sábado, 23 de julio de 2016

¿Qué es el ateísmo?

El ateísmo es la ponencia de que Dios no existe. No es algo nuevo, de hecho, el Salmo 14:1 escrito por David alrededor del 1000 a.c. menciona el ateísmo – “Dice el necio en su corazón: no hay Dios”. Recientes estadísticas muestran un creciente número de gente convirtiéndose al ateísmo, condición con más del 10% de gente alrededor del mundo declarándose a sí mismos partidarios de la convicción. Así que, ¿por qué más y más gente se vuelve atea? ¿Es el ateísmo realmente la postura lógica que claman ser los ateístas?
¿Por qué existe aún el ateísmo? ¿Por qué Dios no se revela a Sí Mismo a la gente, probando así que Él existe? Seguramente, si Dios apareciera todos creerían en Él. El problema de esta idea es que no es el deseo de Dios solo convencer a la gente de que Él existe. El deseo de Dios para la gente es que crean en Él por fe (2 Pedro 3:9) y acepten Su regalo de salvación (Juan 3:16). Sí, Dios puede aparecerse y demostrar de una vez por todas que existe. El caso es que Dios ha demostrado claramente su existencia muchas veces en el Antiguo Testamento (Génesis capítulos 6-9; Éxodo 14:21-22; 1 Reyes 18:19-31) ¿Creyó la gente que Dios existe? ¡Sí! ¿Se volvieron de sus malos caminos para obedecer a Dios? ¡Sí! y...¡NO! Si una persona no está dispuesta a aceptar la existencia de Dios por fe, definitivamente no estará dispuesta a aceptar a Jesucristo por fe como su Salvador (Efesios 2:8-9). Este es el deseo de Dios – que las personas se conviertan en cristianos, no solo teístas (quienes creen que Dios existe).

Una mano abierta

… Más bienaventurado es dar que recibir. Hechos 20:35
Inline image 1En 1891 Biddy Mason fue enterrada en una tumba anónima. Aunque era lo habitual para una mujer nacida en la esclavitud, en su caso tendría que haber sido diferente. Tras conseguir su libertad en una batalla judicial en 1856, combinó su talento como enfermera con sabias decisiones empresariales, y reunió una pequeña fortuna. Después, ante la intrincada situación que vivían inmigrantes y prisioneros, comenzó a ayudarlos tanto que hacían fila frente a su casa para recibir ayuda. En 1872, junto con su yerno, comenzó la construcción de una iglesia para afroamericanos en Los Ángeles, Estados Unidos.

Atravesando el valle

“Bienaventurado el hombre que tiene en ti sus fuerzas, en cuyo corazón están tus caminos. Atravesando el valle de lágrimas lo cambian en fuente cuando la lluvia llena los estanques. Irán de poder en poder; verán a Dios en Sion. Jehová Dios de los ejércitos, oye mi oración; Escucha, oh Dios de Jacob”.
Salmos 84:5-8
Tenga el nombre que tenga, llámese como se llame, independientemente de la posición que posea aunque parezca muy alta. Si te dijeron algo contrario a lo que sabes que Dios ha decretado para tu vida, no hagas caso. Si intentaron destruir tus sueños o sacarte de la carrera, respira y recuerda que ninguno de ellos ha hecho el sacrificio máximo por ti. Síguele creyendo a Aquél que cuando extendió sus brazos y murió en la cruz del Calvario, también mencionaba tu nombre, y entre lágrimas y dolor decía: TE AMO, lo estoy haciendo por ti.
Aunque momentáneamente todo parezca que está yendo en tu contra, Dios te socorrerá y te sacará aún del pozo de la desesperación más profundo. Si algunos dicen ser seres de luz y de mucha ciencia, y no tienen misericordia, ni amor, ignóralos. Porque la Biblia dice que por sus frutos es conocido el árbol. Si te apedrean los que menos esperabas, recuerda que no te lo están haciendo a ti, se lo están haciendo a uno de los pequeñitos de Dios y tendrán que rendirle cuentas si no se arrepienten. Si sientes que estás ahora mismo tirado en el suelo y que te faltan las fuerzas para continuar, esto es parte del proceso. Pero recuerda que Dios es tu Pastor, y prometió caminar contigo y atravesar el valle de la sombra y de la muerte para que venzas.

Lo necesario para evangelizar eficazmente

La caída del hombre de su relación con Dios se produjo en el huerto del Edén con el pecado de Adán y Eva, y prosiguió con Caín, quien cometió el primer asesinato. De ahí en adelante, el hombre fue dominado por su naturaleza pecaminosa, carnal y alejada del Creador, por lo que la carnalidad, los deseos y todo tipo de apetitos rigen la vida de la humanidad hasta el día de hoy.
La serpiente antigua, Satanás, no puede obligar a pecar, pero, ¿cómo lo hizo con los primeros habitantes del mundo?; los tentaba y convencía, lo mismo que ocurre con la mayoría. La raza humana está irremediablemente perdida y maldecida: La paga del pecado es la muerte” Romanos 6:23.
El diablo maneja a la humanidad a su antojo, porque las personas, al infringir la ley de Dios, le dan permiso para actuar en sus vidas. La tragedia del pecado ha infectado hasta el último rincón de la tierra, y cada día son enviadas miles de personas al infierno.
Pero el regalo de la salvación por gracia mediante el sacrificio de Jesús, es aceptado por una pequeña parte de la gente. En 2° de Corintios 4:4, Pablo explica que el dios de este mundo cegó el entendimiento de los incrédulos para que no les resplandezca la luz del evangelio. 
Además de no entender el mensaje de salvación que predicamos, ellos son atados como consecuencia de sus propios pecados. Por ejemplo, si alguien ha robado, aunque sea algo pequeño. Quizás aprovechando un descuido, y después seguramente ha sentido remordimientos, temor y la convicción de no volverlo a hacer; sin embargo, el enemigo aprovecha esa pequeña puerta que se ha abierto y comienza a trabajar en esa debilidad. Mediante la influencia de un espíritu maligno, esa persona volverá a robar, cada vez le será más fácil y finalmente ya no se sentirá culpable.
Esto sucede en muchas áreas de la vida, pero especialmente en los pecados sexuales, que generalmente hacen que las familias se destruyan.
Al verlo de esta manera, el panorama no se ve muy alentador. Ciudades enteras están atrapadas en pecados colectivos o similares. Claro es el ejemplo de la idolatría, donde comunidades enteras se postran ante imágenes; las procesiones con ídolos recorriendo calles, arrastran maldición por donde quiera que vayan; y abuelos, padres e hijos son víctimas de la maldición que aparece en Éxodo 20… Hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen, dice el Señor.
Ante estas evidencias, es muy necesario que el pueblo de Dios reaccione y aprenda a hacer frente a las asechanzas del diablo. No es suficiente asistir a la iglesia los domingos y hacer oración antes de acostarse, se requiere mucho más para deshacer las obras del diablo, como oración y ayuno,“Orad sin cesar”; identificación de los pecados que sobresalen en la comunidad e identificar el tipo de espíritus malignos que operan; también la intercesión por las personas atrapadas en esos pecados, mediante un grupo de oración perfectamente organizado. Todo esto, como trabajo previo a la predicación del evangelio de la salvación.