viernes, 21 de agosto de 2015

Disfrute cada día de su vida

Satanás tiene una meta, y es la destrucción. Él sólo viene a matar, robar y destruir todo lo bueno que Dios tiene en mente para nosotros. Pero Jesús dijo que Él vino para que tuviéramos vida y la disfrutáramos. 
¿Está disfrutando de su vida? ¿Está disfrutando cada faceta de su vida o solo disfruta las partes que considera “divertidas”? A través del poder del Espíritu Santo podemos disfrutar todo. Podemos disfrutar de nuestro trabajo y de los tiempos de asueto. Gozar en el trayecto y no solo al llegar a destino. La vida es en realidad un viaje. Aunque un tren llegue a una estación, pronto vuelve a salir hacia otra. Pasamos más tiempo en la vida esperando que llegando. 
Dios nos creó para que vivamos siempre proponiéndonos metas, y una vez que alcanzamos un objetivo, no pasa mucho tiempo hasta que nos proponemos otro. Por eso debemos aprender a disfrutar del momento en que nos encontramos y del camino por el que vamos.
Una de las formas en que Satanás nos roba, es haciéndonos pensar que solo podemos disfrutar de ciertas cosas, pero no de otras. Sin embargo, la verdad es que podemos lograr una nueva forma de pensar decidiendo disfrutar de todo en la vida. Yo paso mucho tiempo esperando en los aeropuertos, y a veces, los vuelos se cancelan o se retrasan; antes yo permitía que eso me robara el gozo. A menudo, llegaba a estar fuera de quicio, frustrada y enojada, pero eso no cambiaba mis circunstancias, solo me robaba el gozo y la paz. Finalmente, aprendí que aunque las circunstancias cambien, yo no tengo por qué cambiar con ellas. Puedo negarme a permitir que Satanás me altere. Cuando Satanás le roba o lo exaspera, en realidad no está detrás de sus bienes, ¡lo que él quiere es su gozo!
Tomar la decisión de disfrutar de la vida fue muy importante para mí, y puede serlo también para usted. La vida se desperdicia si nos permitimos sentirnos miserables todo el tiempo. Jesús dijo en Juan 14:27 que nos había dejado su paz y no debemos permitirnos estar mal. Él nos ha dado dones y responsabilidades. Somos socios de Dios. Su parte es proveernos la paz y el gozo, y nuestra parte es no permitir que el diablo nos los robe. ¡Decídase hoy a disfrutar cada día de su vida!

No hay comentarios:

Publicar un comentario