martes, 6 de junio de 2017

El desafío de la vida

¿Has observado la preparación de los pájaros ante las adversidades?
Están días y días haciendo su nido, recogiendo materiales a veces traídos desde largas distancias…
… Y cuando ya está terminado y están listos para poner los huevos, las inclemencias del tiempo o la obra del ser humano o de algún animal lo destruye y tira por el suelo lo que con tanto esfuerzo se logró…
Resultado de imagen de El desafío de la vida del pájaro¿Qué hace el pájaro? ¿Huye, se paraliza, abandona la tarea?
De ninguna manera. Vuelve a comenzar, una y otra vez, hasta que en el nido aparecen los primeros huevos.
A veces -muchas veces- antes de que nazcan los pichones, algún animal, un niño o una tormenta vuelve a destruir el nido, pero esta vez con su precioso contenido…
Duele comenzar desde cero…
Pero aun así el pájaro nunca enmudece ni retrocede, sigue cantando y construyendo, construyendo y cantando…
¿Has sentido que tu vida, tu trabajo, tu familia, tus amigos no son los que soñaste?
¿Has querido decir basta, no vale la pena el esfuerzo, esto es demasiado para mí?
¿Estás cansado de comenzar de nuevo, del desgaste de la lucha diaria, de la confianza traicionada, de las metas no alcanzadas cuando estabas a punto de lograrlo?
Pues por más que te golpee la vida no te entregues nunca, di una oración, pon tu esperanza al frente y arremete.
No te preocupes si en la batalla sufres alguna herida, es de esperar que algo así suceda. Junta los pedazos de tu esperanza, ármala de nuevo y vuelve a arremeter.
No importa lo que pase… no desmayes, sigue adelante. La vida es un desafío constante pero vale la pena aceptarlo.
Y sobre todo… nunca dejes de cantar.
Y recuerda la promesa de Dios:
Isaías 41:10 “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.”

Alguien en quien confiar

Muchos hay que proclaman su propia bondad, pero un hombre de verdad, ¿quién lo hallará? (Proverbios 20:6 RVR95).
«No puedo confiar en nadie, sollozó mi amiga. Cada vez que lo hago, me lastiman». Un ex-novio había empezado a esparcir rumores sobre ella. Como le costaba confiar después de una infancia dolorosa, esta traición pareció confirmar que no se puede confiar en nadie.
No sabía cómo consolarla. Tenía razón… es difícil encontrar a alguien en quien confiar plenamente. Su historia me dolió y me recordó momentos de traición inesperados en mi propia vida. La Escritura habla con franqueza sobre la naturaleza humana. En Proverbios 20:6, el autor expresa el mismo lamento que mi amiga, dejando constancia para siempre del dolor de la traición.

Lo que sí pude decirle es que la crueldad de los demás es solo una parte de la historia. Aunque las heridas que nos infligen son reales y dolorosas, a través de Jesús, el amor auténtico es posible. En Juan 13:35, Jesús les dijo a sus discípulos que el mundo sabría que eran sus seguidores debido al amor de ellos. Algunos quizá nos lastimen, pero también habrá personas que nos muestren el amor del Señor, que nos apoyen de forma incondicional y nos cuiden. Al descansar en su amor infalible, podemos hallar sanidad, comunión y el valor para amar a otros como Él nos amó. 
Señor, gracias por la sanidad que podemos encontrar en la iglesia. Ayúdanos a compartir este amor con el mundo.
Jesús hizo posible el amor verdadero.

¿Contiene alegorías la Biblia?

Resultado de imagen de ¿Contiene alegoría la Biblia?Una alegoría es una historia en la que los personajes y/o eventos son símbolos que representan otros eventos, ideas o personas. La alegoría ha sido un recurso literario normalmente usado a lo largo de la historia de la literatura. Las alegorías se han utilizado para expresar ideas nada populares o controvertidas, de manera indirecta, con el propósito de criticar la política o para censurar a quienes están en el poder (por ejemplo: Rebelión en la granja de George Orwell y Los viajes de Gulliver de Jonathan Swift). Otras veces, la alegoría es utilizada para expresar ideas abstractas o verdades espirituales a través de una extensa metáfora, haciendo que la verdad sea mucho más fácil de comprender (por ejemplo, El progreso del peregrino de Juan Bunyan y Pies de ciervas en lugares altos por Hannah Hurnard).

La Biblia contiene muchas situaciones alegóricas que se usan para explicar verdades espirituales o para anunciar acontecimientos futuros. Los ejemplos más claros de alegoría en la Escritura, son las parábolas de Jesús. En estas historias, los personajes y los eventos representan una verdad acerca del reino de Dios o de la vida cristiana. Por ejemplo, en la parábola del sembrador en Mateo 13:3-9, las semillas y los diferentes tipos de terreno, ilustran la Palabra de Dios y las diversas respuestas a ella (como Jesús lo explica en los versículos 18-23).

En la historia del hijo pródigo también se hace uso de la alegoría. En esta historia (Lucas 15:11-32), el hijo legal representa a la persona común: pecaminosa y propensa al egoísmo. El padre rico representa a Dios; la difícil vida en la búsqueda de placer por parte del hijo, y más tarde su pobreza, representa el vacío de un estilo de vida sin Dios. Cuando el hijo regresa a su casa con verdadera tristeza, tenemos una ilustración del arrepentimiento. En la misericordia y voluntad del padre de recibir nuevamente a su hijo, vemos el gozo de Dios cuando nos apartamos del pecado y buscamos Su perdón.

En las parábolas, Jesús enseña conceptos espirituales complejos (cómo reacciona la gente al evangelio, la misericordia de Dios, etc.) en forma de metáforas creíbles. Obtenemos una comprensión más profunda de la verdad de Dios a través de estas historias. Otros ejemplos de la alegoría bíblica, como una forma literaria, incluyen la visión del dragón y la mujer en Apocalipsis 12:1-6; la historia de las águilas y la vid en Ezequiel 17, y muchos de los proverbios, especialmente aquellos escritos con un simbolismo similar.