuestros pecados, entonces todos nuestros pecados son perdonados y lavados,
 y así nuestra hambre espiritual será satisfecha, las luces se encenderán, tendremos acceso a una vida plena. Conoceremos a nuestro mejor amigo y buen pastor. Sabremos que tendremos vida después de morir, ¡una vida resucitada con Jesús en el cielo por la eternidad!


“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:16).
¿Ha hecho usted una decisión por Cristo, por lo que ha leído aquí? Si es así, por favor oprima la tecla “¡He aceptado a Cristo hoy!”



No hay comentarios:

Publicar un comentario