Dios el
Señor me dio lengua de sabios, para saber hablar palabras al cansado. Isaías 50;4

Lewis recordó lo mucho que su presencia en su casa
había significado para él, así como para su hermano y su padre en un momento
difícil. Le dio las gracias por sus palabras de pésame, y agregó: "Es
verdaderamente reconfortante evocar esos días del pasado. El tiempo que usted
estuvo con mi madre me parecía muy largo, como a un niño, pero usted se convirtió en
parte del hogar".
Cuando luchamos con las circunstancias de la vida,
una palabra de aliento de los demás puede levantar nuestro espíritu y nuestros
ojos al Señor. Isaías, el profeta del Antiguo Testamento, escribió: Dios el
Señor me dio lengua de sabios, para saber hablar palabras al cansado (50:4).
Cuando miramos al Señor, Él ofrece palabras de esperanza y luz en la oscuridad.
Padre
Celestial, ayúdame a escuchar tus palabras de esperanza hoy. Y ayúdame a
expresarlas a los demás para que las guíen a ti.
Las palabras
compasivas pueden alentar a un corazón triste.
No hay comentarios:
Publicar un comentario