lunes, 8 de septiembre de 2014

Cuando menos lo esperes…

Si sueles comprar por internet, en alguna ocasión te puede haber ocurrido comprar algo que tardó tanto en llegar, que cuando finalmente estaba en tus manos casi habías olvidado el aspecto que debía tener, y lo que es peor, por qué estabas interesado en él. A las mujeres nos pasa con la ropa o los zapatos; a veces, por ejemplo, olvidamos lo que tenemos en nuestro armario y cuando encontramos algo que habíamos olvidado, nos produce una gran alegría.
Delivering a ParcelActualmente espero que me llegue un libro de un buen amigo, y es muy posible que cuando menos lo espere ese libro llegue a mis manos. Parece que así funciona la lógica, que cuando no esperamos algo o a alguien, llega a nuestra vida y nos sorprende.
Sobre esto último he tenido varias experiencias en este año. Ha habido cosas que yo he deseado profundamente a lo largo de mi vida, algunas han ocurrido rápidamente y otras han demorado meses y años, incluso yo mismo las había olvidado. No es que hayan dejado de importarme o de quererlas, es que con el paso del tiempo se fueron sumando otras y así, las peticiones de mi corazón se fueron renovando.

El Lugar Que Ocupa Dios En Mí

Estudiando el 1er libro de Crónicas, encontramos que David, con la ayuda de Dios, venció a los jebuseos en Jerusalén y tomó su fortaleza, construyendo casa para sí y también dispuso un lugar para el Arca de Dios.
Luego, llamando a los sacerdotes jefes de las familias patriarcales de los levitas, les mandó purificarse ellos y su parentela tal como lo estableció Dios, para poder llevar el Arca al lugar preparado por David, recordando lo sucedido la primera vez que intentaron trasladar el Arca sin consultar a Dios y sin tomar en cuenta sus instrucciones.
En este relato podemos ver tres cosas importantes que podemos aprender de David:
-Su Prioridad era Dios: no solo construyó casa para Él, sino que apartó un lugar para que la presencia de Dios estuviera donde él estaba.
-Se apoyó en la gente que tenia cosas en común con él: cuando iba a trasladar el Arca de Dios, no lo hizo como cuando lo intentó la primera vez. En esta oportunidad fue cuidadoso en reunir a los levitas, sabiendo que ellos se purificarían porque sabían lo que realmente representaba el Arca, no a un Dios pequeño como pudo pensar Uza, sino al Dios todopoderoso, y que compartían con él el sueño de volver a tener el Arca en medio de ellos.
-Y aprendió de sus errores: el primer error cometido no hizo que David desistiera de trasladar el Arca de Dios, al contrario, lo hizo ser mas cuidadoso, detallista y aprendió sobre todo, a tomar decisiones bajo las instrucciones de Dios.

¿A dónde va mi Vida?

 “Cuando la vida es buena interiormente, la vida se pone buena exteriormente”.
Muchas personas viven culpando a otros o al sistema de las cosas que les pasan, y otras se lamentan por las decisiones que tomaron y piensan que la vida no ha sido bondadosa con ellos. Es triste que muchas personas estén llevando una vida equivocada, que estén luchando por alcanzar sus sueños y metas, y no lo consiguen. Y se preguntan ¿a dónde va mi vida?
“Si usted no sabe a donde va, podría terminar en cualquier lugar.” 
¿Cómo quieres terminar tu vida? ¿Quieres ser recordado como alguien que vivió la vida o alguien que solo consumió el oxigeno del planeta, que no sabe para qué vive?
El pensamiento de arriba dice que si tu vida interior es buena, tu vida externa lo mostrará. Y cuando hablamos de la vida interior no solamente nos referimos a lo espiritual, también incluye la mente y las emociones. Mi mente y mis emociones influyen en mi comportamiento externo.
Anímate a realizar el siguiente ejercicio: Piensa en algo bueno que te haya ocurrido recientemente, y hazte las siguientes preguntas: ¿Cómo fueron luego mis pensamientos? ¿Qué emociones se dispararon? ¿Cómo reaccioné?
Ahora piensa en algo malo, algo que a ti no te gustó y hazte las mismas preguntas. Seguro que no te gustó tu actuación. Tu estado de ánimo cambia de acuerdo a la situación o circunstancia que estés viviendo.

Amado Señor, gracias por ser nuestro pastor

Inline image 1

Así como las ovejas necesitan ser pastoreadas, 
asimismo nosotros necesitamos ser guiados por nuestro Dios,
protegiéndonos contra los peligros, y dándonos fuerzas para
resistir las tentaciones. 

Sin un pastor, las ovejas están en peligro.
Sin el buen Pastor, nosotros también estamos en peligro.

Amado Señor, gracias por ser nuestro pastor,
guiándonos a través de esta vida con amor. Amén.

Porque Él es nuestro Dios; nosotros  el pueblo
de su prado y ovejas de su mano.
Salmo 95:7
Salmo 23 

El Señor es mi pastor

Salmo de David .

El Señor es mi pastor, nada me falta. 

En verdes praderas me hace descansar, 
Junto a aguas tranquilas me lleva. 
El Señor me reconforta, 
me conduce por caminos rectos 
haciendo honor a su nombre. 
Aunque camine por valles sombríos 
no temeré mal alguno, 
porque Tú estás conmigo,
tu vara y tu cayado me sosiegan. 
Ante mí preparas una mesa 
delante de mis enemigos, 
unges mi cabeza con aceite 
y mi copa rebosa. 
El bien y la bondad estarán conmigo 
todos los días de mi vida, 
y habitaré en la casa del Señor 
durante días sin fin.

¿Por qué la Sanidad Emocional es importante?

Externamente, parece que muchas personas tienen su vida en perfectas condiciones, pero la realidad es que emocionalmente tienen áreas que necesitan ser sanadas. Dios quiere que tengamos una vida diferente, que podamos vivirla en plenitud, confiados, ocupando nuestro lugar como hijos y herederos.
Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así prospera tu alma. 3 Juan 1:2
Pero sucede que algunas personas después de haber aceptado a Jesús en su corazón, siguen sintiéndose desdichados, sin valor, con baja autoestima, con ira descontrolada o relacionándose de una manera que no es sana.
Esto se debe a que no hemos sanado de raíz, porque si la raíz no está sanada sigue dando frutos, en este caso malos, como son: falta de confianza, baja autoestima, critica, hostilidad, resentimiento, control, auto-compasión, y la lista podría continuar.

¿Cuál es el origen de estas conductas? ¿Por qué sigo sintiéndome de esta forma?      

Si hacemos una revisión de nuestra vida, llegaremos a una verdad que muchos han tratado de evadir posiblemente por protección, porque fue en nuestra niñez cuando personas de nuestra confianza o incluso personas que amábamos nos hicieron daño con palabras hirientes, que ahora nos hacen sentir incapacitados para creer que Dios nos ama; o tal vez con otro tipo de abuso físico, emocional o sexual que nos han dejado paralizados, creyendo que las bendiciones son para los demás y no para nosotros, lo cual es una total mentira que se ha sembrado en nosotros y que ahora, podemos romper en el Precioso Nombre de Jesús y vivir una vida diferente.