viernes, 16 de noviembre de 2012

Perla preciosa - Devocional - vídeo

Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.
También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas, que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró. Mateo 13:44-46
La enseñanza enseña el valor incomparable de la salvación, ¿Has abandonado algo por Jesús? ¿Has encontrado esa perla preciosa y la cuidas? ¿La valoras? ¿O tienes imitaciones de perlas y tesoros que son más fáciles de cuidar?
Quien busca el reino lo hallará y con gozo abandonará todo para poseerlo, ¡Qué hermoso regalo! Y tan sólo es una comparación, ya que lo que nuestro Padre tiene preparado es más de lo que nos ofrece este mundo.
¿Realmente para ti es una perla preciosa y un tesoro lo que has encontrado en Cristo? ¿O habías olvidado que es un regalo?
 Él nos ha regalado esa perla preciosa, ese tesoro de haber encontrado la verdad, ¿La tienes escondida? ¿O le muestras esa perla a todos?
¡Que todos miren cuán hermosa es! ¡Cómo Brilla! ¡Y su valor inigualable, que salva, que restaura, que ama y perdona!
¡Guárdala! ¡Cuídala!  ¡Es tuya, es individual para todo aquel que ha adquirido a Jesucristo en su corazón!

Cuando te Sientas Estresado - Reflexiones

Hace algunos años fui al doctor porque estaba constantemente enferma. Me dijo que los síntomas eran resultado de estar estresada. Estaba durmiendo mal, alimentándome inadecuadamente y exigiéndome más y más, todo en nombre del servicio al Señor.
La palabra estrés era, originalmente, un término de ingeniería usado para referirse a la cantidad de fuerza que un balancín, u otro soporte físico, podía sostener bajo presión sin romperse. En nuestro tiempo el término estrés ha sido ampliado a incluir la presión mental y emocional.
El estrés es algo normal en la vida de todos. Dios nos ha creado con la capacidad de sobrellevar una cierta cantidad de presión y tensión. El problema aparece cuando nos esforzamos más allá de nuestras limitaciones, lo que nos puede llegar a ocasionar un daño permanente.
La paz está destinada a ser la condición natural de todo creyente en Jesucristo.  Él es el Príncipe de Paz, y en Jesús encontramos nuestra herencia de paz.  Es un don del Espíritu Santo que Él nos da cuando vivimos en obediencia a su Palabra.
La paz que Dios da se manifiesta en tiempos buenos o malos, cuando hay abundancia o escasez.  Su paz opera en medio de la tormenta.
Filipenses 4:6-7
No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias.
Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.

Todo en las Manos de Dios - Promesas de Dios para Ti

He tenido muchas cosas en mis manos y las he perdido, pero las cosas que he puesto en las manos de Dios son las que poseo siempre.
Si el Señor ha dicho a su corazón que vaya, tenga la certeza de que Él abrirá todas las puertas para que lo haga.
2 Timoteo 1:12
Por lo cual asimismo padezco esto; pero no me avergüenzo, porque yo sé a quién he creído, y estoy seguro que es poderoso para guardar mi depósito para aquel día.
Romanos 1:16
Porque no me avergüenzo del evangelio, pues es el poder de Dios para la salvación de todo el que cree; del judío primeramente y también del griego.
1 Corintios 1:8
el cual también os confirmará hasta el fin, para que seáis irreprensibles en el día de nuestro Señor Jesucristo.
1 Corintios 3:13
la obra de cada uno se hará evidente; porque el día la dará a conocer, pues con fuego será revelada; el fuego mismo probará la calidad de la obra de cada uno.
1 Timoteo 6:20
Oh Timoteo, guarda lo que se te ha encomendado, y evita las palabrerías vacías y profanas, y las objeciones de lo que falsamente se llama ciencia,
2 Timoteo
1:8 Por tanto, no te avergüences del testimonio de nuestro Señor, ni de mí, prisionero suyo, sino participa conmigo en las aflicciones por el evangelio, según el poder de Dios,
2 Timoteo 1:14
Guarda, mediante el Espíritu Santo que habita en nosotros, el tesoro que te ha sido encomendado.
2 Timoteo 1:16
Conceda el Señor misericordia a la casa de Onesíforo, porque muchas veces me dio refrigerio y no se avergonzó de mis cadenas,
2 Timoteo 1:18
que el Señor le conceda hallar misericordia del Señor en aquel día. Además, los servicios que prestó en Efeso, tú lo sabes mejor.
2 Timoteo 4:8
En el futuro me está reservada la corona de justicia que el Señor, el Juez justo, me entregará en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida.
Tito 3:8
Palabra fiel es ésta , y en cuanto a estas cosas quiero que hables con firmeza, para que los que han creído en Dios procuren ocuparse en buenas obras. Estas cosas son buenas y útiles para los hombres.

La pregunta que todos nos deberíamos hacer - Meditaciones, Reflexión - vídeo

En nuestro andar por esta vida nos formulamos miles de preguntas. Por ejemplo: ¿Por qué nací en esta familia? ¿Por qué no nací rico? ¿Por qué no tengo hermanos? ¿Por qué me siento tan solo? ¿Por qué no tuve éxito en el trabajo? ¿Por qué me equivoqué en la pareja que elegí?. En fin, son tantas las preguntas que cotidianamente nos hacemos y de las cuales muchas veces no tenemos respuesta, que terminan generando una gran incertidumbre en nuestro corazón; cuanto más nos preguntamos, más confundidos nos sentimos. Por eso  debéis haceros una pregunta que os va a guiar a la fuente de quien tiene todas las respuestas, una pregunta que vale la pena que os la hagáis porque cuando la podáis responder, entenderéis rápidamente todo lo que hasta ahora no comprendíais.
“Saulo, conspirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén. Mas yendo por el camino aconteció que, al llegar a Damasco, repentinamente le rodeó un resplandor de luz del cielo y, cayendo a tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? Él dijo: ¿QUIÉN ERES SEÑOR?”
Pablo estaba convencido de que conocía al Señor, porque creía que persiguiendo a los cristianos y consintiendo en la muerte de ellos “servía al Señor”. Él mismo dijo: “circuncidado al octavo día, del linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de hebreos; en cuanto a la ley, fariseo; en cuanto a celo, perseguidor de la iglesia; en cuanto a la justicia que es en la ley, irreprensible”. Era un legalista hecho y derecho, pero un día TUVO EL GRAN ENCUENTRO DE SU VIDA, en “pleno servicio a Dios”.
Mas cuando Pablo iba por el camino, Jesús le preguntó: “¿POR QUÉ ME PERSIGUES?”, porque perseguir a su iglesia, a su novia, era lo mismo que perseguirlo a Él. Pablo le contesta con otra pregunta: “¿QUIÉN ERES SEÑOR?” ¿Es que acaso todavía no lo sabía? ¿No era un fariseo de fariseos? Ellos SABÍAN TODO acerca de Dios, pero sólo intelectualmente; ellos amaban la letra pero no el espíritu de la letra. Pablo era un hombre irreprensible en cuanto a guardar todos los preceptos y mandamientos de Dios, o sea un hombre a quien nadie podía señalar de negligente o descuidado de sus deberes religiosos; Pablo en ese sentido era digno de elogiar, pues era fiel en todas sus actividades eclesiásticas.
Este hombre inteligentísimo, de un conocimiento bíblico extraordinario, que había estudiado a los pies del maestro Gamaliel, estaba haciendo una pregunta insólita: ¿”QUIÉN ERES SEÑOR?”. A lo que el Señor, sin tardar, le contesta: “YO SOY JESÚS”, “Yo Soy el Admirable, el Consejero, el Padre Eterno, el Príncipe de Paz. Yo soy el Gran Pastor de las ovejas, el Deseado de las naciones. Yo soy aquel que cuando muera en la cruz lo estaré haciendo por ti también Saulo, porque yo estoy viendo ESE MOMENTO. Yo soy Jesús a quien tú persigues. "Dura cosa te es dar coces contra el aguijón”, porque cuanto más lo perseguía, más se encontraba con Jesús.
Pablo comprendió, e inmediatamente hizo la segunda pregunta: “SEÑOR, ¿QUÉ QUIERES QUE YO HAGA?”
Hasta que no conocemos realmente a Jesús no podemos pretender servirle; Él no acepta nada que venga de un corazón que aún no se ha rendido a Él. Por eso dice esta historia que repentinamente Pablo quedó rodeado de un resplandor, de una luz del cielo, la gloria de Dios se manifestó para que comprendiera quién era el que le estaba hablando.
Por un lado Pablo le llama Señor, se da cuenta de que alguien sobrenatural le estaba hablando y supo que ese alguien era Dios. Sin embargo, aunque reconoció la deidad, aún NO LE CONOCÍA. Podemos SABER mucho acerca de Dios en cuanto a datos, referencias históricas, lugares geográficos por donde el Señor anduvo, e incluso tener las pruebas científicas de todo esto; y a pesar de todo podría ser que TODAVÍA NO HAYAMOS TENIDO UN VERDADERO ENCUENTRO CON ÉL.
“Y cayendo a tierra, oyó una voz…."Pablo se cayó del caballo, porque no pudo resistir la Presencia De Dios. Ahí está el secreto, sólo ante Su Presencia reconocemos quienes somos, tenemos que humillarnos y recibir su fresca unción; todo lo que antes nos parecía oscuro, de repente se hace claro a nuestro entendimiento. En ese momento PABLO ENTENDIÓ EL SENTIDO DE SU EXISTENCIA; entonces pudo decir: ¿SEÑOR, QUÉ QUIERES QUE YO HAGA? En la vida hicimos tantas cosas sin la guía del Espíritu Santo, que por eso tenemos tantas preguntas que no tienen respuesta; otras nos serán respondidas en el cielo; pero mientras caminamos por este mundo, al igual que Pablo, tenemos que reconocer nuestras limitaciones y empezar a preguntarle a Dios, dejar de caminar en nuestros propios pensamientos para dejar que entren los de Él en nuestra mente y en nuestro espíritu. El  mero hecho de ir a la iglesia “cumpliendo con todas las tareas” no nos va a cambiar la situación que estamos viviendo, debe haber una verdadera transformación de dentro hacia afuera.
Pablo tenía un “currículum” intachable, según él, sin embargo no era eso lo que le iba a avalar para servir a Dios en libertad.
Por eso no es necesario que vivas haciéndote preguntas, de las cuales quizá nunca encuentres la respuesta; o quizá tengas que reconocer que cometiste un error por haber elegido mal, por adelantarte al tomar decisiones. Sin embargo, ninguna de las respuestas a cada pregunta que te hagas podrá traerte una verdadera paz a tu corazón. Excepto la que Pablo se hizo aquel gran día en que tuvo el encuentro con Jesús.
Esa es la única pregunta que vale la pena que te hagas, porque cuando te des cuenta de QUIÉN ES JESÚS vas a descubrir un mundo nuevo de posibilidades para tu vida, vas a disfrutar de una vida plena en Él; con aciertos y desaciertos, pero en su compañía. Él va a acomodar cada situación de tu vida y la va a encauzar para que no te desvíes más. Él te va a dar una tarea para hacer, de la cual te vas a sentir orgulloso durante el resto de tu vida; porque cuanto más te involucres con Él, más vas a encontrar propósito a tu vida. Y todo el pasado quedará atrás, porque TODO SERÁ NUEVO PARA TI.
Y al igual que Pablo, un día podrás decir:

“No es que lo haya alcanzado ya, ni que sea perfecto; sino que prosigo por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús; por eso una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús”.


¡Qué Día! - Reflexiones en Vídeo

Todas las cosas nos ayudan a bien. Este vídeo nos muestra cómo cuando muchas cosas de las que nos suceden pueden parecer sin sentido, todo obra para el bien nuestro.
Cuando las cosas no son lo que solían ser y los tiempos difíciles nos rodean, es normal que comencemos a cuestionarnos a nosotros mismos y a nuestra motivación.  Pero es entonces cuando necesitamos vernos como realmente somos.
En primer lugar necesitamos creer que Dios tiene el control de todo, segundo creer en nosotros mismos totalmente.También necesitaremos una buena dosis de fuerte motivación, montones de pensamiento y actitud positiva. ¿Sencillo, verdad?  Sí, así es si tenemos o estamos dispuestos a aprender cómo colocar los requisitos anteriores a trabajar.
Hablemos con nuestros amigos y familiares sobre nuestra situación. Pueden ser un apoyo positivo. O tal vez sea tiempo de involucrar a un consejero de vida. Nuestro temor y resistencia intentarán frenarnos y un fuerte apoyo tendrá una enorme importancia para alcanzar nuestras metas.
Romanos 8:28
Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.