miércoles, 27 de noviembre de 2013

Dos Requisitos Para la Siembra - Finanzas

“Porque así dice Jehová a todo varón de Judá y de Jerusalén: Arad campo para vosotros, y no sembréis entre espinos” (Jeremías 4.3).
1º. Arad campos para vosotros:
Ocúpense ustedes, Pueblo de Dios, de progresar y no se enganchen en el desaliento general, no esperen a que el ánimo colectivo cambie, dispónganse ustedes a estar de buen ánimo.
Para los que trabajan para otros, tengan también su propio campo y aren en él, sin descuidar su trabajo, pero desarrollando también su propio emprendimiento.
En otra versión de la Biblia dice: “Trabajen la tierra no labrada”, lo que significa que busquen nuevas alternativas y trabajen, también, la tierra dejada por otros, además de retornar al terreno dejado de lado por nosotros.
Puede que no sea el momento más adecuado, humanamente hablando, pero es igual porque los hijos de Dios serán tremendamente bendecidos.
Eso sí, no te olvides de trabajar con inteligencia, conocimiento y profesionalismo. 

¡Reír y vivir! - Devocional

Mirando las redes sociales encontré un interesante y conflictivo apunte que decía: “La felicidad no es un sentimiento, es una decisión”. Esta frase resulta fácil de pronunciar pero difícil de aplicar, ¿cierto? Incluso ha sido una auténtica batalla existencial poder definir la felicidad. Entre la filosofía, el humanismo y la religión se han sostenido intensos debates, al proponer sus teorías y respuestas a las miles de inquietudes que surgen sobre la idea expresada.
Happy beautiful young woman outdoorMuchos han desistido en buscarla. Otros viven insatisfechos por no hallarla. Pero algunos continúan haciendo lo necesario para encontrarla y disfrutarla.
Actualmente el mundo mira con asombro la destrucción bestial, provocada por la enorme tormenta habida sobre el país de Filipinas. Caos, sufrimiento, muerte, escasez, inseguridad, temores, enfermedades,... lo menos que sienten es paz y alegría. Hace unas semanas fue México, al afrontar hasta cuatro ciclones de limitada intensidad pero de similares consecuencias, a causa de los vientos y la lluvia. ¿Quién puede ser tan necio en proponer que nuestros hermanos filipinos y mexicanos deben decidir ser felices, en medio de su dolor o pena?
La respuesta a esta cuestión debe ser contestada según el espejo con que se mira. Pero lo verdaderamente importante es que en la actualidad debemos reflexionar y respirar profundo, para seguir caminando en la ruta hacia la realización plena de lo que hacemos y lo que seremos. ¿Tenemos la capacidad para lograrlo?

Mi barca - Ánimo en mensaje

mi barca

Él les dijo: ¿Por qué teméis, hombres de poca fe? Entonces, levantándose, reprendió a los vientos y al mar; y se hizo grande bonanza. Mateo 8.26

La barca se mueve, la tempestad la mueve tan fuertemente
que podría tener miedo de caerme, pero no
No tengo miedo porque quien está dentro de mi barca es mi Padre
Es mi Padre y Él no me dejaré caer, pase lo que pase Él estará conmigo.
Mi barca parece inclinarse, parece que se rompe ya
Y el miedo empieza a suspirar en mis oídos diciéndome que llore ya.
Pero no, yo no lloro, quizás me preocupo, creo que es normal
Pero no tanto como para dejar de confiar.
La barca está moviéndose más violentamente,
Empiezo a creer que este será mi fin
Pero no lo será, ni el tuyo ni el mío
Porque tenemos a un Salvador que nos dice:
¡NO TE RINDAS, CONFÍA EN MÍ!
Y mientras el gran mar se viene hacia mí
Yo me voy hacia él con mi Jesús a cuestas.
Pasan las horas, pasan los días, pasan los “amigos”,
Y yo me quedo ahí en ese lugar quieto y mojado de soledad
Y podría quizás morir de tristeza, pero no.
Y se me pasa la idea de tirarme de la barca
Y dejarme comer por esa marea brava que no ha dormido nada
Y espera por mí, pero no lo haré.
Yo sigo en la barca y cierro los ojos y abrazo a Jesús.
Después de horas, días, “amigos”,
Un milagro viene a mi vida
Se acabó, la tempestad se acabó,
La tormenta terminó y yo tengo a mi Jesús conmigo en la barca
La marea entendió que nada podrá detenerme o hacerme desistir
Entendió que no estoy solo (a) porque tengo a un grande que cuida de mí.
Tengo a un gran Padre, Salvador, tengo todo lo que necesito
Y aunque la marea otro día vendrá con su braveza,
No lo hará, porque tengo en mi barca el refugio preciso para yo poder continuar.
Mi barca, gracias Padre por esta palabra.

Amigo(a) si la marea está persistiendo en derrotarte, si por un lado las cosas van bien y por otras muy mal, refúgiate en esa barca, en esa barca está Jesús.
Si las dudas y el temor se apoderan de tus nervios, dile a tus nervios y a esa marea
¡BASTA YA!, JESÚS ESTÁ EN MI BARCA Y NI TÚ, NI NADIE PODRÁ
DERRIBARME.
Es horrible que una marea, como un monstruo, abra su boca porque quiera comerte.
Lo entiendo porque lo vivo a diario, he llorado, he clamado, y siempre
que me refugio en la barca de mi Salvador, Él me dice: CONFÍA
CONFÍA, y yo aprendo en esa barca a confiar, a amar, a ser verdaderamente feliz.

¿Quién es el Espíritu Santo? - Preguntas y respuestas bíblicas

Hay muchos conceptos erróneos sobre la identidad del Espíritu Santo. Algunos ven al Espíritu Santo como una fuerza mística. Otros entienden que el Espíritu Santo es el poder impersonal que Dios pone a disposición de los seguidores de Cristo. ¿Pero qué dice la Biblia acerca de la identidad del Espíritu Santo? Dicho de una manera sencilla, la Biblia dice que el Espíritu Santo es Dios. La Biblia también nos dice que el Espíritu Santo es una Persona, un Ser con una mente, emociones, y voluntad.

El hecho de que el Espíritu Santo es Dios, es visto claramente en muchas partes de las Escrituras, como en Hechos 5:3-4. En este versículo, Pedro confronta a Ananías por haber mentido al Espíritu Santo, y le dice que él “no había mentido a los hombres sino a Dios”. Es una clara declaración de que mentir al Espíritu Santo es mentir a Dios. También podemos saber que el Espíritu Santo es Dios, porque Él posee los atributos o características de Dios. 

-Por ejemplo, el hecho de que el Espíritu Santo es omnipresente, lo vemos en Salmos 139:7-8 “¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia? Si subiere a los cielos, allí estás tú; y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás”.
-Luego, en 1ª Corintios 2:10-11 vemos la característica de la omnisciencia del Espíritu Santo. “Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aún lo profundo de Dios”. Porque ¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? Así tampoco nadie conoció las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios.”