Había pastores en la misma región, que velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre su rebaño. 9 Y se les presentó un ángel del Señor y la gloria del Señor los rodeó de resplandor, y tuvieron gran temor. 10 Pero el ángel les dijo:
—No temáis, porque yo os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo: 11 que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor. 12 Esto os servirá de señal: hallaréis al niño envuelto en pañales, acostado en un pesebre. Lucas 2:8-12
En el prólogo de la carta a los romanos, Pablo dice que el Evangelio es la fuerza de Dios para salvar al mundo, que en él cree. Esta palabra llega hasta nosotros mediante la revelación de Jesucristo que recibe Juan de manos de Dios Padre (Apocalipsis 1:1).
Juan ve una puerta que se abre en el cielo, de donde saldrá la revelación de Dios (Apocalipsis 5:7). Esta Palabra emitida por Dios Padre, y revelada por Dios Hijo, llega a ser audible por el Espíritu Santo (Juan 16:13). La Iglesia ha sido facultada por Dios para que sea portadora del Evangelio, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación (2 Corintios 5:19).
El cristiano
Cuando hablamos de carácter cristiano, nos referimos a la forma de pensar y actuar de una persona, y como ésta entiende el Evangelio de Jesucristo. Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos Mateo 5:16. La falta de carácter cristiano nos está llevando a un cristianismo de adeptos a una religión, con muy poco fundamento evangélico.
Lucas nos muestra el panorama de un pueblo que había encuadrado a Dios en esquemas y moldes de pensamiento religioso, los cuales no le permitieron percibir y entender al enviado de Dios. En Apocalipsis, encontramos a una iglesia que ha dejado su primer amor, infiel al proyecto de Dios. Obra que está muerta, y por último vemos a Cristo Jesús tocando las puertas de la iglesia para que lo dejen entrar.
¿Y qué pasa con la iglesia de este tiempo? La biblia, la palabra de Dios, es como una ventana en la que podemos ver el pasado; pero también es un espejo para ver el presente. Retomemos algunos ejemplos:
I. MUCHOS SE PREGUNTAN ¿DÓNDE PODEMOS ENCONTRAR A DIOS?
A. No saben cómo relacionarse con Dios.
1. ¿Dónde está el problema? En la misión de la iglesia, que se ocupa más en obligaciones religiosas que en anunciar el evangelio de Jesucristo. Aquí existe el riesgo de que muchos nunca lleguen a vivir la experiencia cristiana. (Mateo 5:13)
2. Dios está en las cosas pequeñas. No hay por qué buscarlo en lo admirable y majestuoso, sino en lo ordinario, lo cotidiano y en lo pequeño. Esto os servirá de señal: Hallaréis al niño envuelto en pañales, acostado en un pesebre (Lucas 2:12). Dios pasó enfrente del pueblo y no lo conocieron por falta de fe y carácter (Isaías 1:3)
3. ¿Dónde puedo encontrar a Dios? Dios se nos puede ofrecer cuando quiera y como Él quiera; en un anciano despreciado que vive en soledad, o en las lágrimas de un niño indefenso que necesita de nuestra ayuda (Mateo 25:40,45).
B. Visitas no gratas: La religión incapacita para poder encontrar a Dios.
1. Pastores y magos son los que se interesan por Jesús. ¿Dónde estaban los representantes de la fe del pueblo?; “sacerdotes y escribas”, representantes de un pueblo que decía estar al servicio de Dios, pero no conocieron a Dios (Mateo 21:31); les faltó carácter en su fe, la actitud religiosa los desvió de la fe (Mateo 21:43).
2. Nazaret, de donde nadie espera que pueda salir algo bueno, pero de lo insignificante pueden venir grandes cosas. La religión había anunciado a un Dios que causaba temor, pero Lucas trata de cambiar ese concepto, (Lucas 1:28-30) alégrate, el Señor está contigo, no tengas miedo.
3. El pueblo esperaba un mesías majestuoso; pero Dios se despojó de su rango, para hacerse uno de nosotros (Filipenses 2:6-7). Por eso aun su propia familia lo consideró como loco (Marcos 3:21).
II. UN PUEBLO QUE LE FALTA FE Y CARÁCTER
A. El ministerio de Juan el bautista: abandono de sus obligaciones del templo.
1. ¿Qué andaba mal en el templo? (Lucas 3:4), “preparad el camino del Señor, enderezad sus sendas”. Para descubrir a Dios no sirven las discusiones sobre religión. El llamado del bautista no es a un culto ceremonial en el templo, el mensaje del bautista hace reaccionar a la gente, ¿Qué haremos? (Lucas 3:10-14), Lucas tiene las ideas bien claras, pide que el pueblo viva una vida solidaria y fraterna.
2. El Evangelio de Pablo sigue esa misma dirección, pretende que en la comunidad cristiana sean solidarios (Romanos 12:13). Vivir el Evangelio de Jesús es ayudarnos los unos a los otros (Santiago 2:15-16); la adoración a Dios es una forma de vivir la vida en Cristo; pero nos congregamos para el crecimiento en fe y carácter (Efesios 4:15-16).
B. La falta de carácter cristiano nos hace entender y percibir a Dios de forma equivocada.
1. Tenemos el ejemplo de Job. Tenía la idea de un Dios que para suavizar su ira tenía que ofrecerle sacrificio “Porque decía Job: Quizá habrán pecado mis hijos, y habrán blasfemado contra Dios en sus corazones. De esta manera hacía todos los días (Job 1:5). Pero después entendió y percibió a Dios de forma diferente (Job 42:5) De oídas te había oído; mas ahora mis ojos te ven.
Conclusión
La falta de carácter cristiano nos limita a la hora de entender y percibir el Evangelio de Cristo. Jesús en su Evangelio, toca a los leprosos, abraza a los niños, come con pecadores y prostitutas, la gente siente la bondad de Dios en su propia vida. Éste es el Evangelio que la Iglesia debe practicar y anunciar.
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