jueves, 24 de mayo de 2018

¿Miedo al éxito o al fracaso?

¿Tiene usted miedo al éxito o al fracaso? ¿Se ha preguntado alguna vez por qué no logra lo que se propone? Seguro que se lo ha preguntado y muy posiblemente no lo vuelva a intentar.
Definamos Miedo al Éxito: Temor a terminar con alguna dependencia, hacia algo o hacia alguien. La palabra éxito está asociada a salir, lograr, terminar y acabar con la dependencia de cualquier cosa. 
Resultado de imagen de ¿Miedo al éxito o al fracaso?Por ejemplo, muchos/as tienen miedo a salir de la pobreza, o tienen miedo a acabar una relación en la que se es abusada o maltratada, por temor a quedarse sola, y así también muchos tienen miedo al futuro, no llegando a dar los pasos que tienen que dar, esperando que las condiciones sean perfectas. Sucede, en este caso, lo que se definiría como miedo al fracaso.
Pero, ¿quién quiere fracasar? Seguro que nadie, todos queremos tener éxito. Mas a veces en la vida para tener éxito debemos darnos el permiso de fracasar, pues del fracaso podemos sacar varias enseñanzas, pero la primordial es esta: aprendemos cómo no hacerlo de esa forma.
Usted debe saber que el invento de la bombilla eléctrica se lo debemos a Thomas A. Edison, porque él nos “dio” la luz. Consiguió que tuviéramos luz en todas partes, que pudiéramos ver este mensaje por Internet … y por qué en su vida no desestimó ni un solo segundo para inventar la lámpara que nos proporciona iluminación artificial. Fracasó 2000 veces y dijo “yo no he fracasado ni una sola vez, solamente ha sido un proyecto de 2000 pasos”.
Como ayuda debería responder a unas preguntas: ¿Puede ver claramente qué es lo que impide que usted no logre lo que se propone? ¿De verdad desea lograrlo? ¿Puede imaginar como sería una vez logrado? ¿Qué haría si no tuviera miedo? 
Pero la pregunta que naturalmente le sigue es: ¿Cómo se sentiría una vez que logre sus metas o alcance sus sueños? Te toca a ti ver cómo sería tu vida si alcanzaras tus metas.
¿Sabía usted que una de las razones por las cuales no alcanzamos nuestros sueños es el sabotaje que nos hacemos nosotros mismos.?
Cuando Dios te creó Él dijo: “Hagamos al ser humano a nuestra imagen y semejanza” Génesis 1:26  (NVI). Dios depositó en ti Su espíritu, y ese espíritu es ganador.
Algunas personas dicen querer triunfar en la vida y tener éxito, pero al mismo tiempo vemos como sabotean sus propios proyectos de muchas maneras. Los sabotean por medio de la postergación, por no disponer de tiempo o por no tener recursos, ... en fin, se crean límites, y los límites están en su mente. Otras personas comienzan a dar los pasos y cuando las cosas no salen como quieren, escuchamos la famosa frase: “lo importante es que lo intenté”, y se quedan allí. Pero intentarlo no basta, necesitas cambiar tu actitud ante la vida, es tiempo de que te comprometas con tus sueños, que puedas generarlos.
Tienes todo lo que puedes necesitar: tienes a Dios, tienes la vida, tienes dones, talentos, experiencias, belleza y sobre todo ganas de salir adelante. No te sabotees a ti mismo, no rechaces la oportunidad que tienes de aprender. El hecho de que fracases no significa que seas un fracasado. El fracaso no es tu identidad, tu verdadera identidad es que tú eres quien Dios dice que eres, eres creado por Dios para cosas grandes.
Suelta tus miedos: el miedo a crecer, el miedo a cambiar, el miedo a la inseguridad, el miedo a la soledad, el miedo a la envidia, el miedo al que dirán, el miedo a lograr, el miedo a perder, tantos miedos que te han dejado paralizado. Aprópiate de esta palabra:
Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. 2 Timoteo 1:7  (LBLA)
Recuerda lo siguiente: nada ganas con lamentarte, nada ganas con quejarte, nada ganas con decir no soy capaz, no puedo, no tengo, pobrecito yo, la vida ha sido cruel conmigo,  nadie me ama,... nada ganas con ser victima, nada absolutamente ganas con ese tipo de pensamiento derrotista. Cambia tus pensamientos, conviértelos en victoria, empieza por ver tus fortalezas y tus dones, tus habilidades, ¿Cuáles son las experiencias que has tenido? ¿Cómo usarás esas experiencias para alcanzar tus sueños? ¿En qué eres bueno o buena?
Lo que Dios te ha dado es para que lo uses, para que vivas bien y puedas ayudar a otros a vivir la vida al máximo. 
Señor, enséñanos a soltar los miedos y a ver todo lo que Tú puedes hacer en mi vida. Amén.

No hay comentarios:

Publicar un comentario