lunes, 7 de enero de 2013

Lo que yo soy, es lo que importa - Reflexiones - vídeo

Una maestra decidió llevar un proyecto-estudio a su clase para ver qué clase de influencia tendría en ella. Dio a cada uno de sus estudiantes tres cintas, y les dijo que fueran e hicieran conocer y probar en otros esta ceremonia de reconocimiento personal.
Entonces tendrían que hacer un seguimiento de los resultados, ver quiénes honraron a la clase la semana siguiente. Uno de los chicos de la clase fue a donde un joven ejecutivo de una compañía cercana, y le reconoció por haber planificado su carrera. Colocó una cinta azul en su camisa, y luego le dio otra de las cintas.
- Estamos haciendo en la clase un proyecto sobre reconocimiento, le dijo, y nos gustaría que usted busque a alguien que admire para que le dé una de las cintas azules, y la otra para que esa persona haga lo mismo con alguien más a fin de mantener esta ceremonia en marcha. Una vez hecho esto, por favor, infórmeme de qué sucedió.
Más tarde, ese mismo día, el joven ejecutivo fue a ver a su jefe, quien, a propósito, tenía fama de ser un individuo gruñón y de mal humor. Le hizo sentarse y le dijo que le admiraba profundamente por ser un genio creativo. El jefe se sorprendió. El joven ejecutivo le preguntó si aceptaría la cinta azul como regalo, y le pidió permiso para colocársela en el pecho.
- Seguro, hazlo, contestó su sorprendido jefe.
El joven ejecutivo tomó la cinta azul y la colocó en la chaqueta del jefe, sobre su corazón.
- ¿Me haría un favor?, le dijo mientras le daba la última cinta. ¿Querría tomar esta cinta extra, y dársela como prueba de admiración a alguien más? Es que el chico que me dio estas cintas está llevando a cabo un proyecto de su escuela. Queremos mantener en marcha esta ceremonia de reconocimientos, y ver cómo afecta a las personas.
Esa noche el jefe llegó a su casa, se dirigió a su hijo de catorce años de edad y se sentó con él.
- Hoy me sucedió algo increíble, le dijo. Estaba en mi oficina, cuando uno de los jóvenes ejecutivos entró, me dijo que me admiraba y me dio una cinta azul por ser un genio creativo.
Después la puso en mi chaqueta, sobre mi corazón; es esta cinta azul que dice “Lo que yo soy, es lo que importa”. También me dio una cinta extra y me pidió que encontrara a alguien más a quien reconocer. Mientras conducía para casa esta noche, empecé a pensar a quién honrar con esta cinta, y pensé en ti.
Quiero darte este reconocimiento. Mis días son realmente agitados y cuando llego a casa no te presto mucha atención. A veces te grito por no sacar buenas notas en el colegio y por tener tu dormitorio echo un desastre, pero esta noche quiero sentarme aquí contigo y hacerte saber que tú eres importante para mí. Tú y tu madre sois las personas más importantes de mi vida. Eres un gran chico y te amo.
El sorprendido muchacho comenzó a sollozar, y no pudo contener las lágrimas. Todo su cuerpo se sacudió.
- Papá, le dijo llorando y mirándole firmemente, estaba planeando suicidarme mañana porque pensaba que tu no me querías. ¡Pero ya no necesito hacerlo!
Marcos 6:34
Y saliendo Jesús vio gran multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas que no tenían pastor; y les comenzó á enseñar muchas cosas.
Proverbios 12:26
El justo sirve de guía a su prójimo: Mas el camino de los impíos les hace errar.
Lucas 10:27
Y él respondiendo, dijo: Amarás al Señor tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y de todas tus fuerzas, y de todo tu entendimiento; y a tu prójimo como a ti mismo.
Romanos 15:2
Cada uno de nosotros agrade a su prójimo en bien, para edificación.

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