jueves, 27 de agosto de 2015

¡Anímate!

animate
Anímate porque aún estás viva, anímate porque aunque hayas caído aún tienes vida.
Anímate, querida amiga, amigo, si luchaste con eso que te aterra, vuelve a luchar y ahora ve de frente con la esperanza de ganar.
Recuerda que David, aunque pequeño, derrumbó a Goliat, y lo hizo con Dios. Ahora tú puedes hacer lo mismo.
No desesperes y pienses ya la salida no habrá,
no pienses que sucia siempre estarás,
que en el lodo siempre te quedarás.
Eso no es verdad, eso es una mentira demasiada insana para que lo creas.
Aún tienes sangre y tienes aún sentimientos por el bien.
No te des por vencida ni quieras afligirte por tu adversario,
solo concéntrate y pregúntate si esta vez vencerás a ese monstruo que lleva años fastidiándote ya.
No le des tregua, ni tampoco pretendas conciliarte con él,
porque en un gran hoyo caerás.
Y si le das tregua, nunca dejes de patalear como nadador en el mar.
Mantén siempre tu cabeza en alto y lucha con todas tus fuerzas y con las fuerzas de Dios. Ruégale, pídele, clámale pero no te quedes inmóvil.
Sea lo que sea que estés atravesando, no lo estás haciendo sola, porque...

Dios está contigo y también está tu alma de niño.

No hay comentarios:

Publicar un comentario