lunes, 18 de julio de 2016

Un Gramo de Ejemplo

Un padre llevó a sus hijos a un parque de diversiones. Al llegar a la ventanilla de las entradas, preguntó:
-¿Cuánto es?
– Son cinco dólares por usted y los niños mayores de doce años. Los niños de once años y menores son tres dólares.
– Pues bien, el futuro abogado tiene siete y el futuro médico doce, dijo entonces el padre. Así que supongo que le debo trece dólares.
Mientras la joven le daba la vuelta del billete de veinte dólares, miró al muchacho de doce años, luego al padre y dijo:
– Usted podría haberme dicho que él tenía once años y yo jamás me hubiera dado cuenta. Se podría haber ahorrado unos dólares.
-Es posible -contestó el padre-, pero mis hijos sí se hubieran dado cuenta.
Ralph Waldo Emerson dijo en cierta ocasión: Lo que eres habla tan fuerte que no puedo escuchar lo que dices.
Esto es cierto, sobre todo mientras los hijos observan y aprenden de sus padres. Los niños son los mejores imitadores del mundo, copian y repiten todo lo que ven a su alrededor y lo que más ven es la conducta de sus padres.
En la práctica del arte de la paternidad, un gramo de ejemplo vale más que mil kilos de sermones.
Efesios 5:1 Por tanto, imiten a Dios como hijos muy amados.

La alfombra roja

1a CORINTIOS 1:26-29 “Hermanos, consideren su propio llamamiento: No muchos de ustedes son sabios, según criterios meramente humanos; ni son muchos los poderosos ni muchos los de noble cuna. Pero DIOS escogió lo insensato del mundo para avergonzar a los sabios, y escogió lo débil del mundo para avergonzar a los poderosos. También escogió DIOS lo más bajo y despreciado, y lo que no es nada, para anular lo que es, a fin de que en su presencia nadie pueda jactarse.”
alfombra-roja
“La fama es prácticamente imposible comprenderla debidamente. Es casi imposible ir de un lado a otro caminando sobre una alfombra roja, donde hay gente que te pide autógrafos a cada paso, y poder entender las razones”. La actriz Renée Zellweger pronunció esas palabras muy poco tiempo después de ser premiada con el globo de oro por su interpretación en “Persiguiendo a Betty”. Cuando comenzó en el mundo del cine, todos le dijeron que tenía que cambiar su apellido por razones de marketing, ya que con el que tenía “no iba a llegar a ningún lado”. Ella no quiso, porque quería ser ella misma y demostró que eso era lo que tenía que hacer.
Fama, poder, apariencia… Dice un proverbio danés que la adulación es como nuestra sombra, que no nos hace ni más grandes ni más pequeños, simplemente refleja lo que somos. Aún así, muchos viven buscando esa fama, ese poder, y la ostentación de una apariencia que les haga sobresalir por encima de los demás. La gente se fija en las apariencias, y Dios se fija en el corazón… DIOS escoge a los débiles, a los despreciados, a los que aparentemente no tienen valor.
DIOS ama al ser humano, pero fundamentalmente es el DIOS de los débiles, DIOS ama a aquellos que casi todos desprecian. El mundo es de los vencedores, pero DIOS ama a aquellos que no han tenido ninguna oportunidad, a los olvidados y marginados. Muchos viven queriendo ser números uno permanentemente, y ese es el único sentimiento que da significado a su existencia. Quizá no pretenden ser el número uno en las listas de éxitos, pero sí en su trabajo, en su posición social, en su carrera… Grave error.

¿Algo que deba saber?

… subió al monte a orar aparte…Mateo 14;23.
Una vez le preguntaron al cantautor David Wilcox cómo componía sus canciones, y respondió que el proceso incluía tres aspectos: una habitación tranquila, una hoja en blanco y la pregunta: ¿Hay algo que deba saber? 
Inline image 1Esto me impactó, al considerarlo un abordaje maravilloso para los seguidores de Jesús, cuando buscan cada día el plan de Dios para sus vidas.
Durante su ministerio público, Jesús dedicaba tiempo para orar a solas. Después de alimentar a 5.000 personas, envió a sus discípulos al otro lado del mar de Galilea, mientras Él despedía a la gente, y "despedida la multitud, subió al monte a orar aparte; y cuando llegó la noche, estaba allí solo" (Mateo 14:23).
Si el Señor Jesús veía la necesidad de estar a solas con el Padre, cuánto más necesitamos nosotros un tiempo diario a solas para abrir nuestro corazón al Señor, reflexionar en su Palabra y prepararnos para cumplir sus instrucciones.

Cuando no hay esperanza

En base a Mateo 14
Nosotros no vivimos esta vida para estar desesperanzados, desanimados o desesperados, pero muchas veces nos sentimos así. En lo profundo de nuestra alma sentimos que la vida nos está haciendo una mala jugada. Nuestro camino está lleno de oscuridad y desaliento, y nuestra fe se ve nublada muchas veces por la duda, y no podemos hacer nada para evitarlo.
Los seguidores de Jesucristo estaban pasando por momentos difíciles.
Era ya muy tarde, era de noche, y además estaban en el desierto, no tenían ni la más mínima esperanza de encontrar alimento en ese lugar. Verso 15 “Cuando anochecía, se acercaron a él sus discípulos, diciendo: El lugar es desierto, y la hora ya pasada; despide a la multitud, para que vayan por las aldeas y compren de comer.”
Los discípulos estaban preocupados, pero Jesucristo les responde de la manera más sencilla pero maravillosa, mientras estén conmigo no tienen que ir a buscar. Verso 16 “Jesús les dijo: No tienen necesidad de irse; dadles vosotros de comer.” Los discípulos quedaron sorprendidos y no salían de su asombro cuando les delegó a ellos el darles de comer. Juan 6:5 “Cuando alzó Jesús los ojos, y vio que había venido a él gran multitud, dijo a Felipe: ¿De dónde compraremos pan para que coman éstos?
Lo que ellos no sabían es que Jesús los estaba probando. Juan 6:6 “Pero esto decía para probarlo; porque él sabía lo que había de hacer.” Dios sabe perfectamente qué hacer, Él solo quiere probar nuestra fe. No te preocupes, solo confía en Él.
Lo que miran nuestros ojos físicos es lo que muchas veces impide ver un milagro. Mateo 14: 17 “Y ellos dijeron: No tenemos aquí sino cinco panes y dos peces. ¿Qué ves en esa dificultad que estas pasando?, ¿solo problemas u oportunidades para resurgir?
Lo que motivó a Jesús a ayudarlos fue la compasión que sintió por ellos. Verso 14 “Y saliendo Jesús, vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, y sanó a los que de ellos estaban enfermos.”