lunes, 22 de mayo de 2017

¿Vaya!, El mañana no llega

Si crees que se puede hacer en cualquier momento, no lo harás en ningún momento. Mañana es el día más ocupado de la semana. 
Resultado de imagen de El mañana no llegaMuchas personas quieren y desean muchas cosas pero no se ponen en acción. Dicen: hoy no, mañana. Pero la realidad es que el mañana nunca llega. La postergación es un asesino de sueños. Mucho de lo que hasta ahora no has logrado se debe a que tú mismo has postergado tus sueños esperando que las circunstancias cambien. Y mientras sigas esperando que la situación cambie sin tomar acción, estás desperdiciando tu vida, tus talentos y enterrando tus sueños.
Si quieres que el mañana llegue debes ponerte hoy en acción. He aquí cuatro cosas que debes hacer:
–          Asegúrate de que tu sueño sea tu sueño. Si puedes verlo con cierta nitidez, puedes lograrlo. No se trata de tener un sueño por tenerlo, se trata del propósito para el cual fuiste formado. Se trata de poder implementar una visión hasta convertirla en realidad, no importando el sacrificio que se tenga que pagar. ¿Es mi sueño? ¿Estoy dispuesto a pagar el precio? ¿En qué o en quién me voy a convertir?
–          Sé premeditado y establece una estrategia para llegar a cumplir tus sueños.  Debes definir las actividades que debes hacer y también las que no. Saber cuáles son tus pasos a seguir reduce el miedo, la ansiedad y la incertidumbre. ¿Lo qué estoy haciendo me acerca a mis sueños? ¿De qué debo tener cuidado? ¿Qué debo mejorar? ¿Cuáles van a ser mis prioridades?
–          Ten confianza en ti mismo. Dios ya ha confiado en ti dándote talentos y habilidades únicas para el logro de tus sueños. Es tiempo que te dejes de comparar con otros, porque esa competencia con otros lo que hace es frustrarte, daña tu autoestima. Trata de competir contigo mismo y a los demás trátalos como superiores a ti, ya que ellos también tienen sueños. ¿Cómo es mi confianza? ¿Me estoy comparando conmigo mismo o con otros? ¿Cómo aumento mi confianza?
–          Ten una persona para rendir cuentas de tus actos. La principal razón por la que no tenemos personas a las que rendir cuentas es que tenemos miedo de que nos exijan, tenemos miedo de mostrar nuestros defectos. Tenemos miedo a quedar mal con otros, pero el mayor miedo es no asumir la responsabilidad de nuestros sueños.
Es más fácil culpar a otros o a las circunstancias, o excusarnos en nuestras carencias y debilidades que asumir responsabilidad de lo que anhelamos. Necesitamos una persona a la cual rendir cuentas de nuestros sueños.
¿A quién le rindo cuentas? ¿Necesitaré un adiestrador o un mentor? ¿Cómo sabré si mis acciones van a dar los resultados que busco?
Lograr los sueños no es nada fácil, de hecho todos los sueños se han logrado en base al esfuerzo y al sacrificio de aquellos que dijeron: no voy a esperar mañana, hoy voy a comenzar a construir mi sueño. ¿Estás dispuesto? ¿Cuándo vas a comenzar?

No hay comentarios:

Publicar un comentario