Tentación Con Salida - Crecimiento personal-Espiritual

No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar. 1ª Corintios 10.13

Este versículo tiene tres declaraciones verdaderas de esperanza para nuestra vida:

1-    Ninguna tentación que no sea humana vendrá a nosotros.
2-    Dios no dejará que seamos tentados más de lo que podamos resistir.
3-    Dios mismo nos dará la salida juntamente con la tentación.

No hay nada más hermoso que encontrar unas palabras de esperanza como esta.

Pablo nos está diciendo,

1- Que toda tentación es humana, es decir no es extraterrestre, es de este mundo.

2- El Padre Celestial nunca permitirá que nos venga una tentación mayor de lo que nosotros podamos soportar, lo que significa que lo que Él permite lo podemos resistir,

3- Además dice que juntamente con la tentación Él nos dará la salida… Hebreos 4.15 dice, Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.

Recordemos que nuestro amado Señor Jesucristo fue totalmente hombre y totalmente Dios, pero su victoria estaba en su corazón puro y limpio, su corazón era perfectamente Santo. El nunca pecó. Nosotros nunca debemos olvidar que ceder a la tentación es producto de la concupiscencia, es producto del pecado que  llevamos dentro del corazón.

Hebreos 2:18 Pues en cuanto él mismo padeció siendo tentado, es poderoso para socorrer a los que son tentados. Padecer significa: soportar, sufrir... Jesús soportó y sufrió, y debido a esos padecimientos, ahora Él puede entendernos y socorrernos, para ser librados de toda tentación.

2ª Pedro.2.9 dice, sabe el Señor librar de tentación a los piadosos y reservar a los injustos para ser castigados en el día del juicio. Entonces, ¿quienes son esos piadosos a quienes librará el Señor de tentación?  A los que le claman, a los que afligen su alma para ser guardados del pecado, a aquellos que le suplican, en el nombre de Jesús, que les haga libres de toda concupiscencia que aún haya en sus vidas; a ellos escuchará el Padre, y enviará ayuda desde lo alto, para que puedan ser protegidos y salvados de caer en la trampa de oscuridad….

El Señor vendrá como pronto auxilio de aquellos que anhelan aborrecer el pecado. Muchas veces, ante las tentaciones que vienen a nuestra vida, seríamos guiados por el Espíritu Santo para orar así, si en verdad lo queremos: Padre, en el poderoso nombre de Jesús, enséñame a aborrecer lo que Tú aborreces y a amar lo que Tú amas, quiero ser hijo tuyo, conforme a tu corazón, un hijo que se parezca a quien le engendró a través del Espíritu Santo y sé que ese eres Tú.

Jesús nos enseñó en la oración del Padre Nuestro, que debíamos pedir ser libres de pecado, ser libres de tentación y librarnos del mal; rogarle al Padre que no nos metiera en el fuego, en la prueba de la tentación, porque recordemos que la tentación es eso, una prueba a nuestras almas, a nuestro corazón, pues es ahí donde mora el pecado en el ser humano. Sólo de esta manera sabremos si estamos avanzando hacia el reino de los cielos.

En Marcos.14.38, Jesús les dijo a sus discípulos cuando estaba a punto de ser arrestado…Velad y orad, para que no entréis en tentación: el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil. No hay otra forma de poder ser librados de la tentación, si no es a través de la oración; sólo a través de entrar en la presencia del Padre, el espíritu se fortalecerá y la carne se debilitará ante el pecado; fortalezcamos al hombre interior y dejemos perecer al hombre exterior.

Una vieja leyenda cuenta, que uno de los nietos de un anciano Jefe indio, le preguntó sobre una lucha intensa que se libraba día a día dentro de su ser, y él quería saber quién de estos dos seres internos ganaría la batalla….El sabio anciano le dio, entonces, una respuesta sencilla; le dijo que ganaría aquella fuerza interior que se alimentara más que a la otra.

Galatas 5.17 dice Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y estos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis. ¿Quién perderá? ¿Quien se fortalecerá?…aquel a quien tú decidas alimentar en tu diario vivir.

Querido amigo, querida amiga, tenemos dos opciones: ceder ante las tentaciones de este mundo, o... resistir, tomados de la mano de nuestro poderoso Señor Jesucristo, quien fue tentado en todo pero sin pecado.