viernes, 2 de octubre de 2015

Encaminados por Dios

Así ha dicho Jehová, Redentor tuyo, el Santo de Israel:
Yo soy Jehová, Dios tuyo, que te enseña para tu provecho, que te encamina por el camino que debes seguir. Isaías 48:17

¿Alguna vez te has sentido confundido? ¿Has estado pensativo por una decisión que tomaste y no sabes si fue la correcta? ¿Has dudado acerca de alguna decisión a tomar? ¿Te has sentido desorientado? La palabra de Dios está para momentos así y es de desear que te haga bien:
caminando en justicia“Yo soy Jehová tu Dios, tu Redentor, que te enseño provechosamente el camino que debes seguir.” Isaías 48:17
La vida está llena de decisiones grandes y pequeñas. Y las decisiones que tomamos afectan a nuestra vida para siempre y determinan nuestra identidad. Pero hay momentos en que nos vemos en una encrucijada y no sabemos qué decisión tomar.
¿Qué voy a estudiar? ¿Quién será mi pareja? ¿Debo hacer esto? o ¿qué es lo que debo hacer? Son preguntas que nos hacemos en muchas etapas de nuestra vida, y con cierta frecuencia llegan a nuestra mente causándonos desorientación. La incertidumbre es la peor sensación que un ser humano pueda tener.
Pero cuando sientas que no sabes qué hacer, recuérdalo muy bien: ENCOMIENDA A DIOS TU CAMINO Y NO TE APOYES EN TUS PROPIOS PENSAMIENTOS.
La vida Cristiana es una vida de fe, una vida en la que las decisiones no las tomamos con la razón sino con la certeza de ser guiados por Dios. Si crees que Dios existe y que te escucha, ¿por qué no confías en que Él te guiará para tomar la mejor decisión?
No tengas miedo, no dudes y, sobre todo, no le abras, en tu mente, puertas al diablo para que entren toda clase de malos pensamientos que te harán daño. Espera en Dios y encomiéndale tus obras, y verás como Él endereza tu camino.
Puede que tu camino sea tortuoso, que no sepas qué es lo que debes hacer y que no veas ni un solo rayo de luz en la situación que estés viviendo, pero si pones tu confianza en el Señor no te arrepentirás, ÉL TE GUIARÁ A LO QUE ÉL SABE QUE ES MEJOR PARA TI.
Humíllate ante Dios y dile: Señor, no sé qué hacer, yo no conozco el camino y no sé lo que es mejor para mí pero Tú sí lo sabes. Por favor, guíame en ese camino, aléjame de lo que no es tu voluntad, endereza mi camino y dame paz.
No estés confundido, DIOS ESTÁ AHÍ PARA GUIAR TUS PASOS Y PARA ENSEÑARTE EL CAMINO QUE DEBES SEGUIR.
QUE DIOS TE BENDIGA
“Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos,
ni estuvo en camino de pecadores,
ni en silla de escarnecedores se ha sentado;
sino que en la ley de Jehová está su delicia,
y en su ley medita de día y de noche.
Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas,
que da su fruto en su tiempo,
y su hoja no cae;
y todo lo que hace, prosperará”.
Salmo 1:1-3

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