domingo, 4 de agosto de 2013

El último capítulo - Ánimo en mensaje

A veces nos parece que lo que estamos viviendo es muy difícil y que nadie más afronta situaciones tan duras como las que a nosotros nos toca afrontar.
Sucede que cuando los problemas vienen a nuestra vida, nuestras emociones y sentimientos nos hacen creer que nuestra historia se está viniendo abajo y que no hay nada más que se pueda hacer.

Pero vivimos una historia que ha sido escrita por el mismo Dios, ese mismo Dios que un día nos buscó cuando andábamos perdidos, que nos encontró, nos llamó, nos perdonó todos nuestros pecados y nos dio una nueva oportunidad en la vida.

En ese mismo instante, Dios también comenzó a reeditar nuestra historia, comenzó a escribir cada capítulo de la forma que consideró más correcta y perfecta, y puede que en algunos momentos sintamos que lo que estamos viviendo es más fuerte que nosotros, pero la realidad es que Dios ya ha medido nuestra capacidad de resistencia y sabe hasta dónde somos capaces de aguantar.

Quizá alguna vez te preguntes: ¿por qué tengo que pasar por todo esto? La realidad es que aunque no te des cuenta, cada momento difícil de tu vida te ha servido para conocer a Dios de una mejor manera, para conocerle de cerca, para conocer sus facetas y lo que Él es capaz de hacer.

La enfermedad te ha servido para conocer a un Dios Sanador, la escasez te ha servido para conocer a un Dios Proveedor, la tormenta te ha servido para conocer a un Dios de Paz, la injusticia te ha servido para conocer a un Dios Justo que nunca tendrá al justo por injusto, y los problemas irresolubles te han servido para conocer a un Dios que hace milagros.

Cada capítulo de tu vida, por muy difícil que te parezca ahora, por muy duro que fuera, te ha servido para moldear tu carácter, para estar más cerca de Dios, porque aunque no lo notes o no quieras reflexionar en ello, cada tormenta, cada crisis, cada desierto en tu vida te ha servido para acercarte más y más a Dios.

Posiblemente hoy estés en medio de uno de esos capítulos que no quisieras protagonizar, quizá hoy pienses que no hay solución posible a tu situación, pero a pesar de todo lo que pienses y sientas en estos momentos de angustia, ten presente que el escritor de cada capítulo de tu vida es DIOS y que Él tiene un último capítulo escrito perfectamente para tu vida.

A pesar de todo lo que puedas pensar, creer o sentir, Dios tiene en su mano poderosa y creativa los últimos párrafos del capítulo de tu vida y Él, y sólo Él, puede determinar como terminará todo. Lo bueno de todo esto es que Él siempre busca el bien nuestro, a pesar de que a veces tengamos que pasar por momentos duros y difíciles, pero todo eso sólo servirá para que conozcas mejor a Dios y para que estés más cerca de Él.

Quiero invitarte a que vuelvas a sonreír, quiero invitarte a que, aun en medio de todas las pruebas o tribulaciones, puedas mirar al cielo y decirle al Señor con una firme convicción: “Yo confió en ti”.

Quizá no sean los mejores días de tu vida, ni el mejor capítulo que te haya tocado vivir, pero lo que debes saber es que tu historia está en las manos del Señor y Él hará que tu último capítulo sea perfecto y hermoso, tal y como Él lo tenía planeado.

No llores, tu historia aún no finaliza, Dios está contigo para abrazarte y hacerte sentir seguro/a.¿Por qué?, porque Él es el único que puede escribir el último capítulo de tu historia.

Sólo dile al Señor:

¡Yo confió en ti!

“¡Pero no hay razón para que me inquiete!
¡No hay razón para que me preocupe!
¡Pondré mi confianza en Dios mi salvador!
¡Sólo a él alabaré!”
 

Salmos 42:5 (Traducción en lenguaje actual)

No hay comentarios:

Publicar un comentario