miércoles, 6 de abril de 2016

Auxilio… Dios se olvidó de mí

Si estás leyendo este artículo, es porque te sientes identificado. Muchas personas piensan que Dios se ha olvidado de ellas y se dicen a sí mismos: ¿Por qué me abandonó Dios? ¿Es que acaso no soy digno? He puesto toda mi confianza en Él y todavía no tengo respuesta. Me siento abandonado, solo y triste. ¿Si Dios me ama, por qué permite que estas cosas me ocurran? ¿Por qué oro y nunca me responde?
La verdad es que muchas personas han olvidado cómo vivir, se han centrado tanto en los problemas y en las cosas que les acontecen que se olvidan de la grandeza de Dios y de los planes que tiene para ellos, aunque sus planes son de bienestar. Pero Dios no se ha olvidado de usted, siempre ha estado pendiente y ha cuidado cada detalle de su vida. El mero hecho de estar vivo es una maravillosa oportunidad para ir tras los sueños que Dios puso en nuestros corazones. Dios no se olvidó, no se olvida y no se olvidará de ti porque tú eres su máxima creación, tú eres un poema de Él. Lo que sucede es que Dios no va a hacer lo que a nosotros nos toca hacer.
¿Si usted viviera su ideal de vida, qué le gustaría hacer?
– ¿Ayudar a otros?
– ¿Alcanzar equilibrio en su vida?
– ¿Entablar relaciones profundas y satisfactorias?
– ¿Pasar más tiempo con su familia?
– ¿Disfrutar la vida junto a su esposo o esposa?
– ¿Comenzar su propio negocio?
– ¿Tener una vida saludable?
– ¿Tener un ministerio poderoso?
– ¿Llevar una vida santa?
– La lista podría ser larga, y todo eso es posible cuando adquirimos el conocimiento de Él. Conocimiento es sabiduría, sabiduría es el arte de vivir.
“Pues por falta de conocimiento mi pueblo ha sido destruido”. Oseas 4:6a (NVI)
La falta de conocimiento conlleva destrucción, provoca crisis, derrotas, y muchas veces no encontramos respuestas a nuestros problemas por nuestra falta de conocimiento, por nuestra ceguera al no ver lo que necesitamos ver para seguir adelante, y lo único que alcanzamos a ver son obstáculos. Dios probablemente no te quite los obstáculos cada vez que oras. Él desea que tú crezcas y seas responsable para que solo, guiado por el Espíritu Santo y basado en la Biblia, puedas vencer cualquier obstáculo. Lo que Dios busca es formar y fortalecer nuestro carácter.
Hay un relato llamado: La vida que sostienes está en tus manos
“Un grupo de chicos conocía a un hombre sabio de su pueblo y urdieron un plan para engañarlo. Atraparían a un pájaro vivo e irían a visitar al hombre sabio. Uno de ellos sostendría el pájaro detrás de la espalda y le preguntaría: “Hombre sabio, ¿el pájaro está vivo o muerto?” 
Si el hombre sabio respondía que estaba vivo, el chico aplastaría rápidamente al pájaro y diría: “No, está muerto”. 
Si el hombre sabio decía: “El pájaro está muerto”, el chico le enseñaría el pájaro con vida. Los chicos consiguieron que el hombre sabio los recibiera. El que sostenía al pájaro le preguntó: “Hombre sabio, ¿el pájaro está vivo o muerto?” 
El hombre sabio permaneció en silencio durante unos instantes. Después se agachó hasta que quedó a la misma altura que el chico y le dijo: “La vida que sostienes está en tus manos”.
De la misma manera que muestra este relato “La vida que sostienes está en tus manos”, Dios te ha dado toda la capacidad de poder convertir tus sueños en realidad, y está en tus manos el darles vida o matar tus sueños. Para ello vas a necesitar incorporar a tu vida esa búsqueda constante de la sabiduría, manifestada a través de la lectura de la biblia. 
¿Por qué nos cuesta creer que podemos tener o lograr lo mejor? ¿Dios se ha olvidado de ti? De ninguna manera. ¿Te olvidarás tú de Dios? Es lo más probable que ocurra. Y para no olvidarse de Él hay que estar conectado con Él con un corazón agradecido, no con un corazón lleno de quejas.¿Por qué no dejas tu problema en el altar? ¿Por qué no comienzas a vivir la vida abundante? ¿Por qué no dejas de vivir en el pasado y comienzas a vivir tu futuro?
Hay una frase que dice: “El artista no es nada si no está conectado con su don, pero el don no es nada si no se lo pone a trabajar.” Emile Zola
Recuerda siempre que aunque tú olvides, Dios nunca se olvidará de ti. Ve tras tus sueños recordando las palabras del Apóstol Pablo: ”Estoy convencido de esto: el que comenzó tan buena obra en ustedes la irá perfeccionando hasta el día de Cristo Jesús.” Filipenses 1:6 (NVI)


No hay comentarios:

Publicar un comentario