Poder en la alabanza y adoración

¿Por qué es tan importante la alabanza y la adoración a Dios? ¿Comprendes el inmenso poder que se manifiesta cuando los hombres y las mujeres de Dios se unen para glorificar unánimes su nombre?

Alabar a Dios es un tema verdaderamente profundo sobre el cual muchos libros se han escrito, muchos mensajes se han predicado, muchas conferencias y talleres se han dictado. Históricamente vemos que cuando el hombre de Dios se entregaba en alabanza y adoración a Dios, su Poder se manifestaba.

Hoy hay muchas personas que sufren angustia espiritual y emocional. Son muchos los que están agobiados y se sienten cargados. Pero ahí está, la alabanza es un instrumento que en las manos del creyente se vuelve un arma espiritual poderosa. En la alabanza hay liberación espiritual, sanidad y restauración para aquel que la ejecuta, así como para aquellos que participan en ella. Veamos algunos ejemplos en la Biblia del Poder de la alabanza.

I. LAS CÁRCELES SON ABIERTAS Y LOS REOS LIBERADOS (Hechos 16:25-26)

• Pablo y Silas son encarcelados injustamente
• Son azotados con mucha dureza, como si fuera unos criminales.
• Son puestos en el calabozo más profundo (el más horroroso, el más insalubre, lleno de ratas y agua podrida estancada), y les colocaron un cepo en las manos y cadenas en sus pies para inmovilizarlos.

¿Qué hicieron ellos en ese momento? Inexplicablemente cantaron alabanzas al Señor.

Hechos 16:25-26

“…Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían. Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron….”

Cuando alabamos a Dios, salimos del mundo natural y entramos en el mundo espiritual, cuando alabamos y adoramos a Dios en espíritu y en verdad, pasamos inmediatamente a lo sobrenatural y removemos todas las fuerzas del diablo, que atan y encadenan la vida de las personas.

Es entonces cuando suceden milagros, cuando las vidas son liberadas y transformadas.

Eso sucedió en aquella noche oscura. Cuando Pablo y Silas comenzaron a alabar a Dios, su canto traspasó el mundo físico, y sucedió un hecho sobrenatural; vino un terremoto que sacudió los cimientos de aquella prisión y rompió las cadenas de Pablo y Silas y de los demás presos. ¡Gloria a Dios!

II. HAY VICTORIA EN LA GUERRA ESPIRITUAL (2 Crónicas 20:18-19; 21-22)

• Josafat era el Rey de Judá, que había sucedido a su padre Asa.
• Durante su reinado, los amonitas, moabitas y edomitas se unieron para invadir Judá desde el Sur.
• Un total de tres ejércitos, se juntaron para invadir Jerusalén
• ¿Qué hizo Josafat?

2 Crónicas 20:3-4; 15, 18-19; 21-22

“…Entonces Josafat tuvo temor y humilló su rostro para consultar a Jehová, e hizo pregonar ayuno a todo Judá. Y se reunieron los de Judá para pedir socorro a Jehová; y también de todas las ciudades de Judá vinieron a pedir ayuda a Jehová….” 

“…15 y dijo: Oíd, Judá todo, y vosotros moradores de Jerusalén, y tú, rey Josafat. Jehová os dice así: No temáis ni os amedrentéis delante de esta multitud tan grande, porque no es vuestra la guerra, sino de Dios. 

“…18 Entonces Josafat se inclinó rostro a tierra, y asimismo todo Judá y los moradores de Jerusalén se postraron delante de Jehová, y adoraron a Jehová. 19 Y se levantaron los levitas de los hijos de Coat y de los hijos de Coré, para alabar a Jehová el Dios de Israel con fuerte y alta voz …” 

“…21 Y habido consejo con el pueblo, puso a algunos que cantasen y alabasen a Jehová, vestidos de ornamentos sagrados, mientras salía la gente armada, y que dijesen: glorificad a Jehová, porque su misericordia es para siempre…”

La alabanza que cantaban glorificaba a Dios; no estaba basada en sus emociones.

Actualmente, los compositores cristianos de alabanza y adoración, están más enfocados en escribir sus propias experiencias emocionales en la vida cristiana, que en escribir letras que verdaderamente exalten y glorifiquen el nombre de Dios.

¿Cuál fue el resultado cuando el pueblo se volcó en alabanzas a Dios?

“…22 Y cuando comenzaron a entonar cantos de alabanza, Jehová puso contra los hijos de Amón, de Moab y del monte de Seir, las emboscadas de ellos mismos que venían contra Judá, y se mataron los unos a los otros….”

Cuando se levanten contra ti ejércitos, (huestes espirituales de maldad), ejércitos de deudas, ejércitos de enfermedad, ejércitos de malas noticias, ejércitos de desamparo, ejércitos de desempleo, ejércitos de ansiedad y estrés, ejércitos de enemigos hostiles que amenazan tu paz, tu tranquilidad, tu comunión con Dios; en ese momento empieza a alabar al Señor. Empieza a adorar a nuestro Dios, y tus enemigos serán confundidos y terminarán destruyéndose entre ellos para la gloria de nuestro Dios.

III. LA ALABANZA CAUSA LIBERACIÓN Y NOS DA LA VICTORIA CONTRA LOS DEMONIOS (1 Samuel 16:14-23)

• Saúl es ungido como Rey (tribu de Benjamín).
• Saúl gobierna bien al comienzo, pero un día Dios le dijo que destruyera a un enemigo en común: Amalec (Deuteronomio 25: 17-19; Éxodo 17:6). 
• Saúl no lo hizo.
• Como consecuencia de esto el Señor lo desechó como Rey, el Espíritu Santo lo abandonó y un espíritu malo venía a perturbarlo día y noche. Espíritu que lo atormentaba con voces, acusación, etc.
• ¿Qué hicieron los criados de Saúl para ayudarlo?

1 Samuel 16:14-15; 23

“…El Espíritu de Jehová se apartó de Saúl, y le atormentaba un espíritu malo de parte de Jehová. 15 Y los criados de Saúl le dijeron: He aquí ahora, un espíritu malo de parte de Dios te atormenta…”

“…23 Y cuando el espíritu malo de parte de Dios venía sobre Saúl, David tomaba el arpa y tocaba con su mano; y Saúl tenía alivio y estaba mejor, y el espíritu malo se apartaba de él….”

¿Qué música tocaba David? ¿Cómo era la letra de las canciones que cantaba? Era una música que llevaba a Saúl al cielo; una letra que glorificaba a Jehová completamente. Cuando eso sucede los demonios huyen. ¿Por qué?

Porque el diablo quiere la adoración para él; siempre quiso ocupar el lugar de Dios. Así que él no soporta cuando el Pueblo de Dios alaba a su Rey. Así que exaltemos a nuestro Dios, glorifiquemos su nombre y el diablo huirá. ¡Alabado sea Dios!

CONCLUSIÓN:

Es tiempo de dejar de luchar con nuestras propias fuerzas humanas, usando solo nuestra inteligencia y nuestra lógica humana, y levantar nuestras manos en adoración a Dios en espíritu y en verdad.

Como consecuencia de ello, vendrá la bendición y la victoria para nuestras vidas, porque el mismo Espíritu que se movía cuando cantaban Pablo y Silas, cuando Josafat cantaba con el pueblo y cuando David tocaba, es el mismo que está disponible hoy para la Iglesia del Señor en nuestros días.