De esta misma manera rechazamos el consejo de nuestros padres, por considerar que no entienden la nueva forma de vivir y se han quedado en la era de los dinosaurios…
Y a veces ni tan siquiera somos capaces de entender tener una relación con Dios. La Biblia y la iglesia nos parecen aburridos, lo que nos lleva a comenzar a vivir apartados de Él.
Muchos pasan la vida dándose golpes contra la pared. Una y otra vez, y fracasan sin poder hallar la salida a sus problemas. Tal pareciera que el ser humano no puede encontrar la puerta de escape al vacío que hay en su interior, porque en su obstinación prefiere golpearse una y otra vez con el fracaso, antes de darle una oportunidad a Dios.
¿Sabías que el ser humano es el único que tropieza varias veces en la misma piedra? No nos gusta ir por la vida recibiendo golpes, pero nuestra terquedad invariablemente nos conduce, una y otra vez, a experimentar el dolor sin ni siquiera permitimos que alguien nos aconseje.
Abre tus ojos, mira la puerta que está abierta el día de hoy, mira a Cristo, Él es tu salvación. Él es al que buscabas, Él es el que dará sentido a tu vida; no lo pienses más, deja tu orgullo atrás y entrégate de lleno a Él.
“Y tal confianza tenemos mediante Cristo para con Dios: No que seamos competentes por nosotros mismos para pensar algo como de nosotros mismos, sino que nuestra competencia proviene de Dios, el cual también nos hizo ministros competentes de un nuevo pacto, no de la letra, sino del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica “. 2 Corintios 3:4-6
No hay comentarios:
Publicar un comentario