sábado, 18 de enero de 2014

“Tratando” con la rebeldía

Juliana tenía un íntimo y ferviente anhelo: llegar a ser una actriz famosa. Por lo cual y para lograrlo, se presentaba a todos los castings que conocía para probar suerte. Su madre, sabiendo el sueño de su hija, temía que ella tomara interés por algún casting de los que se publicitaban por internet. Estos prometían éxito y un mundo cumplido de ilusiones, pero lamentablemente muchas jovencitas terminaban desaparecidas. Sugerentes eran las recomendaciones que les daban a las aspirantes para presentarse a estos castings, pero debían asistir solas si no querían quedar automáticamente descalificadas.
Mature mother and teen daughter after quarrel at home. Focus on girl
Un día, Juliana comentó con su madre que asistiría a uno de estos castings. Desbordaba alegría y no paraba de imaginar los comienzos de una carrera que le llevaría a la tan anhelada fama. Pero, para su sorpresa, la respuesta de su madre fue que le prohibía ir a ese lugar, porque conllevaba mucho peligro para ella.
La jovencita, después de llorar y enfadarse mucho con su madre, decidió ir al casting, desobedeciendo el consejo recibido. Quizás el famoso “instinto de madre” fue vital en esta oportunidad ya que, sabiendo que Juliana iría de todas maneras, la siguió y llegó a tiempo para impedir que entrara.
A los pocos días las noticias contaban el hallazgo que había logrado la policía local, al desbaratar una poderosa red de trata de blancas. La joven, al ver cómo las autoridades inspeccionaban la oficina a la que ella había querido presentarse, abrazó a su madre pidiéndole disculpas por su rebelde e imprudente actitud.

Dulces Sueños - Reflexiones

Toma dos aspirinas y llámame por la mañana.  ¿En realidad, qué quiere decir el médico al darte tales instrucciones?  En cierta forma te está diciendo: Procura descansar esta noche y ya verás como te sientes mejor mañana por la mañana. ¡Sorprende lo bien que funciona este consejo! Lo cierto es que a menudo, sí, nos sentimos mejor al amanecer.
La investigación científica apoya esta teoría.  En cierto estudio, las ratas de un laboratorio murieron de infecciones en la sangre, después de habérseles privado del sueño por largos períodos de tiempo; posiblemente, porque falló su sistema inmunológico.
¿Has pasado algunas noches en el hospital, específicamente en la sala de Cuidados Intensivos?  Una de las quejas más comunes de los pacientes bien podría ser:  ¿Cómo voy a mejorar, si me siguen despertando a cada rato?  Buena pregunta.
Las frecuentes interrupciones, el ruido y las luces se consideran factores que contribuyen a un nivel de recuperación más lento. De hecho, algunos pacientes terminan sufriendo del síndrome de SCI (Sala de Cuidado Intensivo): alucinaciones, estado de desorientación y depresión, que se manifiestan después de tres días en dicha sala. ¿Y cuál es la causa?  En gran medida se debe a la carencia de un buen dormir.

Mensaje de Dios Padre y de Dios hijo, Jesucristo, para ti

Habiéndome levantado de la cama aquella mañana, miré mi agenda y ¡vaya!, quedé en verme con Fulano, mi amigo, un poco más tarde. No nos vemos muy frecuentemente pero cuando lo hacemos, más o menos cada mes…
Acudo a la cita, y mientras tomamos café para pasar el rato, hablamos de nuestras cosas. Ya sabes: nuestras alegrías, nuestro trabajo, la esposa, los hijos, nuestros quehaceres, y también de nuestras inquietudes y quebrantos, nuestros problemas, etc. En fin, que pasamos media mañana hablando los dos. Y también discutiendo, amigablemente claro.
Terminamos, nos despedimos y... ¡chao, chao!

De vuelta a casa, pienso ¡vaya!, qué agradable fue hablar con él. 
¿Y Dios? ¿Cuánto tiempo hace que no hablo con Él? Porque Él quiere saber de mí. Siendo, como es, mi mejor amigo, al menos por su parte, debería tener una mejor comunicación con Él. Y diaria a ser posible. ¿No se lo merece? ¡Claro que sí! Si le cuento todo a Fulano, ¿por qué no lo hago con quien más lo merece? Desde luego soy un desagradecido. Tengo que hablar con Él todos los días.

Es lo que quiere nuestro Padre, nuestro Creador que hagamos, y me comprometo a hacerlo todos los días. Estaré con Él un rato a diario. Es quien más lo merece, quien envió a su hijo unigénito a la Tierra, para pagar con su vida el precio de todos nuestros pecados y darnos Vida Eterna, y así acercarnos con total seguridad y confianza a sus amorosos brazos. Y Él también nos habla.
Fdo. M.Gayo







Líderes de Dios

“no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino como siervos de Cristo, de corazón haciendo la voluntad de Dios; sirviendo de buena voluntad, como al Señor y no a los hombres, sabiendo que el bien que cada uno hiciere, ése recibirá del Señor, sea siervo o sea libre.”
Efesios 6:6-8
Los que alcanzan lo máximo son aquellos que hacen siempre las cosas como para el Señor: sirven como para el Señor, evangelizan como para el Señor, trabajan como para el Señor.
El tema principal es hacer de corazón. Hacer las cosas por amor a Dios y no para la vista de los hombres. La condición del corazón es primordial para el Señor. Y los líderes de Dios son aquellos que se ocupan de ella. ¿Cómo? Renovando su mente con los principios de la Palabra, aplicándolos con fe en la vida cotidiana, andando en amor, alimentando la fe y caminando en sujeción a la autoridad.
Todos pueden poner caras de buenos, pero tarde o temprano los frutos se ven. El buen árbol da buenos frutos y el mal árbol, malos frutos. Todo depende de lo que sale del corazón.
Desafíese a crecer, desafíese a hacer cambios en su vida con la palabra de Dios. Es indispensable tener un corazón dispuesto a aprender para dejarse ayudar y corregir.

¿Qué sucede con los bebés y niños pequeños cuando mueren? ¿Dónde encuentro en la Biblia, la edad de la conciencia? - Preguntas y respuestas bíblicas

La Biblia nos dice que aunque un infante o bebé no haya cometido pecados personales, todas las personas, incluyendo a los bebés y niños pequeños, son culpables ante Dios, por la herencia e imputación del pecado. La herencia del pecado es aquella que es transmitida por nuestros padres. En el Salmo 51:5 David escribió, “He aquí, en maldad he sido formado, y en pecado me concibió mi madre.” David reconocía que aún desde la concepción él era un pecador. El hecho, muy triste, de que algunas veces los infantes mueren, demuestra que incluso los pequeños están afectados por el pecado de Adán, puesto que las muerte física y espiritual fueron el resultado del pecado original de Adán.

Cada persona, infante o adulta, es culpable ante Dios; cada persona ha ofendido la santidad de Dios. La única manera en que Dios puede ser justo y al mismo tiempo declarar justa a una persona, es que esa persona haya recibido el perdón por la fe en Cristo. Jesucristo es el único camino. Juan 14:6 registra lo que dijo Jesús, “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por Mí.” También Pedro declara en Hechos 4:12, “Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.” Por lo cual se deduce que la salvación es una elección individual.


¿Y entonces
, qué sucede con los bebés y niños que no tuvieron la posibilidad de hacer esta decisión personal? “La edad de la conciencia” es un concepto que enseña que aquellos que mueren antes de alcanzar “la edad en que son responsables”, son salvados automáticamente por la gracia y misericordia de Dios. “La edad de la conciencia” es la creencia de que Dios salva a todos aquellos que mueren, antes de alcanzar la habilidad para hacer una decisión a favor o en contra Cristo. Los trece años, es la edad más comúnmente designada como la edad de la conciencia, basándose en la costumbre judía de que un niño se convierte en adulto a esta edad. Sin embargo, la Biblia no proporciona un soporte exacto a la edad de los 13 años como la edad de la conciencia. Más bien varía de un niño a otro. Un niño ha pasado la edad de la conciencia, una vez que es capaz de hacer una decisión de fe a favor o en contra de Cristo.

Con lo anterior en mente, considere también lo siguiente; la muerte de Cristo es presentada como suficiente para toda la raza humana. Primera de Juan 2:2 dice que Jesús “… es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo.” Este verso es claro en que la muerte de Jesús fue suficiente para todos los pecados, no sólo los pecados de aquellos que, específicamente pudiendo, han venido a Él en fe. El hecho de que la muerte de Cristo fue suficiente por todos los pecados, permitiría la posibilidad de que Dios aplicara ese pago en aquellos que nunca tuvieron la capacidad o posibilidad para creer.