viernes, 31 de enero de 2014

¿Qué es el verdadero Evangelio? - Preguntas bíblicas

El verdadero Evangelio son las buenas noticias de que Dios salva a los pecadores. El hombre es pecador por naturaleza y está separado de Dios, sin esperanza alguna de remediar tal situación. Pero Dios ha provisto los medios para la redención del hombre, en la muerte, sepultura y resurrección del Salvador, Jesucristo.

La palabra “evangelio” significa literalmente “buenas nuevas.” Pero para comprender verdaderamente lo buenas que son estas noticias, debemos entender primeramente las malas: 
Como resultado de la caída del hombre en el Jardín del Edén (Génesis 3:6), todas y cada parte del hombre, (mente, voluntad, emociones y carne), han sido contaminadas por el pecado. Por la naturaleza pecadora del hombre, éste no busca ni puede buscar a Dios. No tiene el deseo de venir a Dios y, de hecho, su mente mantiene una hostilidad hacia Dios (Romanos 8:7). Además, Dios ha declarado que el pecado del hombre le condena a una eternidad en el infierno, separado de Él. Es en el infierno donde el hombre paga el castigo por pecar contra un Dios santo y justo. Verdaderamente estas serían muy malas noticias si no existiera un remedio.
Sí lo hay. En el Evangelio, Dios, en Su misericordia, ha provisto ese remedio, un sustituto para nosotros – Jesucristo – quien vino a pagar el castigo por nuestro pecado, mediante Su sacrificio en la cruz. Esta es la esencia del Evangelio que Pablo predicaba a los corintios. 

En 1 Corintios 15:2-4, él explica los tres elementos del Evangelio – la muerte, sepultura, y resurrección de Cristo a nuestro favor. Nuestra vieja naturaleza murió con Cristo en la cruz y fue sepultada con Él. Entonces nosotros fuimos resucitados con Él a una nueva vida (Romanos 6:4-8). Pablo nos dice que nos “sujetemos firmemente” a este verdadero Evangelio, el único que salva. Creer en cualquier otro evangelio es creer en vano. En Romanos 1:16-17, Pablo también declara que el verdadero Evangelio “Es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree,” con lo cual él nos está diciendo que la salvación no se logra mediante el esfuerzo del hombre, sino por la gracia de Dios a través del don de la fe (Efesios 2:8-9).

Mediante el Evangelio, a través del poder de Dios, aquellos que creen en Cristo (Romanos 10:9) son salvados del infierno. Nos es dada toda una nueva naturaleza (2 Corintios 5:17) con un corazón cambiado y un nuevo deseo, nueva voluntad, y nueva actitud, que son manifestadas en buenas obras. Este es el fruto que el Espíritu Santo produce en nosotros, con y por Su poder. Las obras nunca son los medios para la salvación, pero sí son la prueba de ella (Efesios 2:10). Aquellos que son salvados por el poder de Dios, siempre mostrarán la evidencia de la salvación por medio de una vida transformada.



No hay comentarios:

Publicar un comentario