Jesucristo nunca aseveró ser revolucionario o reformador social. Él aseveró ser Dios e Hijo de Dios.
Su historicidad:
Algunos críticos y ateos podrían divertirse con la fantasía de un Cristo - mito; pero estos no lo pueden hacer sobre la base de la evidencia histórica.
Jesús de Nazaret fue un personaje tan histórico como cualquier otro personaje de la historia de la humanidad.
Historiadores reconocidos de la época como Flavio Josefo, Suetonio, Plinio Segundo, Carta de Mara, Bar Serapio o Justino Mártir hacen referencia a la persona de Cristo, y no se trata solamente de que La Biblia sea la única fuente para respaldar la historicidad de Jesucristo. De ahí, que todo historiador serio reconoce que fue un personaje que existió y no un mito.
Un conocido ateo y materialista de estos tiempos es Fidel Castro Ruz. Sin embargo, hay un libro titulado: "Fidel y la Religión" publicado por la oficina del Consejo de Estado, La Habana 1985, en donde se relata una entrevista que Fidel concede a un fraile brasileño llamado Frei Betto.
En la lectura de sus páginas, podemos notar que Fidel Castro a pesar de su ateísmo y rebeldía contra Dios por tantos años, nunca llega a negar la existencia histórica de Jesucristo, falsa afirmación que se atrevieron a decir otros.
Falso concepto y enseñanza que penetró en el seno de algunos profesores y maestros de las escuelas cubanas, que hace que hasta los días de hoy existan cubanos por el mundo que no creen en Dios y tampoco en un Cristo histórico.
Las aseveraciones de Jesucristo:
Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy. (Juan 8:58)
De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida. (Juan 5:24)
Jesus aceptó adoración como Dios.
Y he aquí vino un leproso y se postró ante él, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme" (Mateo 8:1,2)
"Entonces los que estaban en la barca vinieron y le adoraron, diciendo: Verdaderamente eres Hijo de Dios" (Mateo 14:33)
"Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío!" (Juan 20:28)
Jesús no solo vino a cumplir la ley. La interpretación que Él hace de ésta, es excelente, sublime y celestial. Ningún ser humano podrá nunca ofrecer el nivel ético y moral que Cristo Jesús dejó como legado a la humanidad.
Antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra; y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa; y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos. Mateo 5:39-41
Oísteis que fue dicho amarás a tu prójimo y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir el sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos. Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? (Mateo 5:42 al 46)
Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón. (Mateo 5:28)
Jesús es El camino a Dios y La Salvación Eterna.
Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. (Juan 14:6)
La paz os dejo mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón ni tenga miedo. (Juan 14:27)
Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido. (Juan 15:11)
Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto.
Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado. Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. (Juan 15:1-5)