-No traigo tanto dinero. Preciso algo menos caro.
Durante la última visita de Jesús a la ciudad de Betania, María quiso demostrar su amor por Él (Marcos 14: 3-9). "Así que trajo un frasco de alabastro de perfume muy costoso de nardo puro" y lo ungió (v.3). Los discípulos preguntaron airados: "¿Para qué este desperdicio?" (Mateo 26:8). Jesús les dijo que dejaran de molestarla, pues "buena obra ha hecho conmigo" (Marcos 14:6).
Jesús se deleitó en su regalo pues procedía de un corazón de amor. ¡Hasta ungirlo para ser enterrado era hermoso!
¡Qué te gustaría dar a Jesús para demostrarle tu amor? ¿Tu tiempo, tu talento, tu tesoro? No importa si es costoso o barato, si otros te entienden o te critican. "Todo lo que se da con corazón de amor es hermoso para Él".
No hay comentarios:
Publicar un comentario