Una relación de confianza
Un equipo de botánicos participaba en una investigación de flores extrañas en los Alpes. En el pequeño saliente de una roca se pudo identificar un fino ejemplar, que podía ser alcanzado solamente por medio de una cuerda salvavidas. El trabajo era demasiado peligroso para los inexpertos botánicos, por lo tanto, llamaron a un joven pastor de ovejas que conocía muy bien la región. Le ofrecieron al chico varias monedas de oro para que se deslizara por la cuerda y cogiera la extraña flor.
Aunque el chico deseaba las monedas con desesperación, tenía miedo, pues el trabajo era demasiado peligroso. Varias veces echó un vistazo al precipicio, pero no podía ver la forma segura de alcanzar la flor. Además, él tendría que depositar su confianza en las manos de gente extraña que estarían sosteniendo la cuerda salvavidas.
Entonces al muchacho se le ocurrió una idea. Dejó al grupo sólo durante varios minutos y regresó cogido de la mano de un hombre mucho mayor que él. Entonces, el joven pastor corrió con ansias hacia la orilla del precipicio y les dijo a los botánicos:
-Ahora pueden amarrar la cuerda por debajo de mis brazos. Bajaré por el cañón, siempre y cuando sea mi padre el que sostenga la cuerda.
El chico compartía con su padre una relación de confianza, y estaba dispuesto a depositar su vida en las manos de él.
De la misma manera que tus hijos confían en ti, así también debes hoy depositar toda tu confianza en tu Padre Celestial.
No trates de perfeccionar a tu hijo, insiste en perfeccionar tu relación con él.
Proverbios 15:30
La luz de los ojos alegra el corazón, y la buena nueva conforta los huesos.
Hoy… Caminaré en Confianza Aunque no Sepa el Final
“Por la fe Abraham, siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a donde iba” Hebreos 11:8.
Abraham comenzó su viaje sin el menor conocimiento de su destino final. Él obedeció su noble impulso sin ningún discernimiento de las consecuencias de esa decisión. Él tomó un camino y no se detuvo para saber que había más adelante, antes de tomar el otro paso.
Esto es fe, hacer lo que Dios dice aquí y ahora, dejando los resultados a él. La fe no está interesada en conocer todos los eslabones de la cadena, su devota atención está enfocada en el próximo eslabón.
Fe no es el conocimiento de un proceso moral, es la fidelidad al acto moral. Fe siempre deja algo al Señor, Fe obedece al mandamiento inmediato del Señor y deja la dirección y el destino a Él. Por lo tanto hoy caminaré en fe, dejando todos los resultados y el final del camino al Señor.
La fe cumple el camino con serenidad. En un mundo que sólo se mueve por la vista y ofrece oportunidades, diciéndonos lo que hay adelante del camino para atraernos a sus redes, caminar por fe parece muy arriesgado, pero yo hoy quiero caminar por fe sabiendo que Dios tiene todo el control.
Hoy necesito tomar un camino y no preguntar qué me espera más allá de ese paso, sino dar el segundo y tercero con mi vista puesto en el autor y consumador de mi fe. Sé que, puestos mis ojos en Él, Él me dirá cuando dar el próximo paso y cuando Él lo diga, lo hago aquí y ahora sin esperar más y sin quedarme quieto lleno de temor. Hoy necesito dejar al Señor la dirección y el destino de mi vida.
Señor, gracias por darme la fe que necesito. Sé que mi vida, mi familia, mi futuro, mi trabajo están en tus manos. Hoy decido tomar los pasos de fe y ya no vivir por vista. La meta final de mi camino Tú la conoces , porque ya la has predeterminado y en esa confianza yo me quiero mover y en esa fe yo quiero vivir. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario