martes, 22 de agosto de 2017

Un cristiano saludable

Las cartas que escribe Pablo a Timoteo, Tito y Filemón son llamadas cartas pastorales, y las escribe con el fin de que las iglesias y los cristianos sean saludables.
Un cristiano saludable no solo cuida su cuerpo, también cuida su estado espiritual. En la Biblia encontramos varios personajes que empezaron bien pero acabaron mal, por no tener cuidado en esta área.
Resultado de imagen de Un cristiano saludableLa iglesia debe estar en crecimiento, y si no está creciendo espiritualmente es porque está ENFERMA. Y para determinar qué enfermedad tiene hay que hacer un diagnóstico y análisis para llegar al fondo del problema. Para estar saludable físicamente no es suficiente solamente con comer algo, sino saber qué es lo que estamos comiendo.
UN CRISTIANO SALUDABLE ESPIRITUALMENTE DEBE TENER LO SIGUIENTE:
CONOCE SU DOCTRINA: 1 Timoteo 1:5-7 – Pues el propósito de este mandamiento es el amor nacido de corazón limpio, de buena conciencia, y de fe no fingida, de las cuales cosas desviándose algunos, se apartaron a vana palabrería, queriendo ser doctores de la ley sin entender ni lo que hablan ni lo que afirman.
SU VESTUARIO: 1 Timoteo 2:9 – Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia; no con peinado ostentoso, ni oro, ni perlas, ni vestidos costosos.
TIENE CUIDADO ESPIRITUAL: 1 Timoteo 4:16 – Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren.
PROVEE PARA SU FAMILIA: 1 Timoteo 5:8 – porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe y es peor que un incrédulo.
VIVE PARA DIOS Y NO SE AVERGÜENZA: 2 Timoteo 1:6-8 – Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos. Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios.
CUIDA SU CARÁCTER: 2 Timoteo 3:2-4 – Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, engreídos, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita.
PREDICA LA PALABRA AUNQUE NO SEA LÍDER: 2 Timoteo 4:2-3 – que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina. Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias,
SU FAMILIA Y ÉL SON DE BUEN TESTIMONIO: Tito 1:6-7 – él que fuere irreprensible, marido de una sola mujer, y tenga hijos creyentes que no estén acusados de disolución ni de rebeldía. Porque es necesario que el obispo sea irreprensible, como administrador de Dios; no soberbio, no iracundo, no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas,
HOSPEDADOR: Tito 1:8-9 – sino hospedador, amante de lo bueno, sobrio, justo, santo, dueño de sí mismo, retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar con sana enseñanza y convencer a los que contradicen.
NO ES REBELDE: Tito 1:16 – Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, siendo abominables y rebeldes, reprobados en cuanto a toda buena obra.
ES FIEL EN TODO: Tito 2:10 – no defraudando, sino mostrándose fieles en todo, para que en todo adornen la doctrina de Dios nuestro Salvador.
NO CAUSA DIVISIONES: Tito 3:10  – Al hombre que cause divisiones, después de una y otra amonestación deséchalo.
ES OBEDIENTE: Filemón 1:21 – Te he escrito confiando en tu obediencia, sabiendo que harás aun más de lo que te digo.
Esto es lo que hace a un cristiano saludable. Si en nuestras vidas como cristianos estamos fallando en esto, es porque espiritualmente estamos enfermos.
Antes de preocuparse en cómo viven las demás personas preocúpese por su condición de vida como cristiano.
Sea amable con los amigos que vienen a la iglesia, con sus hermanos, deje todo orgullo y demuestre el amor de Cristo. RECUERDE que todos estamos luchando por una salvación y con defectos no vamos a entrar al cielo, por eso día a día debemos tratar de dejarlos.
Y por favor, si usted está haciendo algo malo no se excuse poniendo a otro de ejemplo, porque si otro se va al infierno, eso indica que nosotros queremos seguir sus pasos.
No estamos en la iglesia para seguir las actitudes de otro, pero sí para tratarle como nuestro hermano y amarle como tal, y sobre todo estamos aquí para darle honra a Dios y que Él nos cambie por completo. Porque sabemos que dentro y fuera de la iglesia se reconoce a un verdadero cristiano.

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