sábado, 11 de febrero de 2017

¿Predestinados?

Este tema es muy controvertido en muchos ámbitos. Tanto cristianos, como ateos y agnósticos se cuestionan si estamos o no predestinados en este mundo; muchos dicen que sí lo estamos, otros que existe el libre albedrío que nos faculta con la capacidad de poder escoger qué hacer y qué no. Sin dar la razón a unos u otros, detengámonos un momento en una historia.
Una pareja de adolescentes de clase trabajadora mantienen una relación. Nadie sabe de la vida de sus padres y parece que no tuvieran hermanos. Para sobrevivir, el joven trabaja desempeñando un oficio menor y la joven no estudia ni trabaja. Las circunstancias los llevan a que la joven quede embarazada, y su pareja se asusta y decide dejarla. Después de pensarlo mejor decide quedarse con ella y hacerse cargo del hijo. Por circunstancias políticas deben partir del lugar en el que viven, dejando lo poco que tenían; en medio de este viaje la joven comienza a sufrir contracciones que anuncian que el bebé va a nacer. Sin ninguna posibilidad de dirigirse a un hospital o pagarle a una comadrona, el joven desesperado busca un lugar donde pueda descansar su mujer y dar a luz a su hijo. No encuentra ninguno apropiado, y después de mucho buscar, encuentran un granero maloliente. La joven no puede esperar más y en medio de condiciones paupérrimas de salubridad da a luz a su bebé, que no puede ser pesado ni medido, como tampoco registran su test de APGAR ni mucho menos lo limpian. En medio de la asquerosidad del entorno una vida vio la luz…y trajo la luz. Ese niño fue Jesús.
question woman
Jesús nació de padres adolescentes, su madre tuvo un embarazo sin estar casada, su padre era carpintero y casi la dejó cuando se enteró de la noticia. Nació en condiciones de insalubridad extremas, en medio del mal olor y defecaciones de animal. No tenía ninguna posibilidad de ser controlado por un pediatra o un médico de la época. Tampoco sus padres tenían un techo para proporcionarle en aquel entonces, ni mucho menos las comodidades necesarias para un recién nacido. Imagino a María dando a luz en esas condiciones y se me eriza la piel. Jesús no tenía ninguna posibilidad de ser lo importante que fue si vemos sus orígenes. No nació en una “cuna de oro” ni contó con el escenario perfecto para su llegada. Si un trabajador social fichara su caso, seguro que se lo hubiese quitado a sus padres y lo hubiese dejado en un hogar de protección, porque su índice de vulnerabilidad era muy alto, era muy arriesgado su caso.

Viaje Al Pasado, Al Presente Y Al Futuro

“Por tanto, guárdate y guarda tu alma con diligencia, para que no te olvides de las cosas que tus ojos han visto ni se aparten de tu corazón todos los días de tu vida; antes bien, las enseñarás a tus hijos y a los hijos de tus hijos” (Deuteronomio 4:9).
Resultado de imagen de Viaje Al Pasado, Al Presente Y Al FuturoDe la casa de mis difuntos padres rescatamos muchas cajas que contenían viejas cartas. Mi padre las guardaba cuidadosamente clasificadas y etiquetadas. Entre ellas, encontré también mis propias cartas a mis padres. Hace poco tiempo, empecé a leer de cabo a rabo las que les escribí desde África. Leerlas fue como emprender un viaje a mi pasado. Esas cartas eran recuerdos de situaciones, acontecimientos y emociones largamente olvidados.
Un día, durante esa época, me topé con Deuteronomio 4:9 en mi plan diario de lectura bíblica. Las palabras de ese texto me llamaron la atención como si nunca las hubiera leído antes.
El libro bíblico de Deuteronomio informa de lo que Moisés quería decir al pueblo de Israel al final de su vida. Repetía todos los hitos en la experiencia del pueblo, cuando Dios los había sacado de Egipto y conducido a través del desierto. El Señor los exhortaba a no perder de vista aquellas experiencias y a que no olvidaran hablar de ellas a sus hijos y nietos.
Conservo los recuerdos de mis vivencias familiares, especialmente las directamente relacionadas con la dirección divina. No quiero olvidar ninguna, de ahí que esas viejas cartas sean tan importantes para mí.
Actualmente, mis hijos están demasiado ocupados para interesarse por el pasado. Cada nuevo día, luchan con los desafíos a enfrentar en sus vidas cotidianas. No obstante, algún día entenderán cuánto podemos aprender del pasado.
Aprender del pasado es particularmente importante para los creyentes. Cuando vemos cómo ha obrado Dios en las vidas de otras personas, se acrecienta nuestra fe. Esa es la razón de que Moisés dijera, en esencia: “No olviden cómo los ha guiado Dios. Él sabe qué es lo mejor para ustedes. Sigan sus instrucciones y prosperarán. Cuéntenselo a sus hijos y nietos, para que nada se olvide”.
En la Biblia, Dios nos ha dado un precioso “archivo” de documentos, cartas, experiencias e historias. Por medio de ellas, podemos aprender valiosas lecciones extraídas de los viajes “virtuales” que emprendemos al pasado. Además, este Libro Sagrado es una guía fiel para nuestras vidas presentes. Y no solo eso, sino que además las profecías bíblicas nos adelantan lo que acontecerá en el futuro. La Palabra de Dios es nuestra caja del tesoro que contiene para nosotros cartas de amor, informativas y consoladoras. ¡Leámoslas!

¿Me provoca gozo?

Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad. Filipenses 4:8
El libro de una joven japonesa sobre orden y organización ha vendido dos millones de ejemplares en el mundo entero. La esencia del mensaje de Marie Kondo es ayudar a la gente a despojarse de cosas innecesarias en sus casas y armarios; cosas que los sofocan. Dice: «Levanta cada artículo y pregunta: “¿Me provoca gozo?”». Si la respuesta es «sí», consérvalo. Si es «no», descártalo.
El apóstol Pablo exhortó a los creyentes de Filipo a procurar tener gozo en su relación con Cristo: «Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos!» (Filipenses 4:4). En vez de vivir una vida desordenada por la ansiedad, los instaba a orar por todo y dejar que la paz de Dios guardara sus corazones y sus mentes en Cristo (versos 6-7).
Al considerar nuestras tareas y responsabilidades, vemos que no todo es motivo de gozo. Pero podemos preguntarnos: «¿Cómo provoca esto gozo en el corazón de Dios y en el mío?». Un cambio en el por qué hacemos las cosas puede transformar nuestra manera de verlas.
Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad. Filipenses 4:8
Las palabras de despedida de Pablo son alimento para la reflexión y una receta para el gozo.

Señor, ayúdame a gozarme en mis tareas de hoy.
Enfocarse en el Señor es el principio del gozo.

Aunque los demás digan que es imposible, siga adelante

“Vale más terminar un asunto que comenzarlo. Vale más ser paciente que valiente.” (Eclesiastés 7:8. Versión Popular “Dios habla hoy”).
Las mariposas emergen de sus crisálidas con las primeras luces de la mañana y, después de engalanar el mundo con la variedad multicolor de sus alas, llegan al atardecer de su existencia cuando apenas llevan pocas horas revoloteando.
Esa fue una de las tantas enseñanzas que aprendieron Patricia Restrepo y su hija Vanesa, cuando dieron vida a una de las pocas empresas que exporta este género de insectos desde Colombia. La idea les surgió una tarde tras visitar una exposición de mariposas disecadas en los Estados Unidos.
“¿Qué pasaría si exportamos ejemplares desde nuestro país?”, se preguntaron, para comenzar días después a gestar “Alas de Colombia”, que está enviando mensualmente cuatrocientos ejemplares disecados.
Comenzar no fue fácil. Por el contrario, les tocó enfrentarse a la oposición de amigos y conocidos que les aconsejaban no emprender un proyecto de esa proporción. “Fracasarán”, insistían. Pero el empeño, la fe y el optimismo, pudieron más que las voces pesimistas.
Hoy tienen un criadero en La Buitrera, un paradisíaco lugar en las montañas, desde las que se aprecia la hermosura del Valle del Cauca surcado por el río principal, semejante a una cinta de plata que se pierde en el infinito.
El mundo conoce ahora mariposas colombianas, de las 3.500 especies diurnas y 45.000 nocturnas que hay allí, que embellecen los estudios, las salas y las estancias de los coleccionistas.Siempre que emprendamos un proyecto encontraremos oposición, burlas y críticas. Pero la clave está en perseverar, en seguir adelante. Personas frustradas encontrará a montones. Abrieron las puertas al desánimo, permitieron que la incertidumbre nublara sus sueños, metas y esperanzas. Pero usted no puede ni debe actuar así…
En la Biblia podemos leer una recomendación de un antiguo exponente de la sabiduría. “Vale más terminar un asunto que comenzarlo. Vale más ser paciente que valiente.” (Eclesiastés 7:8. Versión Popular “Dios habla hoy”).
¿Comprende su significado? Es fundamental que cuando comencemos un proyecto, lo terminemos. Debemos dejar de lado la costumbre de quedarnos a mitad del camino. Podemos lograr, con la ayuda de Dios, todo aquello que nos propongamos. Concebir el término “Imposible” nos conducirá al fracaso. Llenarnos de fe en el poder del Creador que, en su voluntad obra a nuestro favor, nos llevará a expresar:”¡Es posible!”. Comience hoy, no se deje vencer…
Si no ha recibido a Jesús como Señor y Salvador, hoy es el día para que lo haga. No se arrepentirá. Si Cristo mora en su corazón, emprenderá el maravilloso proceso de crecimiento personal y espiritual que tanto anhela.
En adelante y con la ayuda de Dios, perseveraré hasta terminar los proyectos.