El perdón de Dios es uno de los regalos más grandes de la vida que una persona pueda recibir de Dios.
Trae voluntariamente tus errores y fallas, tus pecados, a nuestro amoroso Padre celestial y pídele Su regalo de perdón, que te ayude a reordenar tu vida de acuerdo con el designio asombroso para el cual Él te creó. ¡Estarás contento de haberlo hecho!
Trae voluntariamente tus errores y fallas, tus pecados, a nuestro amoroso Padre celestial y pídele Su regalo de perdón, que te ayude a reordenar tu vida de acuerdo con el designio asombroso para el cual Él te creó. ¡Estarás contento de haberlo hecho!
Utiliza la siguiente oración para hacer de nuevo tu compromiso con Dios:
"Amado Padre Celestial, estoy haciendo esto; está mal, y no quiero seguir haciéndolo. Quiero vivir de otra forma. Líbrame de las cosas de mi vida diaria que no se ajusten a Tus caminos. Gracias por darme la oportunidad de quedarme en Tu camino y por reordenar mi vida de acuerdo a Tu plan original, sin importar lo que yo haya hecho.
Reconozco abiertamente los aspectos en los que me he permitido alejarme de Tu camino. He hecho y dicho cosas malas. Quiero que sepas que estoy de acuerdo contigo respecto a ellas y respecto al veneno que pusieron en mi sistema. Perdóname, Señor. Púrgame de su maldad."
"Amado Padre Celestial, estoy haciendo esto; está mal, y no quiero seguir haciéndolo. Quiero vivir de otra forma. Líbrame de las cosas de mi vida diaria que no se ajusten a Tus caminos. Gracias por darme la oportunidad de quedarme en Tu camino y por reordenar mi vida de acuerdo a Tu plan original, sin importar lo que yo haya hecho.
Reconozco abiertamente los aspectos en los que me he permitido alejarme de Tu camino. He hecho y dicho cosas malas. Quiero que sepas que estoy de acuerdo contigo respecto a ellas y respecto al veneno que pusieron en mi sistema. Perdóname, Señor. Púrgame de su maldad."
Señor, gracias porque con tanta facilidad intercambias las cosas malas de mi vida a cambio de más de Ti. Aún cuando me siento frustrado conmigo mismo o avergonzado por cosas que sé que están mal, sé que Tú siempre te acercas a mí con bondad y perdón.
Gracias porque eres el Dios de misericordia y compasión infinitas y no importa cuántas veces busque tu perdón, Tú me perdonas cada vez.
Señor, te pido que yo participe con mejor disposición en el proceso de cambio que se lleva a cabo cuando me arrepiento y busco tu perdón. Gracias porque el arrepentimiento es sólo una de las vías a través de las cuales Tú anhelas cambiarme permanentemente. En el nombre de Jesús, amén.
Reflexiones – El Mayor de los regalos
Ted Turner, exitoso empresario de la TV, hizo una pregunta desafiante a su buen amigo Vartan Gregorian, presidente de la Corporación Carnegie: Tú eres un gran recaudador de fondos. ¿Cuál es la mayor donación que has recibido?
Gregorian le dijo que fue una donación de 500 millones de dólares que Walter Annenberg hizo al sector de la educación.
Turner contestó: ¿Qué te parecen 1.000 millones? Esta noche voy a dar 1.000 millones de dólares. Y lo hizo, prometiendo dar 100 millones al año para financiar los programas de las Naciones Unidas durante los siguientes diez años.
La impresionante filantropía de Turner recibió la atención y el aplauso del mundo entero. Después de todo, era la mayor donación registrada a nivel mundial. ¿Seguro? ¿Y la que registra la Biblia del regalo de Dios al mundo de su "Hijo unigénito"? (Juan 3:16).
Mil millones de dólares es una donación inusitadamente grande. Difícil de imaginar para la mayoría de nosotros. Pero mengua a cero cuando pensamos en el pesebre de Belén y la cruz del Calvario. El valor del regalo de Dios al hombre es inestimable. En asombro absoluto, Pablo dio las gracias a Dios por su "don inefable" (2 Corintios 9:15).
¿Cuál es el regalo más valioso de todos? Es el regalo de Dios de su Hijo unigénito a un mundo pecador. Por medio de la fe en Él podemos tener el perdón absoluto de nuestros pecados y la vida que nunca termina. ¿Has recibido el regalo de Dios?
Juan 3:16
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito…
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito…
No hay comentarios:
Publicar un comentario