miércoles, 8 de junio de 2016

Alégrate por el día de Hoy

En su libro titulado The Tapestry (El Tapiz), Edith Schaffer describe un verano en el que su esposo Francis pasó tres meses en Europa. Durante ese tiempo, en el que lo extrañó mucho, Edith y su hermana Janet llevaron a sus hijos a vivir a una antigua escuela, la Cape Cod. Puesto que tenían muy poco dinero, compartían el alquiler, no tenían coche, pero creaban aventuras a diario para los cinco niños.
Años después, mirando atrás, Edith dijo de ese verano: "nunca más he vuelto a pasar un tiempo así con mis hijos, ni con mi hermana ni con mis sobrinos".
Los repentinos y queridos momentos de la vida hay que reconocerlos por la singularidad que tienen. No se pueden desperdiciar deseando otra cosa.
La perspectiva de Edith nos ofrece una clave para aplicar las palabras del Salmo 118:24: Este es el día que el Señor ha hecho; recocijémonos y alegrémonos en él.
Ante los momentos difíciles nos vemos tentados a volvernos pasivos mientras esperamos que pasen. Pero Dios nos invita a buscar activamente las oportunidades que tenemos a mano, en lugar de lamentarnos por lo que no tenemos.
Puesto que el Señor ha hecho este día, podemos ver más allá de las puertas que nos son cerradas, y ver la gente y las oportunidades que antes pasamos por alto. Al celebrar sus valores descubriremos el gozo y la alegría que vienen de Dios.  

¿Qué significado tiene la vida?

¿Cuál es el significado de la vida? ¿Cómo puedo encontrar el propósito, realización y satisfacción en la vida? ¿Tendré el potencial suficiente para lograr algo verdaderamente relevante y duradero? Hay mucha gente que nunca se ha detenido a considerar cuál es el significado de la vida, y años más tarde, miran hacia atrás y se preguntan por qué sus relaciones se han desmoronado y por qué se sienten tan vacíos, habiendo podido conseguir lo que emprendieron. 
A un jugador de fútbol, que figuraba en el paseo de la fama del fútbol, se le preguntó qué le hubiera gustado que le dijeran al principio, cuando empezó a jugar al fútbol. Él respondió, “Hubiese deseado que alguien me hubiera dicho que cuando alcanzara la cima, no encontraría nada allí”. Muchas metas revelan su vacío solamente después de que se han desperdiciado años en su búsqueda.

En nuestra humanizada sociedad, la gente persigue muchos propósitos pensando que en ellos van a encontrar significado. Algunas de estas búsquedas pueden ser: éxito en los negocios, riquezas, buenas relaciones, sexo, entretenimiento, hacer el bien a otros, etc. Pero la gente ha testificado que mientras alcanzan sus metas de riquezas, relaciones o placer, todavía sienten un profundo vacío interior, un sentimiento de un vacío que nada lo parece llenar.

Salomón, autor del libro bíblico de Eclesiastés, expone este sentimiento cuando dice, “¡Vanidad de vanidades! ¡Vanidad de vanidades! ¡Todo es vanidad!”. Este autor tenía riquezas más allá de una posible medición, sabiduría más que cualquier hombre de su tiempo o del nuestro, mujeres a cientos, palacios y jardines que eran la envidia de los reinos, la mejor comida y el mejor vino, y poseía cualquier forma de entretenimiento disponible. Hasta cierto punto, dijo que cualquier cosa que deseaba su corazón, él la buscaba. Pero resumía diciendo, “la vida debajo del sol ¡es vanidad!” (La vida es vivida como si estuviera fuera de todo lo que podemos ver con nuestros ojos y experimentar con nuestros sentidos). ¿Por qué hay tal vacío? Porque Dios nos creó para algo más allá de lo que podemos experimentar en el aquí y ahora. Salomón dijo de Dios, “Él también ha puesto la eternidad en los corazones de los hombres…”. Eclesiastés 3;11 So
mos conscientes de que, en nuestros corazones, este “aquí-y-ahora” no es todo lo que hay.

Buscando Amor En Los Lugares Equivocados

Cuando era niño pasaba mucho tiempo con un juguete que tenía piezas de diferentes formas (cuadradas, triangulares, rectangulares, etc.). La idea del juego consistía en encajar las piezas correctas en los agujeros correctos. A veces forzaba y hasta golpeaba a las piezas para que encajaran en el agujero que no era el correcto.
Resultado de imagen de Buscando Amor En Todos Los Lugares EquivocadosEste juego ilustra perfectamente lo que muchas personas hacen con su vida, y no importa lo paciente que se sea, o la destreza y habilidad estratégica que se tenga. Tampoco importa lo fuerte que se trate de forzar las piezas. Las piezas y los agujeros tienen que encajar suavemente. Cuando no coinciden, tratar de golpearlas para que encajen solo lo deja a uno frustrado.
Lo mismo sucede con nuestras vidas. Todos tenemos un vacío, un hueco en nuestro corazón que tiene cierta forma (como las piezas del juguete), de manera que solamente puede ser llenado con un encaje perfecto. Anhelamos ser amados y estar satisfechos, pero ese amor y satisfacción deseados deben surgir de cierta fuente para que tengan ese encaje perfecto.
Nuestro problema es que muchos buscamos amor y satisfacción para llenar ese vacío en los lugares equivocados. Muchos tratan de llenar ese vacío en su corazón con cosas que no encajan. Y finalmente, eso los lleva a una crisis de identidad.

El verdadero cimiento en los Hijos de Dios

Mateo 7:24-27 “…Por tanto, todo el que me oye estas palabras y las pone en práctica es como un hombre prudente que construyó su casa sobre la roca. Cayeron las lluvias, crecieron los ríos, y soplaron los vientos y azotaron aquella casa; con todo, la casa no se derrumbó porque estaba cimentada sobre la roca. Pero todo el que me oye estas palabras y no las pone en práctica es como un hombre insensato que construyó su casa sobre la arena. Cayeron las lluvias, crecieron los ríos, y soplaron los vientos y azotaron aquella casa, y ésta se derrumbó, y grande fue su ruina…”
Distingamos dos tipos de cimiento:
El cimiento según los hombres y el cimiento según Dios (Lo que el mundo da y lo que Él que nos enseña, La palabra del Señor, la Roca, Cristo Jesús)
SIGNIFICADO DE LA PALABRA CIMIENTO: Comienzo, principio, fundamento, base, punto de partida, cumbre, autoridad, mando, poder, dominación, soberanía.
Los dos cimientos: Mateo 7:24Lucas 6.46
  • 1. Requiere Obediencia, para vencer, para ver la gloria de Dios
  • 2. Requiere practica (Hechos y no palabras…)
  • 3. En medio de los procesos, situaciones, pruebas…
Primero: Descendió lluvia.
Segundo: Vinieron los ríos.
Tercero: Soplaron los vientos.
Cuarto: Golpearon contra aquella casa.
Puede detenerse o llegar hasta el final, dependerá del cimiento que hayas puesto…
Cuarto: El resultado- PERO no cayó (estaba cimentada sobre La Roca…) CRISTO ES MI ROCA, MI CIMIENTO
Los dos cimientos: Lucas 6:46-49
“…¿Por qué me llamáis “Señor, Señor”, y no hacéis lo que yo digo? Todo aquel que viene a mí y oye mis palabras y las obedece, os indicaré a quién es semejante. Semejante es al hombre que, al edificar una casa, cavó y ahondó y puso el fundamento sobre la roca; y cuando vino una inundación, el río dio con ímpetu contra aquella casa, pero no la pudo mover porque estaba fundada sobre la roca. Pero el que las oyó y no las obedeció, semejante es al hombre que edificó su casa sobre tierra, sin fundamento; contra la cual el río dio con ímpetu, y luego cayó y fue grande la ruina de aquella casa…”
En medio de lo que David estaba pasando en una ocasión, surge ese Cántico de liberación, en el que entendemos, porque fue un corazón conforme al de Dios, un varón creído, confiado, sustentado en su Dios, ¡Nuestro Dios Todopoderoso! ¡Su Roca, Cristo!
2 Samuel 22:2 “…Dijo: Jehová es mi roca, mi fortaleza y mi libertador…”
2 Samuel 22:14-19 “…Tronó Jehová desde los cielos, el Altísimo hizo oír su voz; Envió sus flechas y los dispersó, lanzó relámpagos y los destruyó. Aparecieron entonces los torrentes de las aguas, quedaron al descubierto los cimientos del mundo ante la reprensión de Jehová, al soplo del aliento de su nariz. Envió desde lo alto y me tomó. Me sacó de caudalosas aguas. (Las muchas aguas) Me libró de un poderoso enemigo, y de los que me aborrecían, aunque eran más fuertes que yo. Me asaltaron el día de mi desgracia, mas Jehová fue mi apoyo…”